Estaba oscuro, el suelo sucio indicaba lo abandonado del lugar y aunque por sentido común tendría que quedarse quieto y esperar lo único que Eijirou había hecho era luchar con unas cadenas puestas en sus tobillos cuya piel comenzaba a enrojecer por aquella fricción del metal en su piel infantil. Había hecho de todo pero nada funcionaba en cuanto llamar la atención de sus captores, estaba perfectamente consciente de que estaba secuestrado lo que no entendía era el propósito, no es que le importara pero en cuanto cobro consciencia no había visto a su hermano en ninguna parte y eso ya era malo, ellos nunca se separaban y si lo hacían antes tenía que haber un acuerdo
"Michi, Michi por favor contesta" Pidió Eijirou tratando de contactarlo por telepatía pero este no contestó, no contesto por dos razones, estaba dormido o lo estaba ignorando y que Eijirou recordara no le había hecho nada tan malo para que lo ignorará ¿O si? No, no había razón para ignorarlo entonces ¿Lo habrían dejado en casa a él? Claro que no, esta vez Eijirou había intercambiado camas con Michirou por la ventana y aún el cabello no le crecía a su hermano así que no habría mucha diferencia si ambos estaban dormidos. Largo un suspiro de resignación y se sentó en el suelo sin que le importara la suciedad, se sentía muy solo estar sin su hermano, se abrazó a sí mismo tratando de sobrellevar el frío y la densa oscuridad, odiaba la oscuridad ya que no le permitía ver nada, tal vez habría monstruos o fantasmas que le jalaran los pies si estuviera en casa mamá solo le hablaría el cabello antes de darle un beso en la frente y amenazar a los monstruosen voz alta que ni se le ocurriera despertarlo o se las verían ma, le saco una sonrisa triste "¿Donde estará mamá? Necesito un abrazo por favor" sentía sus ojos arder, tenía miedo y no había nadie quien pudiera verlo llorar.
—Por favor vuelve, no volveré a pegar slime en tu cabello—Pidió Eijirou con la voz un poco rota mientras se frotaba los brazos en busca de algo de calor, su tobillo comenzaba a doler y tenía unas enormes ganas de romperlo ¿Por qué no podía romperlo tan fácil como lo haría mamá? Chasqueo la lengua irritado tratando de detener sus lágrimas, fuera de aquella oscura habitación habían pisadas de alguien muy grande y pesado como un hipopótamo. Se sobresaltó cuando escuchó el chirrido escandaloso de la puerta de metal oxidado abrirse, una silueta enorme empujó a un niño al interior de aquella habitación y cerró la puerta con fuerza haciendo a Eijirou saltar en su lugar otra vez
Eijirou secó sus lágrimas de su cara con rapidez y miró al niño notando el pijama de dinosaurio que hacía juego con el suyo aunque le extraño un pequeño detalle ¿Por qué no lo había reconocido al principio? Michirou siempre tenía ese aspecto de flojo, un aura tranquila que le permitía actuar con calma en cualquier situación incluso cuando amenazó con lanzarlo de las escaleras entonces ¿Por qué él niño frente a él se veía tan asustado? Se acercó con cuidado a él notando un olor extraño provenir de él, desagradable como el de un adulto sudoroso. La escasa luz no le permitía verlo bien pero en cuanto tocó su hombro notó que estaba temblando pero aquel le aparto el contacto de un manotazo con brusquedad y se sentó en el suelo sin moverse ni hacer ningún ruido aquello había sido extraño y a la vez demasiado perturbador
—¿Michi? ¿Eres tú cierto?—Preguntó Eijirou extrañado, aquel olor le estaba dando náuseas, él niño reprimió un grito de pánico
—J‐Jirou—Tartamudeo él niño con un voz ronca de tanto llorar
Aquello activo una alarma en la cabeza de Eijirou sintiéndose como si alguien le hubiera roto alguno de sus juguetes, no, eso se quedaba corto, no había conocido ese sentimiento nunca y no quería sentirlo porque se sentía muy feo. Atrajo a Michirou con cuidado hacia la pared y lo abrazó con fuerza para intentar calmarlo, conocía a su hermano, solo habían algunas cosas que lo harían perder su tranquilidad y hacerlo llorar a la vez, dolor, tocar sus cosas sin permiso, que lo grabaran o que le cortaran su cabello. Quería saber que era lo que le habían hecho, parecía ser mucho más grave y necesitaba saberlo para protegerlo lo que pudiera
