Mis Demonios [Synyster Gates] ○Book 2○

Capítulo 9 ○Pánico○

Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo empezando desde la espalda y recorriendose a todas las esquinas de mi ser, llenándolo de sudor frío. Un hueco en el estómago, un nudo en la garganta, las piernas y las manos empezaron a temblarme y sudarme, la visión y la respiración empezaba a fallar, el deseo infinito por vomitar me invadio y me debilitó aún más, volvería a suceder, iba a caer de nuevo... Solo habían pasado segundos que se sentían eternos en su transcurso... era un dolor lento e insoportable, todo esto me daba de golpe y realmente no sabia si podría soportar mas, pero sabía que esta vez no podía desmayarme... era hora de hacer algo.

-¿¡Que demonios quieres Ryan!?.-Grité exaltada y enojada como el mismo infierno, tampoco podía negar que tenía miedo, pero lo hice sacando las pocas fuerzas que no sabia donde tenía, debilitandome más. Noté que aunque había gritado, mi voz sonó temblorosa y nerviosa. Las ganas de vomitar se hacían más fuertes. [Vamos Alissa, eres fuerte, esta escoria no puede hacerte daño... ya no]

-Hey... Tranquila Zacks... ¿Acaso no puedo saber como está mi chica favorita?.-Rió tranquilo y seguro.

-¡No!... ¡Quien te dio mi puto número!

Me volví a sentir sucia y el lugar donde estaba parada no se sentía se seguro en lo absoluto, como si en cualquier momento pudiera venir desde atrás y atacarme.

-... Zacks... que no te sorprenda. ¿Podemos vernos? Digo, perdón... Quiero verte.-Aseguró y soltó una risita. Podía sentirlo sonreír triunfante del otro lado del teléfono. [Esa sonrisa... de la que alguna a vez estuve enamorada]

-¡No!, ¡Déjame en paz!.-Grité. Eso alarmó a Sean que llegó rápido y se colocó en el marco de la puerta mirandome preocupado, él susurraba algo y como no le hacía caso empezó a gritar él también pero al único que podía oir en mi cabeza era a Ryan. Estaba apunto de colgar cuando...

-Oh... Eso ya no se puede... ¿A ti no....-Rió burlón.-...Te han dado ganas de que lo de la última vez se repita?.-Rió.-No es mala idea, ¿O si?.-Dijo sonando divertido, al ultimo sacó una risita bizarra.
Me quedé callada, atónita, petrificada. Había oído bien... quería volver a hacerme daño.

-Interpretare tu silencio como un si... Se donde encontrarte.-Dijo frío y colgó.

El silencio inundó el baño, Sean se acercaba a mi lentamente, pero yo seguía en mi lugar, mirando a la nada... estudiando todas y cada una de sus palabras en mi mente, dejé caer el telefono, el miedo se apoderó de mi, no sólo el miedo... el pánico. Él vendría por mi, me volvería a hacer daño. Yo solo... volví a a caer.