Mi Guardián

Capítulo 3

Daniela

Vi como Poché se levanto del sillón y subió corriendo a su habitación

- Kim ¿Poché se encuentra bien?- preguntó Johan al ver su repentina salida

- Sí, solo fue a llamar a su hermana- respondió

- Oye quisiera que nos hablarás un poco más de Poché- pidió Mario

- Claro ¿Qué quieren saber?- nos preguntó

- ¿Tiene pareja?- preguntó Mario

-No- rio- pero tampoco quiere una, así que no intentes conquistarla porque te va a rechazar- le recomendó

- ¿Cómo sabes que me va a rechazar?- preguntó un poco molesto

- En primera, no eres su tipo, segundo, no es la primera persona que rechaza y tercero, ella es igual que yo, lo que significa que está destinada a alguien- respondió.

Al escuchar que Mario no tendría ninguna oportunidad con Poché sentí un gran alivio, no quería que nadie estuviera con ella.

- No me importa yo lucharé por conquistarla- dijo convencido

- Espero sepas perder- suspiró

- Bueno ya dejemos eso, yo quiero preguntarte algo ¿Cómo sería la persona perfecta para Poché?- preguntó Pau

- Para ella no existen personas perfectas porque todos cometemos errores- tenía razón en eso

- Entonces ¿Qué es lo que le gusta de una persona?- preguntó Mario

- Que esa persona trate a los demás de la misma manera, que sea respetuoso, que sea amable, que no trate ser algo que no es, que se original, que no tenga miedo de mostrar su luz y su obscuridad, que no tenga miedo de intentar algo nuevo, que no tema fracasar- Mario la miró atento en todo momento

- Ya que se han respondido algunas de sus dudas respecto a Poché- interrumpió Juan- vamos a comer tengo hambre- hizo un puchero

- Pobre de Juan tiene cara de perrito regañado- se burló- bueno yo iré a llamar a Poché mientras ustedes ponen la mesa- dijo Kim y antes de que llegará a las escaleras Poché ya venía bajando

Poché

Llegue a mi habitación y llamé a Valen.

- Hola pulga- saludé al momento que contestó

- ¡Hermanita!- saludó emocionada- que bueno que llamas, ya te extraño- su tono cambió a uno triste

- Y yo a ti pulga- contesté- por cierto, Kim te manda saludos- cambié de tema, no quería que estuviera triste

- ¿¡Kim esta contigo!?- preguntó sorprendida y muy feliz

- Si, ella vive aquí en Bogotá, más tarde te mandaré su número para que puedas hablar con ella ¿Te parece?- le pregunté

- Hasta la pregunta ofende, claro que me parece bien- respondió feliz

- Le gustará verlos otra vez- comenté