She ; Jibyeok

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Después de salir del hogar de niños, decidieron relajarse en un parque, disfrutando de un tranquilo momento. Jiyeong columpiaba a Sae mientras conversaban.

—¿Por qué crees que a tu hermano no le caigo bien? —preguntó Yeong, confundida.

—Bueno, él es un poco tímido y distante. Está acostumbrado a ser el centro de atención siempre, pero se acostumbrará —respondió Byeok.

Yeong asintió levemente.

—¿Has tenido noticias de Haneul? —preguntó Sae, preocupada. Son se fue a Canadá hace poco, y deberían estar pendientes de ella, ya que es una chica impredecible.

—No, no he sabido nada de Haneul. —respondió Jiyeong.

Sae se levantó del columpio y miró a Yeong, quien sintió un poco de nerviosismo.

—¿S-Sí? —preguntó Yeong, temiendo haber hecho algo mal.

Sin embargo, la expresión de Sae cambió a una sonrisa.

—Te amo.

En ese momento, cuando todo parecía perfecto y mágico, apareció un problema que pondría en riesgo su relación. Un chico de su edad se acercó corriendo a Jiyeong y la abrazó fuertemente antes de besarla en los labios. La sorpresa dejó a Jiyeong paralizada, sin saber quién era.

Saebyeok observó la escena con lágrimas en los ojos.

—¡Yeong, no sabes cuánto te he extrañado! —gritó el chico con una sonrisa.

Jiyeong no sabía qué hacer. Esta no era la primera vez que se encontraba en una situación complicada como esta. Intentó acercarse a Sae, pero el chico la detuvo.

—¿Cariño, quién es ella? ¿Vas a fingir que no me conoces? —preguntó él, confundido.

Yeong no lo conocía en absoluto y estaba desconcertada. La actuación del chico parecía convincente.

—Ya veo... —murmuró Sae antes de alejarse.

—¡KANG SAEBYEOK! ¡POR FAVOR, VEN! —gritó Jiyeong desesperadamente mientras el chico alto la retenía.

—¿Hiciste nuevas amigas mientras yo no estaba? —preguntó el chico, confuso.

Yeong ya no podía ver a su novia, o al menos, eso pensaba después de lo sucedido. Se liberó del agarre del chico y, con lágrimas en los ojos, le gritó.

—¿QUIÉN TE CREES QUE ERES? ¿CÓMO TE ATREVES A FINGIR QUE TENEMOS ALGO? —exclamó con fuerza, probablemente por primera vez en su vida.

El chico simplemente sonrió maliciosamente.

—Je... Ya lo descubrirás. Me llamo Son Taeyang.

—NO ME INTERESA TU NOMBRE, VETE DE AQUÍ —le ordenó Jiyeong, y el chico se marchó sin decir más.

Jiyeong corrió hacia la salida del parque, buscando a Sae, pero no la encontró. Desesperada, trató de llamarla, solo para descubrir que Sae la había bloqueado.

Justo cuando estaba a punto de llorar en un banco, recibió un mensaje de un número desconocido con prefijo de Canadá.

"Así que, ¿ya conociste a Taeyang? Mi hermano es lindo, ¿no? Soy Haneul, hola Yeong <33"