El azote de la horda

QUINCE

Avance de la oscuridad

Reino de Santlown, ducado de Santlown, condado de Santlown

Santlown, puerto de Santlown, almacén abandonado

La luz entraba de manera tenue por la entrada del almacén abandonado del puerto, era como si el sol temiese lo que se estuviese cociendo en esa oscuridad pura y maligna que se había apoderado del edificio; por precaución intentaba enviar los mínimos rayos para cumplir con su labor.

Pasaron tres semanas desde los sucesos de la plaza del mercado principal. Los días transcurrieron con algo de paz desde el incidente, sin ningún percance comparado con ese oscuro suceso, pero cada ciertos días ocurría que alguno que otra confrontación entre varías personas; ayer veinte ciudadanos comenzaron a intentar asesinarse con alevosía acabando con la vida de tres de ellos, uno ahogado en un pozo sin piedad, otro con la cabeza reventada a base de puñetazos mientras reía descontroladamente y sonreía de manera oscura, y el último murió sintiendo como sus costillas eran destrozadas y desgarraban sus pulmones y corazón; hacía tres días cinco guardias se volvieron locos y ensartaron con sus lanzas a cuatro civiles como cerdos, el único mal que hicieron esas personas fue pasar cerca de ellos; una semana antes una masa de cincuenta granjeros entraron en tropel en la ciudad, armados con sus utensilios para trabajar el campo, abriéndose paso hasta la Catedral del Mar acuchillando a tres personas, muriendo dos de ellas, cuatro guardias de la ciudad, cayendo uno por las heridas producidas, y ocho miembros de las patrullas del mar, con seis siendo enviados a los dominios de Diraura de maneras grotescas.

Antes esa oleada de asesinatos y altercados violentos el rey Arwin convocó una reunión del consejo real para intentar remediar y poner fin a esta situación. Si esto continuaba lentamente se perdería el control de la ciudad y, por ende, peligrarían sus vidas y posiciones de poder; por esa razón el Gran Sacerdote Bert decidió ayudar a la guardia de la ciudad con las patrullas del mar para mantener el orden y la paz en la ciudad.

De repente las disputas entre esas dos fuerzas se detuvieron por el momento y se ayudaron para detener los ataques entre los ciudadanos; igualmente eso no quería decir que el pulso entre la reina y el Gran Sacerdote hubiese terminado ya que ninguno de las dos figuras había enterrado el hacha de guerra, sin preocuparse al romper sus treguas o que les tachasen de no tener el honor.

Con eso en su cabeza, la reina movió sus hilos para que la guardia de la ciudad expandiese su influencia en la ciudad baja y estuviese más atento a los barrios más pobres. Al mismo tiempo Samantha reforzó en la media de lo posible a las tropas estatales estacionadas en la capital mandándoles refuerzos, mejores equipos, mejores alimentos y redujo sus horarios de guardia para que hubiese un intercambio de patrullas constante. De esta manera los descansos aumentarían junto a un relieve todavía más rápido al sentir que dentro de un par de horas podrían hacer lo que quisiesen sin preocuparse de patrullar su ciudad al estar llena de patrullas.

Por otro lado, el Gran Sacerdote multiplicó a sus patrullas del mar al pedir públicamente la unión de cualquier devoto a Dereiro para que se adhiriese a sus fuerzas armadas. Su objetivo era reforzar la presencia de sus fieles en el patrullaje de la ciudad y detener la oleada de ataques y locuras que había infectado la ciudad, pero también quería eliminar la presencia en las calles de los apoyos a la reina que, desde el abandonó de bastantes nobles de Santlown para refugiarse en sus fortalezas, había intentado mantener su poder tal como estaba antes de la partida de su marido o incluso superarlo.

Además en los puestos de poder Hans Grohl, mariscal de la guardia de la ciudad, barón de Sherpengem y Guardián de Harelstel había ganado más relevancia al ser el máximo dirigente de la fuerza actual de la reina, como el pueblo había comenzado a denominar a la guardia de la ciudad. También sobre el descendiente de Arwin Grohl, antiguamente conocido como Arwin Fleischman, fundador de la casa Grohl había caído debidamente un rumor que se contaba que era amante de la reina y, por esa razón, era el motivo del porque la madre del actual rey favorecía tanto al noble menor.