Help me, I'm in the dark

Cap. 22 Celos

Pov. Tn

-Hey, amor despierta que se te hará tarde.

Escuché a mi mamá decirme mientras despertaba, a lo que yo solo asentí al mismo tiempo en que pensaba en que aún quería seguir durmiendo para después, estirarme y salir al baño a hacer mis necesidades, lavarme la cara para por último entrar, ponerme algo de crema y enseguida ponerme mi uniforme.

-Th, Tp, despierten que no es temprano y el desayuno ya está en la mesa.

Dijo mi mamá al mismo tiempo en que seguía haciendo cosas, para en eso antes de que me diera la indicación me senté en la mesa frente al plato de cereal y comencé a comer apresuradamente, en ese momento mi hermano y mi papá ya estaban casi listos aún con varias quejas por tener que despertar precisamente temprano.

-Mamá ¿No puedo faltar hoy a la escuela?

Cuestionó Th mientras se sentaba a desayunar tallando uno de sus ojos con un leve puchero.

-La única excusa que tienes para no ir es que estés enfermo o te sientas mal, así que no, ni lo sueñes.

Dijo ella en un regaño a lo que fue correspondida con un quejido por parte del ya mencionado logrando hacerme negar levemente con la cabeza.

-He terminado.

Dije mientras me limpiaba los residuos de comida de la boca a lo que mi mamá habló.

-Bien, entonces ya ponte un suéter y agarra tus cosas para acompañarte.

A lo que yo asentí, y sí, desde que habíamos llegado aquí algunas cosas cambiaron, como por ejemplo ésta donde mi papá se iba a dejar a mi hermano a la escuela y mi mamá me dejaba en el transporte público para después irse ella a su trabajo debido a que algunas zonas  del lugar eran peligrosas.

-Ya terminé.

Dijo mi hermano de la misma forma que yo al mismo tiempo en que mi papá, quien también ya había acabado por lo que limpiaba la boca con una servilleta y enseguida tirarla al bote de la basura.

-¿Pues qué esperan? Ya vámonos que se hace tarde.

Reclamó mi mamá así que todos le hicimos caso, poco después pasó rápido el tiempo de camino entre mis audífonos y mis pensamientos hasta que sin darme cuenta ya había llegado a mi salón, que como siempre ya se encontraba lleno de alumnos ya sea platicando o incluso jugando cosas como "verdad o reto" lo sé es tan típico que ya hasta parece algo cliché.

-Dios, quisiera estar ahora mismo durmiendo.

Pensé mientras me dirigía sin muchos ánimos a mi lugar hasta que de pronto recordé lo sucedido con Jack.

-Santo Dios, lo de ayer ¿Realmente sucedió o solo lo soñé?

Me cuestioné a mi misma una vez que ya estaba en mi lugar sintiendo al mismo tiempo como mi sangre subía poco a poco a mis mejillas o bueno a mi cara en general, hasta que algo o mejor dicho alguien interrumpió mis pensamientos.

-Hola muñeca ¿Te encuentras bien, por qué pones esa cara?

Me cuestionó el mismo chico que solía molestarme siempre, así es hablo de Uriel.

-No estoy e humor ¿Sí? así que mejor ve a tu lugar que a lo mejor ya mero viene la profesora.

Le dije sacando mi cuaderno y mi lapicera tratando de ignorarlo lo más que podía, hasta que el rio y acercándose más a mi al punto de acorralarme contra la mesa me dijo.

-Vamos linda, sabes que no podrás resistir para siempre, digo dudo que esa carita sea por estar pensando cosas santas.

A lo que yo enseguida lo empujé fuertemente y le grité.