Tú y Yo VS TÚ y YO

630 89 4
                                    

NARRA WILLY

No me extraña que alguien supiera que Fargan me besó, de hecho creí que sería algo que explotaría de inmediato junto con todos esos rumores que siempre existen después de una fiesta. Siento un poco de culpa ya que no le dije a Vegetta de inmediato, pues simplemente no lo consideré necesario. Ahora que de repente Alex lanzaba eso al aire, y que Samuel ha estado actuando de una manera tan extraña conmigo, me hace sentir como si hubiera hecho algo mal, como si hubiera engañado a Samuel con toda la intención o como si fuera el hombre más infiel del planeta.

Seguí a Samuel hasta el área frente a la biblioteca, donde por fin pude alcanzarlo.

-Escúchame -dije tomando su brazo.

-No sé si no entiendes muy bien el lenguaje corporal, pero creo que es muy claro que no quiero hablar contigo en este momento -dijo con una expresión extraña; no lucía molesto, más bien pareciese que algo lo afligía.

-Solo escúchame un poco, déjame explicarte.

-¿Explicarme qué? ¿Qué besaste a Fargan en una fiesta?

-Es que no es así, él...

Justo cuando iba a acabar mi oración, Fargan llegó con la respiración agitada.

-Lo que faltaba -dijo Vegetta quitando mi mano de su antebrazo.

-Vegetta, escucha, yo besé a Willy -dijo Fargan entrando a la conversación. -Él no hizo nada, yo estaba muy borracho y dolido porque Alex pasaba de mí, así que Willy solo estaba tratando de ayudarme y yo lo besé. Pero te puedo jurar que no tengo ningún tipo de sentimiento romántico por él, por favor no te molestes.

Todos nos quedamos en silencio, tanto Fargan como yo solo mirábamos a Vegetta, quien alternaba su mirada entre nosotros.

-Escuchen -dijo después de un rato. -Lo sabía.

-¿Qué? -dijimos en unísono.

-Sabía lo que había pasado, alguien me lo dijo.

-¿Qui...

-No importa -interrumpió a Fargan. -Solo quiero que sepan que no estoy molesto con ninguno de los dos, pero necesito tiempo para pensar las cosas, por favor, ¿pueden entender eso? justo ahora no sé qué siento, estoy muy confundido y no quiero lastimar a nadie.

Me miró con un brillo que lentamente perdía su notoriedad. Lentamente apagándose hasta que quedaba esa mirada de haber perdido algo, o a alguien.

Muy dentro de mí sabía a qué se refería, la opresión en el pecho y las ganas de llorar me decían justo lo que estaba pasando.

Aun así deseé que solo fuera una confusión y que todo volviera a la normalidad.

Esa normalidad donde solo somos tú y yo.

NARRA ALEX

Había seguido a Fargan, Willy y Vegetta unos cinco minutos después. Pude verlos frente al edificio de la biblioteca, me mantuve un tanto alejado para no interrumpir, pero podía escuchar perfectamente lo que decían.

-Vegetta, escucha, yo besé a Willy -dijo Fargan. -Él no hizo nada, yo estaba muy borracho y dolido porque Alex pasaba de mí, Willy solo estaba tratando de ayudarme y yo lo besé. Pero te puedo jurar que no tengo ningún tipo de sentimiento romántico por él, por favor no te molestes.

Después de oír eso, lo demás fue insignificante.

...

Willy se fue del lado contrario al de Vegetta, Fargan lo miraba alejarse sin decir nada.

-Perdón -dije acercándome.

-No importa -dijo Fargan sin mirarme, entonces se dio la vuela y comenzó a caminar.

-Fargan -dije causando que se detuviera. -No te pido perdón solo por haber dicho eso frente a media facultad de Arquitectura, también lo digo por cómo te he tratado todo este tiempo.

Seguía sin mirarme, solo estaba parado con la mirada baja.

-Yo... he tenido una experiencia muy difícil con mi último ex, llegué a pensar que nunca más podría confiar en alguien. Sé que no merezco que me perdones, ni siquiera merezco que estés escuchando todo esto, pero me gustaría que supieras que desde que te vi, también me sentí diferente, solo que he estado intentando reprimir todos estos sentimientos para no salir lastimado, pero cada cosa que te involucre, termina afectándome de alguna manera. Yo... realmente no sé qué hacer con estos sentimientos -dije dejando caer las primeras lágrimas. -Fargan, también me gustas, demasiado.

No pude más, lágrimas tras lágrimas no dejaban de salir de mis ojos, haciendo que mi vista se volviera borrosa.

Entonces, sentí como unos brazos rodeaban mi cuerpo y me atraían hasta que no quedara ninguna holgura entre nosotros.

-Tonto Alex -dijo Fargan susurrando al lado de mi oído. -Cuando te digo que prometo no lastimarte, es porque definitivamente nunca me atrevería a hacerlo.

Su calor se transmitía a mi cuerpo. Un sentimiento cálido se esparció hasta mi corazón, diciéndome que podía confiar en él, que definitivamente tenía que confiar.

-Solo tienes que darme una oportunidad y prometo que cada día me aseguraré de hacerte muy feliz.

-Sí –dije.

-¿Cómo? ¿No te escuché?

-SÍ -dije separándome un poco para poder limpiar las lágrimas de mi rostro.

-No te escucho.

-Ey, no te pases -amenacé al ver su sonrisa de idiota. -Agg que vergonzoso, promete que no le dirás a nadie que me viste llorar.

-Estamos justo frente a la biblioteca, mientras tú llorabas desconsoladamente en mi pecho, muchas personas voltearon a vernos, creo que ahora saben que eres mío.

-¡Qué mierda dices! Yo nunca dije eso.

-Claro que sí.

Me di la vuelta para regresar a mi clase de laboratorio, si me daba prisa aún puedo llegar a explicarle las cosas al profesor.

-¡¿Alex, eres mi novio ahora?! -gritó Fargan sin seguirme.

-¡YA TE HE DICHO MI RESPUESTA!

-¡NO TE ESCUCHO!

Bobo, a partir de ahora, somos TÚ y YO. 

Devuélveme a mi novio ││RUBEGETTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora