El principio

-17-

No sé cómo, pero escuchamos la campana del instituto.

Oh no.

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E: Vamos, Venable. Tenemos que correr. - Ella tenía una cara de miedo.

W: Se te olvida qué no puedo correr. - ¡Dios! ¿Por qué justo ahora?

E: Ya, te llevaré en brazos. - Los ojos de Venable se abrieron de par en par y negó con la cabeza.

W: No, solo caminemos rápido. - Ella sin más empezó a caminar rapidísimo.

E: Venable, no empieces ahora. - Se giró, pero en un hábil movimiento mío, la tomé en brazos. - Sujetate bien.

W: Eva, qué crees qué haces, bájame. - Pataleaba cómo una niña pequeña, pero no hice caso a su berrinche.

Sentía el miedo correr por todo mi cuerpo, pero no me iba a detener, tenía que llegar al instituto.
Venable, pesaba y mis brazos los sentía casi muertos.

Corría lo más rápido que pude. 
Vi como la niebla se acercaba a nosotras, no teníamos más tiempo.

Aún faltaba para llegar al instituto.
Sentí a Venable decirle algo, pero lo ignoré.

W: ¡Detente! - Frené en seco al escuchar ese tono de voz. - Por aquí hay una cueva.

E: ¿A qué te refieres?

W: Que la niebla no entrara. Sígueme. - la seguí y su andar era muy apresurado.

Al fin llegamos, Venable me metió de un golpe hacia dentro.

W: Aquí estaremos bien, pero vamos hacia más el fondo. - Sentí miedo, estaba oscuro y no se veía nada.

E: No se ve nada.

W: Si no lo dices no me doy cuenta.

E: Me arrepiento de haberte salvado.

W: Yo igual te salvé, así que estamos a mano. - Dijo con su típica cara de superioridad.

Pasaron un par de horas lo cuales Venable no desaprovechó. Me tenía afirmada de la cintura y besaba cada parte de mi cuerpo, sus manos bajaban hasta el inicio de mi trasero y lo apretaba, sus labios recorrían toda la extensión de mi cuello y succionaba de vez en cuando.
Mis manos encontraron un lugar en sus caderas, me estremecía todo lo que Venable me estaba haciendo, pero tenía que parar.

E: Tenemos que parar. - Venable hizo caso omiso y continúo. - Detente.

W: No quiero. - Con un poco de fuerza la separé de mí.

E: Aquí no, no estoy lista. - Venable asintió y se dirigió a la salida para ver si ya se podía salir.

W: Está limpio, vámonos.

En el trayecto Venable no mencionó ninguna palabra lo que hizo que me sintiera incómoda.

E: Fue un lindo día. - Traté de sacarle un tema de conversación.

W: Ajá. - Me ignoró y siguió caminando.

Al llegar al instituto, Venable no me dijo ninguna palabra y siguió con su camino.
No entiendo a Venable, hace un rato me estaba besando y ahora me ignora.

Decidí irme a mi cuarto y evitar juntarme con gente.

Me puse a hacer la limpieza en mi habitación para luego acostarme.
Fue un lindo día, aunque Venable lo arruino en cierto punto. No podía dejar las cosas así con ella, tenía que saber lo que le había pasado.

Termine de limpiar, ordene un poco y salí.
No sabía si Venable estaba en su habitación y tuve que recorrer el edificio entero. No la veía por ningún lado, así que di media vuelta, pero choque con un cuerpo.

E: Lo siento, no la vi. - Dije sin mirar su rostro.

X: No se preocupe, yo también andaba distraída. - Me digné a verla a los ojos y era una hermosa mujer, rubia, ojos café, pómulos bien marcados, labios gruesos y una sonrisa bien hermosa. - Sarah Paulson.

E: E_Eva Brown. - Ella extendió su mano y yo extendí la mía.

S: Un gusto Srta. Brown. - Me regaló una hermosa sonrisa.

E: El gusto es mío. No la había visto nunca.

S: Suelo darle clases a los más pequeños, usted se ve mucho más grande que ellos.

E: ¿También hay niños? - Nunca había visto a un niño en todo el tiempo que llevo aquí.

S: Oh, Srta. Brown, ni se imagina todo lo que hay aquí.

E: Guau, no sé qué decir. - Ella ríe lo qué hizo que yo también lo hiciera.

S: Me tengo que ir Srta. Brown, espero verla muy pronto. - Apretó mi brazo en señal de despido y se fue.

Me quedé mirándola cómo se iba y yo recordé que tenía que ir donde Venable.

Tenía que llegar al otro extremo del edificio para llegar a la habitación de Venable.

En el camino me encuentro con la persona más amable que he conocido.

C: ¿Tú no dejas de estorbar? - Preguntó Cate al llegar a las escaleras.

E: Buenas tardes,  profesora. - Le dije con una falsa sonrisa.

Ella me ignoró y siguió su camino. Al llegar a la puerta de Venable se escuchaban ruidos, con miedo abrí la puerta y en la cama estaba Venable y Lucy.

E: ¿Venable? - Dije con lágrimas en mis ojos. Ella se volteó y su cara era de espanto.

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Holisss 🧚‍♀️
Espero que estén bien.

Estaba en un bloqueo, pero ya volví... aunque no sé si actualice a diario.

Espero que les haya gustado el capítulo :)

Lxs amoooo ♡