....En la sede de Shadows....
-¿Por qué no contesta su teléfono?- se preguntaba Seung Ki con el móvil en la mano.
-Si estás hablando de Rainie, me dijo que iría a ver cómo seguía de su enfermedad Yoochun- le dijo de pronto la directora que se acercaba a su escritorio.
-Ha...está bien...- sólo logró responder con desilusión en su cara.
Sintió cierta incomodidad, no era para nada de su agrado que Chen Lin estuviera con Micky...y mucho menos a solas en un departamento.
-Tal vez yo también debería ir a ver cómo está nuestro compañero- dijo inmerso en sus pensamientos.
-¿Es que sientes celos?- indagó pícaramente la mujer.
-¿Celos? No sé a qué se refiere- contestó haciéndose el desentendido -Bien, entonces continuaré trabajando para que después no comiencen rumores infundados- terminó diciendo mientras colocaba sus dedos en el teclado.
....Al terminar el día en el departamento de Ko So Young....
Estaba sola y ya se había terminado algunas botellas de soju, ahora se ahogaba en un whisky que tenía guardado.
Sacó un álbum de fotos que estaba escondido en el fondo del placard y las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas incluso antes de abrir ese doloroso libro de memorias.
Se dirigió tambaleándose hasta su cama, con el álbum en una mano y la botella en la otra.
Su cuerpo temblaba por la borrachera, por los maravillosos recuerdos, por el dolor, por la impotencia, por la incertidumbre, por el desconcierto, por la infelicidad...por todo lo que no podía olvidar.
Se sentó en la cama y comenzó a pasar las hojas, viendo con detenimiento y acariciando cada una de las fotografías mientras las lágrimas no dejaban de brotar.
La primera foto era de una chica y dos muchachos muy jóvenes, riendo y haciendo poses graciosas en un parque.
La siguiente, era de la graduación de la universidad, los mismos tres abrazados y con amplias sonrisas.
La que continuaba, era claramente de Ko Young riendo cargada en las espaldas de uno de los chicos.
La que seguía era de los dos hombres sentados bajo un árbol, mirándose mutuamente, como si estuvieran conversando felizmente.
Se detuvo por un momento, dudó si debía continuar pasando de página.
Llevó el pico de la botella a su boca y bebió un gran trago, terminando las últimas gotas de la fuerte bebida.
Las siguientes tomas mostraban la felicidad de una pareja el día de su matrimonio, riendo, bailando, abrazándose, besándose.
Rompió en un profundo llanto y luego de un momento sintió que le faltaba el aire, pero no podía detener su angustia.
-¡¿Cómo nos pudiste hacer esto?!- preguntaba gritándole a las fotos.
Las observaba con rabia y dolor, eran la prueba de que todo lo que ella poseía en su mente y corazón no era su imaginación, que en realidad alguna vez todo eso fue verdad, que hacía mucho tiempo atrás las cosas habían sido muy diferentes a la cruda realidad del ahora.
Golpeaba con sus puños el libro que contenía todo aquello que alguna vez había sido su mayor tesoro.
-¡¿Cómo ME pudiste hacer esto?!- sintiéndose desesperada -Dejaste todo atrás por tu avaricia...maldito bastardo ¡Te odio Dong Gun!-
La mujer inmersa en sus pensamientos y en su dolor no escuchó el ruido de unos pasos que se acercaban sigilosamente.
-¡Hiciste que me enamorara de ti, hiciste que me casara contigo! ¿Y después te vas sólo para hacer todo lo que repudiamos?... ¡¿Acaso no tienes conciencia?!- regañándole a las fotos y su rostro estaba desfigurado por la catarata de llanto que continuaba cayendo.
De pronto escuchó fuertes ruidos que provenían de la sala, parecían ser golpes, como si estuvieran luchando.
Se acercó lentamente con la botella levantada sobre su cabeza y vió que Sang Woo estaba dándole un fuerte puñetazo al rostro de un hombre encapuchado.
El desconocido caía sobre la pequeña mesa del living, rompiéndola en varios pedazos.
El director se arrojó sobre el otro mientras continuaba golpeándolo, el lugar se había convertido en un campo de batalla y todo alrededor comenzaba a estar despedazado.
El amigo de la mujer también estaba recibiendo algunos golpes, incluso le había comenzado a sangrar un lado del labio inferior y su saco estaba rasgado.
El misterioso hombre logró zafarse de las manos de Sang Woo y viendo que no tenía salida, tiró una silla hacia la ventana.
Los directores se taparon la cara para cubrirse de la explosión de vidrios y el desconocido saltó.
-¡¿Está loco?! ¡Estamos en un noveno piso!- gritó la mujer corriendo para mirar hacia afuera.
El director también se acercó y ambos vieron el cuerpo del encapuchado destrozado sobre el asfalto de la calle en un río de sangre.
So Young tapó su boca con sus manos, todo ese asunto le había quitado de golpe toda su embriaguez.
Su amigo la abrazó, tratando de calmarla y respirando agitado por la lucha.
-¿Cómo es que estás aquí?- preguntó la mujer.
-Vine a ver cómo estabas porque recuerdo que hoy es tu aniversario de bodas... entonces vi la puerta abierta y a ese tipo aquí-
Luego de un momento se comenzó a escuchar el sonido de un teléfono.
-¿Es el tuyo?- preguntó la mujer.
-No...creí que era el tuyo...- respondió el otro.
Comenzaron a buscar por el piso, tratando de encontrar de donde provenía el sonido.
Sang Woo encontró un móvil debajo de uno de los sillones.
-Se le debió caer cuando peleaba contigo- dijo So Young mirando el aparato.
El celular volvió a sonar y ella contestó.
-¿Quién eres?-
-¡Ha! Hola querida, no esperaba que fueras tú la que contestara- se escuchó del otro lado -Me alegro escuchar tu voz después de tanto tiempo-
La mujer apretó un botón activando el altavoz.
-Dong Gun...- dijo con amargura -Debí haber supuesto que tú tendrías algo que ver en todo esto... ¿Por qué enviaste a alguien a atacarme? ¿Es que tienes miedo que pueda encontrarte?- preguntó sonando altiva pero sintiendo que moría por dentro.
-¡Feliz aniversario amor!- mostrando desvergüenza con el tono su voz -Te encuentras bien ¿cierto? Mis órdenes en realidad fueron que te trajeran conmigo sin lastimarte- explicaba el líder de Dark del otro lado del teléfono -Es que extraño a mi querida y hermosa esposa- insolentemente.
-¡No seas cínico!- respondió -Hace años que tu y yo no tenemos nada que ver...- asqueada de bronca.
-Si tú respondiste es porque seguramente mi hombre está desmayado o muerto y tú no tienes la suficiente fuerza cómo para enfrentarte a él...asique supongo que mi querido amigo te está haciendo compañía-
-Aquí estoy Dong...- respondió el director de Shadows.
-Lo sabía- escuchándose una pequeña risa -Dime ¿ya has ocupado mi lugar? ¿O es que soy tan increíble que ella aún no me ha olvidado? O mejor dicho...tal vez tú no seas lo suficientemente bueno como para hacer que ella me olvide-
-¡Ya deja de hablar idioteces!- gritó enfurecida -Hace mucho tiempo juré que te atraparía y lo cumpliré-
-Está bien mi amor, sé lo testaruda que puedes ser...jugaremos tanto tiempo como tú quieras, sabes que esto no me resulta para nada aburrido- y terminó diciendo -Sang, me alegro que estés cuidando bien de ella, ahora estoy más tranquilo-
-Dong Gun, entrégate de una vez- dijo con toda la calma que pudo juntar el director -Tarde o temprano todo terminará ¿Por qué hacer que personas inocentes sufran por todo esto?-
-Mi querido y mejor amigo...sigues siendo tan inocente como cuando éramos jóvenes ¿Realmente crees que si me atrapas todo acabará?- terminó preguntando antes de colgar.
Los directores se miraron y ella rompió en llanto otra vez, tapando su rostro con sus manos.
Sang Woo la rodeó con sus brazos y respiró hondamente.
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SHADOWS
Fanfiction"Shadows" Es el nombre del equipo secreto de las fuerzas especiales en Corea del Sur. Historias que se irán entrelazando como una telaraña, el pasado se mezcla en el presente, el amor se confunde y el futuro nunca fue tan incierto... Género: Policia...
