El principio

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S: Ella dijo que te fueras,  ¿acaso eres idiota? - Las dos se miraron como si se fueran a matar y yo solo quería que me tragara la tierra.

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Sandra y Venable no dejaban de mirarse como si se fueran a matar.

W: Yo creo que la idiota es otra, piensas que ella ¿alguna vez te hará caso? Déjame mencionarte que estás locas si piensas eso.-Venable la observaba fijamente y Sandra hacia lo mismo.

S: Yo solamente la estoy cuidando del daño que le causaste. Fuiste tú quién la golpeó y maltrató. - Sandra poco a poco se fue acercando a Venable. - Estás podrida por dentro Venable, tu odio es tan grande que lastimas a las personas que te estiman.

W: Tú no tienes idea de nada. - Escupió venable.

S: Solo déjame decirte que eres un ser repugnante. - Yo estaba viendo esa escena atónita.

W: Tú no me hables de repugnancia. Eva sabe muy bien lo que hizo. - Venable dio vuelta su cabeza para mirarme. - Yo no soy su amiga, señorita Brown. Me debe respeto y ese fue su castigo.

S: Nada te da el derecho a golpearla. - Sandra se acercó a mí. - Venable, tienes que irte antes de que contemples una escena la cual te rompa el corazón, bueno... si es que tienes corazón. - Sandra miró mis labios y humedeció los suyos con su lengua.

W: Esto no se quedará así. - Dijo Venable antes de marcharse.

E: Yo no sé qué formular. - Me sentí un tanto incómoda debido a la cercanía de Sandra.

S: No te preocupes cariño, siempre estaré aquí para defenderte. - Deposito un beso en mi frente y me acostó en la cama. - Descansa, mañana será un día muy largo.

Después de que Sandra se fuera me quede pensando en Venable y por qué me había golpeado.
No creo que esté celosa, ella me rechazó.
Si se entera de que me bese con Alice, no sé qué haré.

Mi espalda estaba muy adolorida, y me dolía mucho al darme vuelta en la cama, así que preferí dormir de boca abajo.

Despierto con mucho dolor y decido no levantarme.

Me quedo un buen rato acostada y en ese momento tocan mi puerta.
Tenía miedo, y ¿si era venable otra vez?  Y si ¿me golpeaba de nuevo?

La puerta se abrió lentamente dejando ver a la mujer pelirroja.

Entro despacio a la habitación y al percatarse de que estaba despierta me miró un tanto arrepentida.

W: Ho_hola, ¿dormiste bien? - en sus manos traía una cajita.

No le respondí y miré hacia otro lado.

W: ¿Por qué no te levantas? - ¿Esta mujer es estúpida? Tengo mi espalda molida. -Háblame.

Guarde silencio y evitaba mirarla.

W: ¡Háblame! Por favor. - sentí su voz quebrarse, pero no me importó.

E: Vete, y es la última vez que lo digo. - Sentí como soltó un suspiro y se fue, dejándome sola.

Sentía una pena enorme al recordar lo que Venable me hizo.
Quizás venable era como mencionaban, y yo la ciega jamás pensé que Venable sería capaz de eso.

Pasó una semana desde lo ocurrido y Venable no se dignaba a mirarme, en clases cada vez que tenía la oportunidad me hacía sentirme la cosa más insignificante del mundo.

Sandra por otro lado, era la persona más hermosa que conocí, era tan alegre, se preocupaba por mí, en las noches venía a curarme mi espalda y se quedaba un buen rato hablando conmigo.

Los chicos estaban preocupados, sin embargo les decía que me había caído y que no se preocuparan.

Ahora estaba en mi habitación tratando de dibujar el paisaje que tenía ante mis ojos. Empezó una fuerte lluvia, que me nubló toda la vista.

Se escuchaban relámpagos, el fuerte viento que golpeaba mi ventana, y el hermoso sonido de la lluvia.

Salí de mi habitación rumbo hacia el bosque, quería ir a investigar que pasaba ahí dentro.
Salí de mi cuarto sin que nadie me observara.

Empecé a bajar las escaleras y llegué al primer piso, pude contemplar que venable se dirigía hacía a mí y yo traté escabullirme de ella. No lo logré, pero Venable pasó al lado mío sin decirme ninguna palabra y empujando mi cuerpo con un poco de fuerza.

Esa mujer ahora me odia, y sobre todo me debe odiar cuando me observó abrazada con Sandra. Con Sandra no tenemos nada, es solo amistad.
Y por supuesto que Venable se pasó falsos escenarios sobre su cabeza.
Cuando estábamos solas me decía que mejor me fuera con mi novia Sandra, aunque ella nunca entendería por qué me fije en ella.

Luego de que Venable desapareció de mi vista me dirigí hacia el bosque. Corrí lo más rápido que pude para poder llegar luego. No sé qué haría dentro de este, no tenía un objetivo claro. Quizás aventurarme, no lo sé.

Pude llegar y la temperatura bajó considerablemente. Empecé a tiritar, y solamente pude darme calor con mis propias manos.

Escuchaba ruidos extraños, y eso me asustaba un poco.
De repente piso mal y caigo al suelo. Delante de mis ojos se encuentra un ¿cadáver humano? ¡Qué diablos! Me levanté lo más rápido que pude y empecé  a correr tratando de salir de ahí. Choque con ramas y me caí unas cuantas veces. Escucho unos pasos detrás de mí,  y un gran miedo invade mi cuerpo y mi mundo se vuelve totalmente negro.

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Holaaa. Cómo están ¿?
Espero que les haya gustado el capítulo.
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Lxs amoooooooo 💖💖