My obsession.

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Último Capítulo.

Rusia, Moscú.

Caminaba de un lado a otro mientras miraba a los jueces. En estos momentos tengo muchos nervios, muchas competidoras de muchos países están representado su país.

Hasta al momento la mejor puntuación es la  japonesa Haruno Mitai; mi entrenador y yo estamos nerviosos por qué todavía no salgo.

Soy la número treinta y cuatro, ahora está una chica de Italia en la pista. En estos momentos siento que quiero llorar, salir corriendo pero no puedo hacerlo.

He llegado tan lejos como para huir, unos minutos más y ella sacó un buen puntaje; los jueces le dieron calificación de nueve.

Me encuentro sentada mientras veo mi teléfono, quise distraerme un poco más, faltan dos patinadoras para que me toque.

Me puse mis audífonos y comencé a escuchar música para relajarme un poco mientras mi entrenador hablaba con otro entrenador. Cerré un poco mis ojos y una canción que hace mucho tiempo no escuchaba.

On Melancholy Hill.

Abrí mis ojos rápidamente y esa canción lleva años que no la escuchó, recuerdo ese día que Jimin y Yo tuvimos una cita; ambos caminamos por el parque ecológico, tomados de las manos.

Ese día hicimos un picnic, ese día fue divertido por qué Jimin se asustó con un perro, ambos platicamos sobre nuestro futuro, apreciamos la naturaleza, comimos demasiado hasta el punto que nuestros estómagos explotarían, jugamos a las escondidas, nos besamos sobre el pasto verde.

Una pequeña sonrisa melancólica apareció en mi rostro.

"Me gusta estar contigo"

"¿Ah sí?"

"Si, somos nosotros mismos"

"Me gustas Jimin"

"También me gustas ___"

Ambos cantamos esa canción, como si fueramos la medicina de cada uno. La repetí una y otra vez esa canción pero fui interrumpida por mi entrenador.

Me levanté de mi silla y caminé hacía la pista; los nervios comenzaron y mi corazón latía con fuerza.

Al llegar a la pista pude ver a muchas personas mirándome, gritar, sentía enormes ganas de vomitar por los nervios pero mi entrenador me dió ánimos.

Me dió un abrazo mi entrenador y me puse mis patines, mi traje es de color lila con líneas rosas. El brillo resaltaba y lucia muy bien, mi cabello recogido en un chongo y mi maquillaje natural.

Patine hasta llegar al centro de la pista de hielo, el silencio se hizo presente en el gimnasio de Moscú. Crucé un poco mis piernas y eleve un poco mis brazos e hice lo mismo.

Cerré mis ojos y respiré profundo y cuando la música comenzó a sonar fue cuando los abrí.

Good is a woman.

Fue la canción que escogí para esta noche, el mostrar el empoderamiento femenino.

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