Styles III

10

Freddie

El viernes había llegado para mi mala suerte. Toda una semana en donde en lo único que he pensado es en el rostro de Darcy cuando le cuente lo sucedido con Ivanna.

¡No! Ni de loco podía hacerlo.

Ser sincero con ella solo le causaría un enorme dolor, y no podía permitírmelo. Aunque también, sino se lo decía y se llegaba a enterar, sería aún peor.

¿Qué podía hacer? Cualquier escenario provocaba dolor.

Hablar con la verdad era un lema que tenía, pero ahora me daba miedo llevarlo a cabo.

—Ivanna no deja de llamar. Estoy haciendo tarea y me interrumpe—entro Aria a la habitación, algo fastidiada

—Lo lamentó—me disculpé apenado

—¿Cuándo le dirás que jamás te fuiste a Los Ángeles a visitar a tu madre?—enarco una ceja con el celular en la mano, y este sonando.

—No puedo decirle. Debe de seguir pensando que estoy allá.

—Pero, ¿por qué?. Te di el espacio que me pediste y que creí necesitabas, aunque se me hace justo que me lo platiques si te estoy sosteniendo la mentira hasta con papá que cree que estas yendo a la escuela.

Le pedí de favor a Aria y a su madre de si podían recibirme una semana en su hogar para no tener que estar encerrado en casa y que Ivanna fuese a buscarme. Con ella no he querido hablar desde lo ocurrido en la noche del viernes pasado. He puesto mi distancia para no tener que tocar el tema de nuestro encuentro en el cual yo estaba demasiado ebrio como para ponerle un alto. La única idea que se me había podido ocurrir era esconderme cual cobarde.

—Estuve con Ivanna cuando estaba ebrio. Tengo lagunas mentales, pero podría jurar que le pedí que no lo hiciéramos. Por eso no quiero verla—le confesé

—¿Hablas en serio? Eso es algo muy delicado—comentó tomando asiento a mi lado—Es una especie de violación.

Negué, no quería verlo de esa manera, aunque sí que lo era.

—El punto es que le falle a Darcy.

—Por eso te dije que terminarás con Ivanna, pero no quisiste hacerme caso. Aquí tienes las consecuencias.

—Se lo había prometido a Darcy. Ella no quería que su prima sufriera por amor.

—Todos pasamos por ese dolor en algún punto. Es inevitable. Y ahora, ve en los problemas en los que te metiste. Estás escondiéndote de la que es tu novia. Suena terrible el solo decirlo.

—Necesitaba pensar. Además, hoy tengo que ir a ver a Darcy y no sé si podre hacerlo.

—¿Cómo que verla? Papá me dijo que nadie podía entrar a visitarla.

—Es que yo no entro—rasque mi cabeza mientras sonreía un poco. Confiaba en que ella me guardaría el secreto—El punto aquí es, que también le había prometido irla a visitar cada viernes, y no sé si hacerlo después de lo de Ivanna.

—No rompas una promesa, Freddie. Es la peor bajeza que un hombre puede hacer.

—Pero ¿Cómo mentirle? ¿Cómo fingir que todo va bien?

—En algún momento lastimaras a alguna de las dos. A Ivanna por continuar con ella y no hablar claro, o con Darcy por ocultarle que tuviste intimidad con tu novia.

—Amo a Darcy, te lo juro.

—No es a mí a quien tienes que decírselo. Demuéstraselo a ella, pero, sobre todo, díselo a Ivanna. A fin de cuentas, no es tonta. Que trate de hacerse la loca al fingir que no sabe sobre tus sentimientos por alguien más, ya es diferente.