lovely - lipsoul

O33

Al día siguiente la alarma la despertó, no quería hacer como el día anterior, no podía llegar tarde a su trabajo, sabiendo que en vacaciones había más gente y eso significaba más trabajo para la pobre SooYoung y un mejor bono para su sueldo de fin de mes.

ChaeWon no quería levantarse y JinSol tuvo que bañarla mientras revisaba que YeRim no se cayera de la cuna porque no paraba de saltar y moverse. Ayudó a la pequeña a vestirse y le cepillo el cabello como siempre hacía.

—Cuida a YeRim por un rato ¿Sí? yo vuelvo enseguida.

JinSol se dió una ducha rápida como ya acostumbró a hacer en esos meses junto a las niñas para no dejarlas sin supervison. Se vistió y fue a la habitación, YeRim balbuceaba en su cuna y al verla estiró los brazos en su dirección, no tardó en cargarla y buscó algo de ropa para ella y también unas prendas más para tenerlas en la mochila por si algo pasaba.

ChaeWon la siguió hasta la cocina donde consiguió subirse a una de las sillas para ver lo que JinSol hacía, dejó a su sobrina más pequeña en el suelo que comenzó a caminar como siempre.

—Te puedes caer de ahí, wonnie.

—No me voy a caer.

JinSol juró casi haber tenido un ataque cardíaco cuando en el mismo segundo que ChaeWon dijo eso perdió un poco el equilibrio haciendo la silla tambalearse, el reflejo más rápido que tuvo fue sostener a ChaeWon y suspiró aliviada cuando nada malo pasó. ChaeWon le sonrió avergonzada.

—Casi me matas del susto.

Dejó que se sentará en la silla y por fin comenzó a preparar el desayuno, YeRim estaba entre sus piernas diciendo palabras inentendibles y tirando de su pantalón, JinSol hacia las cosas con sumo cuidado para no provocar un accidente debido a la insistencia de YeRim y cuando ya sirvió el desayuno la cargó apretando sus mejillas y la dejó en su sillita para darle su desayuno.

ChaeWon no dejó de hablar como de costumbre mientras comía y JinSol le respondía lo que más podía sin dejarse llevar por la hora y no llegar tarde a su trabajo.

—Vamos, lávate los dientes mientras te hago un moño.

ChaeWon asintió yendo hacia el baño junto a JinSol donde le hizo la misma coleta de siempre.

—¿Nos quedaremos con JungEun unnie?

—¿Quieres quedarte con alguien más?

ChaeWon de inmediato negó haciendo reír a su mayor que dejó un sonoro beso en su mejilla.—Entonces te quedaras con JungEun.

—¡Sí!

Fue el turno de JinSol de lavar sus dientes y la pelinegra fue a su habitación para buscar su libro y sus lápices que llevaría, lo de siempre.

—¿Ya estás lista?

ChaeWon asintió llevando su muñeca de rapunzel en mano y JinSol llevó a YeRim de la mano hasta el departamento, no fue ni siquiera necesario para la más pequeña donde debía ir y balbuceando "mamá" golpeó la puerta con la palma de su mano esperando a que JungEun abriera y a penas lo hizo estiró sus brazos con una sonrisa que JungEun correspondió al instante.

JinSol esbozó una sonrisa hacia JungEun que al verla hizo lo mismo, o su mejor intento dejando ver sus mejillas rojas debido a ella. ChaeWon también la saludó con un abrazo y JinSol se despidió de ambas con un gesto.

Tomar el autobús un día de fin de semana se sentía diferente, el bus no iba lleno y la peliazul pudo sentarse un rato hasta llegar a su parada. Como era de esperar SooYoung ya estaba ahí, el local estaba casi vacío, la castaña oscura veía la pequeña televisión del local mientras tarareaba una canción y al verla sonrió saludandola.

—Ha SooYoung siempre puntual.—Se burló.

—Es eso o mi papá me mata—JinSol rió. Dejó sus cosas donde debía—. Llegaron cosas de perfumería creo. Papá dijo que te las dejara a ti, porque yo los voy a romper.

—Y tiene mucha razón.

—¡Solo fue una vez, Jeong JinSol!

siempre digo q voy a hacer maratón y nunca hago, jaja, no me maten