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Coraline

Observo como el auto de rayan se pierde a lo lejos, suelto el aire contenido e intento que el arrepentimiento no se apodere de mi. Trago y toco el timbre de mi casa. Mordisqueo mi labio mientras siento pasos acercarse.

La puerta se abre y Cecilia se queda quieta, su aspecto no es el mejor y eso me sorprende. Ella me mira nerviosa y carraspeo.

—Hola mamá —Ella parpadea y una leve sonrisa se forma en su rostro

—¿Vuelves?— agarro con fuerza la correa de mi bolso y asiento

—Si

Ella traga y se aparta para dejarme entrar, detallo su rostro libre de maquillaje, con leves ojeras y ojos irritados. Luce ropa de casa y pantuflas de peluche. Me adentro a mi casa y siento un DeJa vu como la primera vez que pisé este lugar.

—Tu cabello creció, deberias dejárselo crecer aun más, tu color es ideal para todo tipos de peinados.

Asiento mientras la sigo, ella camina hasta la oficina de Erick

—Si, de hecho la primera vez lo corté para molestarte—admito y ella asiente

—Lo sé, eres demasiado impulsiva.

Carraspeo y dejo mis bolsos a un lado mientras nos adentramos a la oficina. Observo que se encuentra vacía por lo que supongo que ella quiere hablar conmigo a solas.

—Puedes sentarte coraline, quiero hablar sinceramente contigo. Espero que me escuches y ....entiendas.

Me siento y observo como ella acerca su silla hasta la mía, la coloca  frente a mi Y se sienta de piernas cruzadas.

—Todo empezó cuando cumplí los diecisiete años y me cambiaron de colegio. Recuerdo perfectamente lo asustada que estaba por empezar todo de nuevo, pero no tenía otra opción, no cuando a tus abuelos les convenian que fuese a ese lugar. Apenas entré conocí a Maevery, ella era de verdad muy buena conmigo, me enseñó todo el lugar, me acompañó a las salas e incluso me presentó a sus amigos....

Me acomodo en el asiento y la observo, detallando lo hermosa que es mi madre.

—Me presentó a su novio—arquea una ceja—Erick, luego a Richard, el cual era muy amigo del primero. También estaba liz y Robert....Ellos me recibieron bastante bien. De hecho comenzaron a incluirme en cada almuerzo y cada recreo, cosa que me hacia sentir bien.

Juega con el peluche de sus pantuflas

—Pero había alguien con el cual compartía cada clase y horas libres—sonríe — sólo uno de ellos logró llamar mi atención y hacerme sentir.

—Erick..

Asiente y sonríe

—Así es, Erick. Pero el era el novio de Maevery, entonces yo no quería sentir demasiado. Entonces comencé a salir con Richard....

Muerdo mi labio y sigue

—Richard era super amable conmigo, yo le gustaba y eso me agradaba, me agradaba tener su atención. Pero el no me gustaba....porque yo no podía dejar de pensar en Erick y en todo lo que el me hacia sentir. Era inexplicable ¿Sabes? Sentía miles de cosas de tan solo verlo, cosas que nunca había sentido por nada ni por nadie.

Suspira

—Entonces pasaron los años....algunos iban a otras universidades, pero Erick y yo íbamos a la misma. Ya que ambos queríamos estudiar lo mismo. Entonces, la tensión y el deseo era mucho más a lo de antes. Las fiestas, las clases, los recreos....siempre juntos.

tres besos [LIBRO 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora