♔︎𝙼𝚒 𝚙𝚊𝚝𝚛𝚘́𝚗♔︎𝙺𝚅♔︎

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—¡Mantén tu espalda recta Jimin!, ¡Es la quinta vez que te lo digo! —grito furiosa la señora.

Jimin estaba apunto de llorar, el libro se encontraba sobre su cabeza, y simplemente rogaba a que Jungkook llegará de la cuidad.

—Te dije que era mala idea dejar que se case con Jungkookie mamá, yo si sería un Perfecto esposo para Kookie, hasta tengo mejor cuerpo —dijo su hermano.

Cómo lo odiaba....

—Lo sé cariño, aish, no se como Jungkookie se fijó en, él —miro mal a Jimin— tu eres muchísimo mejor mi amor.

La señora se dirigió a Jaemin acariciando sus mejillas, este era dos años menor que Jimin.

Jimin solo los miraba, siempre había querido que su madre acariciara sus mejillas sin decirle que estaba gordo y feo.

Y que lo mirara con ese amor con el que miraba a su hermano, durante muchísimos años había querido eso... amor....

No hasta que llegó Jungkook y lleno de eso....

—alista tus cosas....Jimin —la mirada que su mamá le daba era fea.

—¿Mmh? —jimin dejo de mirar el libro— ¿Para que mamá?.

—te vas a casar, yo y tu padre arreglamos un matrimonio con un Jeon y pues nos darán mucho dinero —dijo con una sonrisa.

—¿Q-que?, N-no mamá, no voy a casarme y menos eso....—dijo asustado.

—Nadie te pregunto, Jimin.

Por qué?, Ni siquiera lo supo.

En ese entonces había cumplido los 18 años y tan solo se sintió mal al saber que no tenía voz con su ya casi adultez.

Aunque siempre le faltó ese amor de madre...

Las finas lágrimas caían sobre su almohada, su espejo daba en dirección a su cama, donde se veía a el mismo llorando.

—eres tan feo Jimin —se dijo a si mismo.

Agarró sus mejillas y las empezó a peñiscar, hasta sacarles sangre.

—¡Eres tan horrible! —se grito a si mismo, mientras se veía en el espejo, sus lágrimas bajaban y realmente ya no quería ser gordo.

—eres lo más hermoso que una vez mis ojos vieron —escucho atrás.

Sus ojos brillaron y simplemente sintió unos fuertes brazos rodearlo.

—Ya no hagas eso cariño....ya veo que el gato no es el que te lastima —susurro.

—Dejame...deseguro estás retrasando uno de tus viajes, deberías de ir....yo....yo no importo, soy feo y gordo —se notaba, habían destruido a ese niño de 6 años.

A ese niño hermoso.

—tal vez....pero solo lo cancele....me di cuenta de cómo tu madre te trata....también me di cuenta que no te presto atención, de ahora en adelante, juro que estaré siempre para ti —limpiaba sus mejillas sangradas, y le ponía curitas.

Jimin se acorruco en el pecho del hombre y este acariciaba sus mejillas mientras lo miraba con una radiante sonrisa, sus ojos se convertían en medias lunas.

Igual que la sonrisa de Jimin.

—Eres hermoso, eres lo más hermoso que e visto alguna vez, ¿entendido?, No le hagas caso a ella, ella es la gorda aquí —susurro con diversión, haciendo reír a Jimin— solo no le digas que dije eso.