Solo Si Es Contigo (2da parte) BakTd/TdBk

Capítulo 5. Nuestra complicidad

Shinso

– Estás haciendo... mucho ruido, Kami. – Me quejé en un susurro, dejando, una hilera de besos en su cuello, mientras podía sentir su respiración agitada luchar contra los gemidos ocasionales que dejaba escapar en los casilleros del vestidor en el área de entrenamiento más próximo al auditorio.
– Y... ¿de quién... es la culpa? – Tomando mi rostro en sus manos, para que ahora depositara mis besos en sus labios. Adoraba cuando me sonreía mientras nos besábamos.

Estábamos apoyados en uno de los casilleros traseros, lo suficientemente ocultos como para no ser tomados por sorpresa. Me encantaba su complicidad y cómo, pese a que me insistía que no le hiciera cosquillas, nunca me apartaba.

El uniforme de invierno interponía con aún más tela mis deseos se sentirlo cerca de mí.

Nunca era suficiente.

Cuando iba de visita a su residencia, si bien llegué a llevarme bien con sus hermanos, no teníamos privacidad y, ni qué decir de mí. Prefiero colgarme con mi arma de captura antes de que alguno de mis padres o, peor aún, mi hermanita me encuentre en una situación que jamás tendría las agallas para explicar. Es justo por esa misma razón que anhelaba y apreciaba tanto estos momentos a solas, donde podíamos disfrutar del otro sin interrupciones.

Sin embargo, tener de fondo la voz del director Nezu dando inicio a la ceremonia, no era lo más romántico, pero nada que la risa de Kami no solucionara.

Ese día, era la ceremonia de los de nuevo ingreso. Fue entonces cuando le sugerí a mi novio que tenía en mente algo mejor y, pronto estuvo de acuerdo conmigo o, casi. Pese a su aparente negativa, no tardé mucho en convencerlo y, para ser sincero, no nos perdíamos de mucho estando aquí. La voz amplificada del director rebotaba sin dificultad en los casilleros, enterándonos así de los pormenores, o más bien, de la repetición de lo que dijo el año anterior.

– Se van a dar cuenta... si no estamos presentes – entre la separación de nuestros labios para tomar aire.
– Regresaremos antes de que lo noten – acercándolo a mí, esta vez, aún más.

Aferró sus dedos en los cabellos de mi nuca, enviando una descarga a través de mi columna que, quizás, podría o no ser manifestaciones de su don.

A veces venía a mi mente la situación tan caótica por la que pasamos el año pasado, y tenerlo conmigo, aquí, ahora; no podía hacerme más feliz, hasta el punto de parecerme irreal.

No lo cambiaría por nada.

Solo un fuerte aplauso nos separó y esa era la señal para el final de nuestro escape.

– Ahora sí debemos regresar – con la respiración aún agitada.
– De acuerdo – resignado. El tiempo con él me parecía extremadamente corto, pero creo que no podría haberme contenido de haber durado un poco más.

Aprovechando que estaban aplaudiendo de pie, nos escabullimos hacia la parte de atrás, en la última hilera. Sin embargo, la mirada pícara de reojo de Sero, me confirmó que eso no le fue desapercibido, haciéndome un ademán para que me percatara de que, el segundo botón de mi camisa, estaba desabrochado. Si hubiéramos tenido más tiempo, quizás no solo uno, sino más, habrían terminado en igualdad de condiciones.

La ceremonia concluyó sin pena ni gloria, salvo por la mención del desempeño de tres nuevos alumnos de los que eventualmente me enteraría.

– Hola, Shinso – apoyándose de mi hombro. Sero cada vez más era más parecido a una jirafa.
– Sero – Estábamos de camino a nuestro nuevo salón, donde seríamos introducidos a nuestro nuevo programa de clase por nuestra nueva maestra a cargo. Todo nuevo.
– No te vi en casi toda la ceremonia. ¿Tanto te tardaste en acomodar tu camisa esta mañana?
– Sí, más de lo que crees.
– ¿Aún con la ayuda de tu novio? – que, por cierto, estaba poniéndose al día con el explosivo que tiene de amigo.
– Supongo que se interpusieron otros asuntos...
– Qué pena que Kaminari no te haya dado una mano – comentó Ashido, apareciendo en mi costado disponible. – ¡"Otros asuntos" no acapares a Bakugou tú solo! – dirigiéndose hacia ellos. Está de más decir que Kami no podía estar más confundido al escucharla.