13.

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La tarde había golpeado una vez más. 

Los últimos rayos dorados por las ventanas de Hogwarts, dando aquel aspecto precioso a las paredes de piedra, aquel aspecto que Larissa amaba, del cual, ella sin duda alguna, estaba enamorada.

Estaba caminando a pasos soñadores a la habitación de Malfoy. Ella deseaba ir más rápido, pero el Sol la atrapaba una y otra vez, cada que miraba la pared de piedra.

El color dorado la atrapaba de formas inexplicables, ella veía cada diminuto detalle. Pero el color se iba perdiendo conforme se acercaba a las mazmorras; luego de la guerra era uno de los lugares más tristes del castillo. Nadie solía visitar las mazmorras como antes. 

Al estar de pie frente a la puerta de la sala común, ella tomó una leve respiración y susurró. -Sangre pura. 

La puerta se abrió tortuosamente lento, mientras ella movía sus pies de forma impaciente.

Su corazón latía de forma rápida y constante mientras veía como se abría, dejando revelar el pasillo que la conduciría a la sala común.

Cuando se abrió por completo la puerta, ella caminó dentro del pasillo oscuro y escuchó como sus zapatos hacían eco en lugar mientras se acercaba de forma lenta a la puerta, su corazón golpeaba con más fuerza su pecho y sus manos sudaban constantemente.

Cuando estuvo frente a la puerta de metal, colocó la palma de su mano extendida en la puerta y le dio un leve empujón; Larissa rápidamente pudo captar un montón de voces discutiendo y no quiso caminar un poco más. 

¿Y si la maldecían? Eran un montón de Slytherin al final del día, su excusa honesta sobre que estaba ahí para trabajar con Draco, eso seguro no se lo tragarían, ella era una Gryffindor y quizás sentirían aun más ganas de hechizarla. 

Su corazón se detuvo cuando tropezó y empujó la puerta por accidente, dejando revelar su temblorosa figura. Sus ojos inspeccionaban cada parte de la sala común, mientras los ojos de nadie se iban a ella.

Exacto.

Nadie la estaba mirando, a excepción de la chica Slytherin, la más agradable que Larissa conocería jamás.

Astoria Greengras.

La chica castaña corrió en la dirección de Larissa y le sonrió de forma cálida. -Estas aquí, me da tanta alegría. - dijo con una gran sonrisa impresa en sus rasgos.

Larissa sonrió y asintió. -En realidad he venido a hacer un trabajo.

-Con Draco. - terminó su oración la pequeña Greengras. -Lo sé, me lo dijo. Esta en su habitación, pero me pidió que te llevara allí mismo, con eso de que nunca has venido aquí... no quería que te perdieras en la sala común, aunque no es muy grande. - explicó Astoria, mientras tomaba a Larissa por el brazo y la atraía en su dirección. 

Ambas caminaron por la sala común, mientras Larissa inspeccionaba y notaba como los Slytherin hacían deberes o jugaban en lugares dispersos de la sala común. 

Al llegar a las escaleras en espiral que conducían a las habitaciones de chicos, Astoria comenzó a hablar una vez más. -Estoy tan feliz de que Draco tenga amigos de nuevo, ha estado tan triste desde que Pansy, Blaise y Theo lo dejaron... sin mencionar que Goyle murió y Crabbe solo lo traicionó al ver que no tenían más poder. - suspiró un tanto decepcionada. -Pero te tiene a ti, tú eres amable y sonríes todo el tiempo, además, sé que no lo dejarías sola. - sonrió.

Larissa sintió una pequeña punzada en su cuerpo al pensar la forma en que se sentiría Draco. Estando tan aislado, solo y abandonado. Ella no tenía idea de que Malfoy había estado pasando por ese tipo de situaciones. Ni siquiera sabía que Draco tenía más amigos, además de Crabbe y Goyle. 

Ella de repente recordó como Draco también había perdido un amigo durante la batalla. No lo recordaba en absoluto, pensó que quizás Draco necesitaría hablar con alguien, al fin y al cabo, Astoria mencionó que el rubio platinado estaba solo en Hogwarts. 

Quizás ni siquiera las peores personas deberían sentirse así ¿No?

Pero Larissa pensó en si Voldemort se sintiera solo, a ella realmente no le importaría un poco si Voldemort se hubiera sentido solo, si ella hubiera tenido alguna peculiar intención de ser amiga de Voldemort, el tipo seguro la hubiera obligado a ser parte de sus filas de mortifagos. 

Pero Draco no tenía mortifagos... o magia negra maligna.

La pequeña risa de Astoria la sacó de su cabeza. -¿Qué es gracioso? - preguntó Larissa con una sonrisa. 

Astoria tapó su boca con su mano y habló. -Es que Draco ni siquiera me deja entrar a su habitación y se supone que soy su mejor amiga... después de Pansy, pero Pansy se fue... así que supongo que soy ahora su mejor amiga. -  sonrió.

Larissa sonrió de forma forzada. -No somos amigos... solo no debe querer reprobar con Slughorn. 

-Oh, créeme; Draco nunca dejaría que alguien entrara a su habitación, no fue de extrañar que te sacara tan pronto la ultima vez, además que Monty iba a darle una paliza junto al equipo, ya sabes... he hablado con Monty sobre que debería- bueno, no importa. - sonrió la chica Slytherin de forma incomoda. 

Larissa era muy curiosa... o tal vez se preocupó por las palabras y su estomago se revolvió al escuchar lo que decía Astoria. -¿Cómo que palizas? - se burló incomoda. 

Astoria negó con la cabeza acelerando el paso por el pasillo. -Solo olvídalo, no le menciones esto a Draco. 

Larissa asintió, pero su estomago se revolvía una y otra vez, al imaginar como podrían lastimar a Draco y una mueca de disgusto se dibujo en su rostro pálido. -¿Malfoy no los lastima? - preguntó en voz baja. 

Astoria se detuvo en seco, a lo lejos, en el final de pasillo, podían ver a Draco recargado fuera de su habitación; estaba mirando sus uñas con aburrimiento, mientras cruzaba sus brazos largos en el pecho.

La Slytherin miró a Larissa con incredulidad. -Draco es inofensivo, creí que sabrías eso, estas más tiempo detrás de él que yo... o cualquiera en este castillo. Me sorprende que Seamus no se haya molestado contigo. - escupió en un susurro.

Larissa frunció el ceño. -No es inofensivo. Es un mortifago, Astoria. Es tan inofensivo como Voldemort, te recuerdo... en El Profeta, se ha dicho que tuvieron personas inocentes debajo de su Mansión... torturando, asesinando, quien sabe que otras atrocidades, Harry Potter me ha dicho como-

-Eso es porque solo sabes la parte de la historia que vivió Harry... no seas una estúpida. Draco no podría lastimar a nadie.. - la boca de Astoria se frunció en molestia. -¿Acaso no te preguntas por qué no ha buscado a tu novio? ¿Por qué no lo ha torturado? - el aire escapó de sus pulmones. Seamus había golpeado a Draco. ¿Corría peligro? - ¿Por qué no detuvo a esos imbéciles cuando lo dejaron inconsciente?¿Eh?.. solo piensa en eso. - la apuntó con un dedo acusador. 

Astoria estaba a punto de seguirla guiando a la habitación de Draco, de mala gana y Larissa la tomó por el hombro, dándole media vuelta. -Estoy aterrorizada. No sé si lo sabías, pero mi mejor amiga murió ante mis ojos, ella murió por su gente. - dijo con veneno, mientras señalaba a Draco con la cabeza. 

Astoria se burló. -¿Estas aterrorizada? 

-Si. 

La Slytherin cruzó los brazos en su pecho mientras sonreía sin gracia, pasando su lengua por dentro de sus mejillas. -¿Y qué haces aquí? 

-Estoy haciendo mi tarea. - dijo con seguridad. 

-Oh... ¿De verdad? - el sarcasmo derramando por su lengua. -¿Entonces solo vences tus miedos por una buena nota?.. ¡Wow! Me encantaría ser Gryffindor, para ya sabes... vencer así mis miedos. - susurró con burla y molestia en su tono. -Ya vez, convivir con un asesino en una habitación aislada, solos los dos... debe ser aterrador, ¡Pero, oye! ¡Eres Gryffindor!.. eres valiente ¿no? - se burló con amargura.

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¿Y si mientras esperan a que actulice se leen mi traducción de Muddy Green Waters o la de Monsters? Ambas son de Draco Mafoy y seguro que les gustan :))

Att: -F.

DRACO'S SECRETS ✧ draco malfoy [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora