XXI

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Un sonriente y coqueto George nos abre la puerta invitándonos a pasar. Entramos y nos encontramos con mucha, en verdad, demasiada gente para el tamaño de su casa. Hay luces de varios colores, individuos bailando en lo que antes era la sala, ya que movieron los muebles para crear una "pista" improvisada y una barra llena de lo que estoy más que segura son bebidas alcohólicas. Hay distintos grupos de personas hablando por aquí y por allá, entre los que puedo distinguir a algunos de los chicos.

Saludo a todos los que conozco en mi camino y voy al centro para bailar y entretenerme un poco, Vitto me sigue y empieza a hacer el tonto conmigo. Después de un rato bailando como locos nos empezamos acalorar y a sentir el sudor en nuestras frentes.

- ¿Quieres que vaya a buscar algo para beber? -se ofrece amablemente y se va cuando asiento en respuesta.

Pasaron los minutos y mi amigo nunca llega, decido ir por mi cuenta. Cuando llego a la barra analizo las opciones: vodka, jugo, coca cola casi vacía, whisky, hielo, limón, tequila y lo que parece ser un...

-¡FERNET!- exclamo, la gente a mi alrededor me mira extrañada.

-Ah, sí. Alguien lo tenía y lo trajo, nadie sabe cómo se prepara- dice George, quien apareció de repente.

-Novatos- mascullo y miro a mi alrededor hasta que encuentro a quien buscaba- tú, Mark, trae tus pulmones contaminados de fumador y dame tu encendedor, no me mires con esa cara, lo supe siempre. Tú- le indico a un extraño que estaba a mi lado- tráeme un cuchillo. Vamos a preparar un fernecito.

Cuando tengo todo lo necesario, sirvo el contenido de la coca en un vaso, corto la botella en dos y quemo los bordes para no cortarme.

-Miren y presten atención. Primero van los hielos, sean generosos- explico mientras el grupo de gente me observa- luego echamos el fernet a un 30 por ciento- vierto la bebida a ojo, creo que me pasé un poco- y por último la coca a un 70 por ciento, ¡lo revolvemos con el dedito-mezclo con el dedo medio y me lo meto a la boca para succionar los restos de la espuma y limpiarlo- ¡voilà!

Tomo un trago largo y se lo paso a Mark, este lo prueba y hace una mueca de disgusto, me lo devuelve. Blandito.

Le ofrezco el vaso improvisado a los demás, pero parece ser que nadie quiere. Más para mí supongo. Me tomo el resto del fernet y preparo otro, me lo bajo enseguida.

Puedo sentir cómo me invade una ola de calor y de euforia. Pueeeede ser que me haya equivocado en las proporciones de fernet. Quizás, solo quizás. Me había olvidado lo divertido que era tomar alcohol y emborracharme, ¿por qué no volví a hacerlo?

Me siento suelta y atrevida: no quiero parar. No hay más coca para preparar mi bebida favorita, por lo que preparo algunos shots de tequila y me los tomo uno atrás de otro. Percibo como mis sentidos se liberan, cuando intento prepararme otro vasito alguien me aparta.

-Creo que ya es suficiente Eider- dice Sam, por primera la vez en toda la noche- mañana te vas a arrepentir.

-Buuu- me quejo- no seas aburrido- me lanza una mirada de advertencia- como sea campeón, me voy a bailar.

Sin más lo dejo allí parado y me voy a la pista de baile. Intento hacer algunos pasos, pero la música no es de mucha ayuda. Me las arreglo como puedo, hasta que alguien, el DJ supongo, para todo. La gente abuchea ante la interrupción.

- ¡Buenas noches ganadores de Hastings! - se escuchan sonidos de celebración- y perdedores de Harrow- risas- según la información que me acaban de dar, hoy es el cumpleaños de alguien aquí presente. ¡Eider Dilexit! ¡La princesa de Hastings High School!... - anuncia y una luz me ilumina para indicar dónde estoy.

Guía para enamorar a Eider (GUÍA PARA AMAR #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora