Capítulo 32

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Dana.

La puerta de mi despacho fue abierta y entró mi comandante.

-Mi reina, la primera fase del plan se ha cumplido con éxito- informó.

-Perfecto, que comiencen la segunda fase- ordené.

-Así será, mi reina- hizo una reverencia y salió.

-¿Cuánto tiempo crees que la cachorro mayor de los Garzón tardará en averiguar la verdad?- preguntó mi hermano.

-El tiempo suficiente para cumplir mi plan- le di un sorbo a mi bebida.

-No debes subestimarla- sonreí.

-No lo hago, no soy su padre, yo sé el potencial que tiene y es algo que ocuparé a mi favor- me miró sin entender.

-¿De qué hablas?- caminé hacia la ventana y miré la luna llena.

-Ella es una bomba y yo me encargaré de hacerla explotar

Poché

-Yo no fui, fueron ellos- dije rápidamente.

-No te he preguntado nada, Garzón- respondió con seriedad.

-Si...yo...solo te informaba- contesté con timidez.

-Vámonos, tenemos mucho de que hablar pero primero iremos al hospital, tu papá y Mía ya despertaron y quieren verte- ordenó y comenzó a caminar.

No dije nada y comencé a caminar detrás de ella.

-¿Sería buena idea decirle que estamos lastimadas?- preguntó Dayse.

-Definitivamente no, mejor nos quedamos así y que las heridas cierren en el tiempo que sea- contestó Alexa viendo con preocupación a Dani- no hay que darle más motivos para que se moleste

-Concuerdo con ella, ya habrá tiempo para decirle después o se de cuenta.

Corté la comunicación al escuchar los latidos del corazón de Dani volverse un poco más rápidos, al mirara en la misma que ella vi a Ryan mirándonos fijamente mientras se acercaba a nosotras.

Cuando ya se encontraba frente nosotras lo tomé del cuello y lo estampé contra la pared del hospital. Él en ningún momento trató de defenderse.

-Sé que soy el primer sospechoso en tu lista‐ comenzó a hablar con algo de dificultad- pero no fui yo quien lastimó a tu familia ni a ti.

-Te vi en los recuerdos de aquel vampiro, tu les ayudaste‐ gruñí aumentando la fuerza de mi agarre de su cuello.

-No soy tan idiota, Garzón, sé que si le hiciera algo a tu familia y traicionara a la manada lo pagaría muy caro‐ colocó una mano en mi muñeca- ¿En serio crees que iba a arriesgarme a lastimarlos teniéndote aquí? Si quisiera lastimarlos ya lo habría hecho, te fuiste dos meses y tuve la oportunidad de hacerlo y luego escapar antes de que llegaras y me atraparas, pero no lo hice‐ aflojé el agarre de su cuello- yo no soy el traidor, yo no dañé a tu familia- lo solté y me alejé unos pasos de él- alguien alteró la memoria de aquel vampiro para que creyeras que fui yo, esa persona sabe muy bien que no dudarías en ir por mí y posiblemente matarme.

-¿Sabes de alguien que quiera matarte a parte mi?- negó ante mi pregunta.

-A veces eres más idiota de lo normal, Garzón- se cruzó de brazos- no es que alguien quiera matarme, a nadie le serviría hacerlo a parte de ti- lo miré sin entender- ¿Tú si me entiendes?- le preguntó a Dani y ella asintió- explícale por favor.

-Lo que él quiere decir, mi vida, es que el traidor quería perjudicarte a ti- se acercó a abrazarme.

‐¿Es bipolar?- preguntó Alexa y me encogí de hombros disfrutando de su abrazo.

- Todos saben de los problemas que existen entre tú y Ryan, esa persona decidió ocupar eso a su favor, te querían dar un motivo para que lo mataras así que alteraron el recuerdo para que pensaras que fue él y lo hicieras- me sorprendí ante esa deducción.

-Y así el traidor revelaría la identidad verdadera y todos se dieran cuenta que asesinaste a alguien inocente y así poner a todos contra ti- terminó de explicar Ryan.

-¿Hay alguien que quiera perjudicarte?- preguntó Dani, iba a negar pero luego recordé la pregunta que me hizo Lukyan y su actitud.

-Creo que si y sé quien podría ser- la miré a los ojos.

-Tengo un plan para atrapar al traidor- dijo Ryan y ambas los miramos con curiosidad- pero tu mate no puede estar involucrada lo mejor será que se quede aquí.

-Claro, estoy de acuerdo contigo- asentí.

-Pero yo también quiero ayudar- hizo un puchero.

-La razón por la cual lo vampiros están aquí, es por ti y tu hermana. Quieren tener a alguna bajo su poder para conseguir lo que tanto quieren y no permitiré eso- acaricié su mejilla- ahora eres mi familia al igual que Juliana y no permitiré que dañen a mi familia, por eso necesito que te quedes, estarás más segura aquí y me ayudarás con eso.

-Pero ellos también te están buscando a ti- frunció los labios.

-Si atrapan a alguno de ustedes es más fácil que Garzón quede bajo el poder de alguien- hablo Ryan- todos tenemos una debilidad, la de ella son ustedes, así que es mejor que te quedes aquí- Dani dudó mucho pero terminó aceptando.

-Cuídate, por favor. No importa si haces un desastre pero regresa completa y despierta- me abrazó más fuerte y me dió un beso- no quiero perderte cuando recién te tengo.

Hice que me mirara a los ojos.

-Me tienes, me tenías y me tendrás, siempre seré tuya, Daniela Calle- junté nuestras frentes.

-Sí, sí, se aman mucho, se adoran, dejen de derramar miel que tenemos cosas que hacer- gruñí con molestia ante la interrupción.

-Te quiero, nos vemos más tarde- me dio otro beso y entró al hospital.

-Lamento haber interrumpido pero era necesario- volví a gruñirle.

-Vuelves a interrumpir mientras hable con mi mate y no me importará quedar como una asesina- advertí.

-No seas exagerada, tienen bastante tiempo para dar diabetes, esto se tiene que hacer ahora- bufé pero asentí.

-Está bien, hagámoslo.

Comenzamos a caminar con dirección al bosque. No sabía el plan pero aceptaría cualquier cosa que me pidiera.

-¿Por qué las escondes?- preguntó después de estar un rato en silencio.

-¿Esconder qué?- pregunté confundida.

-Tus cicatrices- me detuve- puedes ser más fuerte que todos nosotros pero eso no te hace inmune a los ataques- agaché la cabeza.

-Es complicado- murmuré

-Quiero verlas- exigió pero me negué- ¿Por qué no las muestras? ¿Te avergüenzas de ellas?- volví a negar- ¿Entonces por qué las ocultas?

Lo miré a los ojos tratando de no mostrar ninguna emoción.

-Porque esas cicatrices me recuerdan cada muerte que fueron causadas por mí o por ella- suspiré- sé que piensas que nadie puede odiarme más que tú, pero te equivocas- sonreí con tristeza- nadie puede odiarme más de lo que yo misma lo hago por no haber podido detenerla y por no sentir nada en muchas de ellas.

Mi GuardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora