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—¿No has pensado en re integrarte a la universidad, presencialmente?

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—¿No has pensado en re integrarte a la universidad, presencialmente?

—Este último he pensado hacerlo...pero luego me da miedo, ¿y si no sale bien?

—Mi hermana decía que vivir del "Y si" solo te hacía vivir del miedo y no disfrutar una buena oportunidad.

—Tiene...bastante sentido. Podría intentarlo, c-creo.

Las dos seguían en el sofá, JungEun estaba acurrucada suavemente sobre JinSol que le acariciaba el cabello. Ambas sentían su corazón latiendo con fuerza con cada palabra y cada toque.

—Deberíamos esperar un poco para decirle a las niñas.—Jungeun dijo de repente

—Lo sé. Vamos lento, Jungie. No tenemos que seguir el ritmo de los demás, solo el nuestro.

Dejó un beso suave en su mejilla que hizo a la rubia sonreír y acercarse aún más a ella si es que era posible.

JinSol extrañaba esa sensación, ese sentimiento de que la felicidad es tan grande que tus mejillas duelen de tanto sonreír, eso de sentir la emoción por cada vena de tu cuerpo y querer saltar por todas partes hasta que todo tu cuerpo duela de la emoción. Ese sentimiento de que nada podrá hacerte más feliz.

—¿Por qué empecé a gustarte?—JungEun preguntó con suavidad.

—Estuviste dispuesta a ayudarme, aún cuando no lo merecía después de esa vez que te no te traté bien. Que te preocuparas por las niñas y por mí sin ser tu deber...de que te abriste conmigo y yo pude hacer lo mismo contigo sin sentirme obligada.

JungEun estaba con las mejillas rojas y mirando hacia otra parte, JinSol rió tomando su mentón para que la mirara y besó esos lindos labios rojos como si fuesen de porcelana, tan suave.

—No sabía que eras tan cursi.

—¿Te estás burlando de mí, Kim JungEun?

—Claro que no.—JungEun se levantó del sofá estirándose un poco y la peliazul la miró enderezandose en el sofá.—Debo irme, debe ser tarde.—La rubia dijo mientras tomaba su teléfono.

—No lo creo...

JungEun le mostró su teléfono.—Son las cuatro de la mañana.

—Oh...¿Quieres venir a comer "mañana"?

—Claro.—La peliazul se levantó del sofá acompañando a JungEun hasta la puerta.—Nos vemos "mañana."

—Buenas noches, Jungie.

JungEun le sonrió antes de entrar a su departamento y JinSol apretó los labios tratando de retener la enorme sonrisa que se escondía, cerró la puerta y con emoción fue hasta su habitación tirándose a la cama con una sonrisa pataleando. Ni siquiera tenía sueño, y tal vez estaría dando vueltas por algún rato más.

En la mañana ChaeWon la despertó de la mano de su hermana menor, JinSol se sentó en la cama viendo a la más pequeña gatear hasta subirse a la cama y frunció el ceño mirando a ChaeWon

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En la mañana ChaeWon la despertó de la mano de su hermana menor, JinSol se sentó en la cama viendo a la más pequeña gatear hasta subirse a la cama y frunció el ceño mirando a ChaeWon.

—¿Por qué YeRim está aquí?

—No sé. Me despertó a mí.—Chaewon se encogió de hombros.

—¿Se bajó de la cuna? ¿Cómo?

—Tía Ji, estaba durmiendo.

YeRim se sentó en su regazo sonriéndole mostrando sus pequeños dientes y comenzó a balbucear. ChaeWon de igual manera se subió a la cama a un lado de JinSol con ojos adormilados.

—Tía Ji, ¿Algún día puede venir HyeJu?

—...Supongo que sí, hay que preguntarle a su mamá primero.

—¿Y tú le puedes preguntar?

—Recuerdamelo más tarde ¿bueno?—ChaeWon asintió con una sonrisa ya más despierta.

JinSol miró la hora, eran recién las nueve de la mañana, incluso si durmió poco se sentía con energía, y eso también tenía que ver con que JungEun estaría con ellas ese día. No se lo diría a ChaeWon todavía como una pequeña sorpresa, de todos modos siempre se alegraba de ver a JungEun.

—Ustedes tomarán un baño luego del desayuno.

JinSol se levantó cargando a YeRim con ella y ChaeWon le siguió unos pasos más atrás a la cocina con su pijama puesto, a pies descalzos y el cabello desordenado, aunque Jinsol y YeRim estaban igual.

—¿Qué quieres desayunar?

—Galletas, las galletas de chocolate.

—¿Cuáles?

—Las que guardaste el otro día en este cajón.—Abrió el cajón y ahi se encontraban las galletas.

JinSol pensó que las había escondido bastante bien para no ser descubierta, al parecer su sobrina era más lista que ella.

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lovely  -   lipsoulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora