LIBRO 1 DE LA SAGA DESTINADOS:
Ser estudiante universitario no es fácil y menos cuando la carrera que escogiste es medicina.
Esta historia, mi historia, surgió con la existencia de una simple regla que me sugirieron seguir al pie de la letra si no...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¿En qué rayos estaba pensando al tener relaciones sin protegerme?
Déjame te respondo: ¡Pues en nada! Es que tú llevas la cabeza de adorno.
Creo que me deje llevar por las hormonas y no estaba pensando.
¡¿Qué no estabas pensando?! En eso estamos de acuerdo, pero ya deja de culpar a las hormonas por todo.
Mi madre estaría muy decepcionada; no solo rompí la sagrada regla de no intimar con los especímenes exóticos de la medicina, sino que además, ¡me di el lujo de revolcarme y no exigirle usar condón!.
¡Yo estoy decepcionada! Así que ni me imagino a tu madre.
¿Por qué carajos existen las voces internas? Son un fastidio
(...)
Cuando llegue a la habitación, revise por los alrededores por si aparecían Sara o Chloe. De milagro, aún no había nadie.
Revise mi teléfono y tenía un mensaje de Chloe.
"No nos esperes despierta esta noche... Nos quedaremos en la casa de Alex"
Al ver ese mensaje, en parte, me sentí tranquila, porque no tendría que dar explicaciones, pero ahora tenía otro problema en mi cabeza...había tenido relaciones con Ethan cerca de mi ovulación y no use método de barrera.
Era inteligente; sabía que si no tomaba la pastilla del día después podría quedar embarazada.
Por suerte tenía varias conmigo, aunque las usaba para emergencias, como en este caso.
Cuidaba mucho mi cuerpo y me informe muy bien de todos los métodos anticonceptivos; sus ventajas y desventajas.
Me tome una y me acosté a dormir.
Estaba teniendo un hermoso sueño... con Ethan, pues con quién más.
Él había ocupado y poblado cada espacio de mi ser y por lógica, tenía que estar en mis sueños.
Me desperté cuando la estrepitosa alarma empezó a sonar...ni me quería levantar y recién era martes.
Mire mi calendario y vi que faltaban dos semanas para los exámenes parciales.
No puede ser, que infelicidad. Y encima todo lo que había que estudiar para introducción.
Saque eso de mi mente por un momento y me dispuse a bañarme y a alistarme.
Salí de la habitación rumbo al campus y en el camino me encontré con Axel y las chicas. Nos saludamos y entramos a la clase, hoy nos tocaba con la Dra. Morales, apodo que gustosamente se ganó por darnos tanta clase de moral. Espero que los sermones de hoy sean cortos.
