Epilogo: Para siempre

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Yuu siendo honesto no sabía si habría sido por los consejos en el manual de Ryusuke o que pero planear la boda había sido más fácil de lo que esperaba, en realidad parecía haber sido reservado todo con antelación así que se sentía en la tentación de preguntar en que momento había hecho todo eso pero sabía de antemano que tal vez no obtendría una respuesta satisfactoria ya que bueno. Ryusuke es Ryusuke, por otro lado Shinoa había dejado cualquier resentimiento por Mikaela al igual que Yoichi quien había sido el culpable de la flecha clavada en el hombro del rubio, Kimizuki siguiendo su instinto y bajo las influencias de Gyuurei también dejó el resentimiento así que por el momento no habría incomodidades durante la ceremonia. Guren manteniéndose al margen de todo aquel embrollo dio a conocer su posición cuándo regreso de un "paseo" con una sonrisa burlona y con Mikaela más rojo de lo que se podría considerar posible, cuándo le preguntaron de qué habían hablado él rubio solo trató de abrir la boca pero antes de que pudiera responder se escuchó la escandalosa risa de Guren llamando a todos para la cena como había dicho y Yuu solo se le quedó viendo preguntándose seriamente si por casualidad no le habían cambiado a su padre por una versión de otra dimensión.

Llegados a este punto después de estar solo en la habitación en donde se supone sería la preparación de su aspecto y todo eso se preguntaba como carajo había llegado a ese punto. Vestido con un elegante y delicado traje blanco cuyos bordes tenían detalles en color dorado, su cabello que había crecido de forma considerable hasta un poco más de los hombros arreglado con una cinta color champagne y trenzas "Usando trenzas, esto debe ser el colmo pero para variar también uso blanco" nunca le había gustado el color blanco ya que era todo lo contrario a lo que consideraba que él representaba como persona pero no "Agh tú maldito Mika si supieras como me pones tal vez sabrías lo mucho que he de quererte" Lamentó él azabache dando un último vistazo a su traje. Había dicho mil veces que no usaría blanco pero como Ryusuke solo lo ignoró le dijo a Shinoa que lo diseñara en blanco porque según él "Lo haría verse más inocente" ¿Para que quería lucir inocente? Ni idea, no iba a cancelar todo porque odiaba el traje blanco así que se iba a limitar a soportarlo. A pesar de que ignoraron sus protestas y que odiaba con su alma tener que usar blanco "Si era suficiente para repetirlo una y otra vez, solo usaré esta ridícula cosa una vez en mi vida" se limitaba a mirar el reflejo en el espejo sin lograr creer del todo lo que estaba a punto de hacer, la vida había encontrado una forma para que se tragara cada uno de sus insultos hacia Mikaela y si había bromeado alguna vez de que era su novio ahora tendría que corregirse. Estaba hablando ahora de su esposo y no sabía si sentir vergüenza u orgullo al respecto "¿¡Que clase de chiste es este?! Fui yo él que le propuso matrimonio no te quejes que bien que le tienes ganas" Pensó Yuu mordiéndose el labio nervioso. De pronto escuchó la música afuera, la introducción a la típica canción que usaban en las bodas y sintió náuseas

—Ey tú. Ya vamos a comenzar— Llamó Gyuurei asomado en el marco de la puerta, usaba traje color dorado, camisa blanca y mantenía su cabello peinado hacia atrás luciendo más elegante de lo normal. Ahora podría presumir de los modales ingleses adquiridos durante su estudio en el extranjero.

"Vete al diablo Gyuurei. Quiero vomitar" Masculló Yuu sin poder moverse de su lugar, bueno tampoco podía, sentía que si llegaba a dar unos cuantos pasos iba a desmayarse "Pero ¿Por qué estoy tan nervioso? ¿Y si Mika se va por un ataque de nervios? ¿Y si vomito a mitad de los votos? ¿Y si un paparazzi me toma una horrible foto? ¡Ah por favor alguien saqueme de aquí! Quiero ir a casa a ver Harry Potter hasta que esto termine" Imploró dentro de su mente, le punzo la cabeza sintiendo algo de dolor

—Oh bueno no pensé que estaría tan nervioso—Se asomó Ryusuke con una expresión de leve interés— Bien menos mal que tengo pastillas calmantes y bueno cualquier cosa que necesites

—Necesito veinte y una botella de tequila por favor—Pidió Yuu con seriedad, Gyuurei le dio un zape

—Necesitamos que te tranquilices, no que entres en coma. Dale dos y que tome agua, no dejes que se acerque a las botellas de alcohol hasta que termine la ceremonia—Advirtió Ryusuke restandole importancia mientras dejaba dos pastillas en la mano de Gyuurei y se marchaba—Iré a tomar mi lugar. Adiosito

Perfecto desastreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora