Empher#1 (Christopher X Emma)

Oh, oh.

Christopher.

Veo a Emma moverse, pero sigue sin despertar. En ese instante entra el doctor que pide hablar conmigo, salimos de la habitación y llegamos a su oficina. Tomo asiento.

—¿Qué pasa?

—Hubo algo que olvide mencionar.

—¿Olvidó mencionar algo de mi mujer? —hago énfasis en la palabra.

—Si.

—Pues hable —le ordeno.

Se remueve en su asiento y se aclara la garganta.

—Emma sufrió un golpe en la cabeza y-

—¿Y entonces?

—Y ento-

—Habla muy despacio.

—Ella pue-

—¿Puede que qué?

—Ella quiza-

—¿Esta diciéndome que ella puede perder la memoria?

—Si, pe-

—¿O sea que hizo mal su trabajo?

—No, y-

—Espero que mi mujer me recuerde.

—Hay pequeñas proba-

—No diga estupideces. Emma debe de recordarme o usted será despedido.

—Usted n-

—Si puedo hacer eso.

—Si, pe-

—Si Emma no me recuerda, le voy a quitar tres dedos, para que no se los meta a su mujer.

—¿Qué ti-

—Tiene que ver mucho.

—¿Pued-

—No, no puedo.

Cierra los ojos e inspira con fuerza. Me mantengo con los brazos cruzados esperando una explicación.

—Hable ya, déjese de estupideces.

—¡Lo haré cuando usted me lo permita!

—¿Acaso estoy tapando su boca o qué?

Gruñe y vuelve a mirarme.

—Su espos-

—No es mi esposa —entrecierro los ojos—. Bueno, aún no.

—Bueno, la joven sufrió un golpe bastante severo en la cabeza, luego de ello recibió los tiros —me entrega un papel—. Hay un tres por ciento de probabilidad que recuerde las cosas, pero-

—Hay un noventa y siete de que no lo recuerde.

—Exacto —asiente—, pero existe también la probabilidad de que con el tiempo recuperé la memoria.

Me pongo de pie, furioso.

—¡Esa probabilidad es un cinco por ciento! —golpeo la mesa dejando la hoja en su escritorio y salgo del lugar.

Vuelvo a la habitación, donde Emma parece querer despertar, por lo que me acerco rápidamente. Abre sus ojos con cuidado y me mira. Frunce el ceño y se pasa el torso de la mano por los ojos.

—Emma —intento tocar su cara, pero de inmediato la aleja.

Ay mierda.

—¿Quién eres? —mira a su alrededor— ¿Dónde estoy?