Ambos chicos hicieron una pausa para recuperar aliento, Nahoya tenía la nariz sangrando así mismo como Rindō tenía su labio roto.
Ran se acercó dando pequeños brinquitos y se lanzó al pequeño cuerpo del pelinaranja.
—¡Ah! Sabía que vendrías, cariño.— Le apapachó con ternura, elevándolo y dando vueltas con él.
—¡Agh!— Comenzó a removerse, intentando safarse.— ¡Basta!—
—Yo los dejo solos...— Rindō limpió nuevamente la sangre brotante de su labio y entró a la casa.
—¡Ven, vamos a pasarla bien!— Bajó al menor y tomó su mano, arrastrándolo consigo a la construcción.
(...)
Poco a poco los minutos avanzaban y la gente comenzaba a llegar, del mismo modo la música fue subiendo en volumen y la cosa se ponía más ruidosa entre charlas y gritos.
Rindō y Souya conversaban animadamente con un grupo de chicos en un sillón algo alejado de la pista de baile, por su parte Nahoya estaba en la cocina sirviéndose algo para beber y poder unirse a la charla.
Había perdido a Ran de vista y eso lo ponía de buen humor, tomó su vaso y dio un largo trago.
—¡Agh! Está algo fuerte.— Agitó un poco su cabeza y soltó algunas risas.
—Ah, aquí estás.— El de trenzas se acercó lentamente y se apoyó a un lado del pelinaranja.
Nahoya apenas le vio iba a salir del lugar, pero Ran lo evitó tomándolo de la mano.
—Agh... ¿Qué quieres?— Soltó su agarre.
—Que me la chupes, pero ese es un tema aparte.— Sonrió travieso.
Iba a volver a irse pero Ran rápidamente se interpuso en su caminó y tomó su mentón con cariño.
—Ah~ comienza a salirte vello en tu preciosa carita.— Besó su frente.— Hablando enserio, ven conmigo... Tengo algo que te gustará.—
—¿Ah sí? ¿Una orden de alejamiento para ambos?— Se apartó y continuó caminando.
—Ah~ supongo que tendré que fumar solito...— Fingió una voz de dolor.
El pelinaranja se detuvo y soltó un par de risas.
“—Eso... Ven aquí...—” Ran se acercó aún más, creyendo que le había convencido.
Pero Nahoya volteó, observándole con disgusto.
—No me jodas, la fiesta está infestada de gente que probablemente ya te has follado...— Su molestia se notaba en su voz.— Ve y fuma tu mierda con alguien más.— Volvió a dar la vuelta y definitivamente se fue del sitio.
“—... Auch...—”
Suspiró agobiado, hablar con él se estaba tornando cada vez más difícil, su corazón dolía un poco con su indiferencia, aún con el remordimiento de poder tener algo con él.
Se sentía algo ingenúo... Creyendo que todo iba bien esa noche en el hospital hace un año, donde él le acariciaba su cabello y le tarareaba con una preciosa mueca de vergüenza en su rostro. Y más aún los constantes abrazos y risas suaves que se dedicaron.Y todavía le retumban las palabras bajo la lluvia, el “No existe un nosotros” y un “Te cuidé solo por Souya”.
Se sentía tan tonto...
Sacó el cigarro armado de su chaqueta y lo encendió, dando una profunda calada a la hierba, dejando que el THC hiciera efecto en su mente y cuerpo, quería olvidar el rechazo de ahora, aunque ya daba igual, uno más uno menos no interesa.
Subió las escaleras hasta el que solía ser el cuarto de él en su niñez, sacó su llave y abrió la puerta, entrando y cerrándola sin seguro.
Se lanzó al pequeño sillón a un lado de la rota mesa de escritorio y la quemada silla del mismo.
Su cuerpo se estaba relajando bastante, al parecer su pecho ya no dolía tanto.
Comenzó a tararear la misma melodía que el pelinaranja cantaba cuando descansaba en sus piernas, esa dulce voz que aún recuerda, esa dulce voz que le permitió dormir después de días.
Esa dulce voz que tanto adora.
—Ah... Comienza a doler de nuevo...— Sonrió de lado tocando su pecho y cerrando sus ojos antes que se humedecieran.
un voto se agradece 🍇
ESTÁS LEYENDO
Tough ; [ NahoRan ]
Fanfiction"-¿Esa noche lloraste por mi?-" Secuela de Zarco [ Ringry ] Historia Semi AU +18