Buenas noches, buenos días

983 71 2
                                    

Capitulo XV

Buenas noches, buenos días.

EMILY HUNTER

Sonora, el hecho de solo pensar que estaré en el mismo lugar en el que crecí. Tengo tanto buenos como malos  recuerdos de ese lugar.

Dem insiste en que el puede ir a la mansión primero a revisar si Mia de verdad esta ahí. Al fin y al cabo se lleva muy bien con los dueños, pero yo me rehusó. El hecho de hacer eso puede malinterpretarse como desconfianza y no quiero malos entendidos.

Estoy con Gabriel coordinando los detalles, conozco solo la entrada del lugar, pero mi amigo me mandó los planos y el número de guardias que hay. Siempre han tenido esa mansión demasiado asegurada a pesar de estar en su territorio.

Yo voy a ir por Mia mientras Jack y Adrik crean una distracción cerca del lugar para los guardias, los dueños estarán entretenidos con la supuesta reunión virtual con los nuevos líderes de la mafia UK, en donde Lucifer tomará mi lugar. Gabriel nos va a estar esperando a pocos metros con el auto. Todo está perfectamente calculado, no hay margen de error. Las cámaras de seguridad de la casa serán desactivadas por mi amigo. Tengo solamente veinte minutos, no más.

—¿Crees que Mia algún día me perdone por hacerla vivir todo esto? Soy una mala madre —estoy enojada conmigo misma por permitir que todo esto pasará, recoste mi cabeza en el hombro del chico a mi lado.

—No, no lo eres. Ella entenderá que nunca quisimos que todo esto pasará, además es incapaz se estar enojada contigo por mucho tiempo —me dice y por alguna extraña razón eso me tranquiliza un poco.

—Pero... —él me interrumpió.

—Tienes que estar tranquila y pensar con cabeza fría, de otra manera no podrás verla otra vez.

—Tiene razón tengo que calmarme.

De tanto relajarme minutos después me quede dormida, creo que últimamente no había estado descansando bien.

...

GABRIEL WEMBLEY

Sinceramente yo también estoy preocupado de que Mia piense que nosotros quisimos que todo esto pasará. Se que no tiene sentido, pero  vamos, es solo una niña y tiene una gran imaginación. No me gustaría que se enojara con Mily.

—La llevo a la habitación del jet para que descanse mejor —me dijo ese tal Démeter mientras intentaba acercarse a la chica a mi lado dormida.

—No te preocupes, no hace falta. Sabes que tiene el sueño ligero y aparte falta poco para aterrizar —me niego a que la mueva.

Tras darse cuanta de que no lo dejaría resopla y se va nuevente a su lugar. Escucho pequeñas risas y veo a las amigas de Mily riéndose muy bajito mirando en nuestra dirección, ¿a estas que les pasa?

Durante el resto del camino traté de moverme lo menos que pudiera, no quería que ella se despertara. A pesar de que cubría sus ojeras con corrector, yo las podía notar. Sabía que no había estado durmiendo del todo bien y lo más probable es que haya sido a causa de sus pesadillas.

Dos horas y media después habíamos aterrizado en Sonora, eran alrededor de las dos de la madrugada, la mayoría estábamos muy cansados, y en unas cuantas horas teníamos que volver a la acción.

Siendo IdiotasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora