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JinSol estaba oficialmente desesperada, el llanto de YeRim había vuelto hace un rato, y es que luego de un gran esfuerzo la pequeña se había quedado dormida, lo malo es que no fue por mucho y JinSol estaba perdiendo opciones

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JinSol estaba oficialmente desesperada, el llanto de YeRim había vuelto hace un rato, y es que luego de un gran esfuerzo la pequeña se había quedado dormida, lo malo es que no fue por mucho y JinSol estaba perdiendo opciones.

JungEun llegaría en cualquier momento y no quería recibirla de esa forma con YeRim llorando incomoda en sus brazos porque trataba inútilmente de soltarse de su agarre. La peliazul le había tomado la temperatura pensando que podía tener un resfriado, o algo así, pero no, su temperatura estaba perfectamente normal.

—¡Unnie! — Se dirigió hasta donde escuchó el grito de su sobrina viendo a JungEun quitarse los zapatos en su entrada un poco sorprendida por como la bebé en sus brazos seguía llorando.

—¿Ella está bien?— JungEun preguntó y fue como un interruptor para YeRim que estiró sus brazos hacia la rubia sollozando. —Uh...—Guardó su teléfono en su bolsillo tomando a la pequeña entre sus brazos que se acurrucó allí calmando lentamente su llanto.

—¿Segura que no cuidaste antes de un niño? He estado casi cuarenta minutos tratando de calmarla.-—JinSol suspiró con alivio viendo a su pequeña sobrina divertida con la costura del suéter rosa que llevaba JungEun.

—A YeRim le agrada JungEun unnie, porque huele como a mamá.— ChaeWon mostró sus dientecitos en una sonrisa dulce que hizo a JinSol estrujar su corazón, YeRim debía estar buscando a su madre y a su padre estas dos semanas, y era obvio que no sería fácil acostumbrarse a estar en brazos ajenos, y menos los de la peliazul que antes de esto, no era muy cercana a ella.

— Puede ser eso...—La mayor susurró.—Iré a pedir la pizza, siéntete como en casa.—Le sonrió a la rubia que correspondió con una mucho más pequeña y asintiendo.

La mayor fue hasta la cocina llamando hasta el local, pidiendo lo que quería y entregando su dirección cuando le preguntaron, dejando de prestar un poco de atención a la llamada escuchó la risa escandalosa de YeRim que jugaba con JungEun seguramente y JinSol sonrió para luego darse cuenta de que seguía en la llamada, agradeció y cortó unos segundos después yendo hasta la sala.

lovely  -   lipsoulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora