Día 6: Ofrenda | "KiKuro."

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Parecía un día normal, con un entrenamiento normal pero exhaustivo, con sus jugadores normales pero enfocados en lo que tenían que hacer.

Entonces, ¿que era lo que a Aída Riko le estaba molestando?

—¡Kuroko! — gritó de pronto la pequeña alfa sorprendiendo a todos, incluso a la sombra que se suponía nadie veía nunca. —Si, te estoy viendo, ven acá. — aclaró al ver su reacción.

Cuando lo tuvo enfrente suyo, no tardó en encararle. 

—¿Porque traes eso? — le miro fijamente, esperando una respuesta sensata. —Es muy llamativo y estás bajo techo.

—Tengo que usar ropa dentro y fuera entrenadora. — soltó el omega, cómo sino estuviera intentando hacerse el gracioso.

—Me refiero a las gafas Kuroko. — la castaña inhaló buscando paciencia en el acto.

—Oh. — respondió el chico mientras comenzaba a sonrojarse en exceso. —Es una larga historia.

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En realidad, no lo era y había iniciado incluso, de la forma más inesperada posible.

—Kise-kun, eres un idiota. — el peliceleste soltó tal cual cómo si hablara del clima.

—Kurokocchi, ¿porque me dices eso? — lloriqueo el rubio alfa mientras firmaba otro autógrafo más y posaba al mismo tiempo para las fotos de los seguidores que le reconocieron y detuvieron así, su ida al cine con el más bajo.

—No respetas nuestra cita. — el rubio abrió y cerró su boca cuál pescado dorado en pecera. —Pase por alto la falta de ofrenda de cortejo pero esto, no puede ser Kise-kun no creí que fueras de esos.

Irónicamente, los fans comenzaron a negar incrédulos ante lo que escuchaban, apoyando así al inexpresivo omega.

—¿Estamos en una cita? — el as de Kaijou se paró enfrente suyo, tomando sus hombros, tal vez para que no se le desvaneciera sin dar una respuesta. —Kurokocchi, me estás correspondiendo, ¿después de tantos años?

—Pueden ser más Kise-kun. — soltó causando que el rubio negara desesperado. —Entonces.

— ¿Entonces? — interrogó nervioso el alfa.

—¿Que harás al respecto Kise-san? — una de las fans no pudo evitar murmurar.

—¡Mi ofrenda! — exclamó para beneplácito de los presentes. —Acepta esto con mi corazón Kurokocchi.

Las despampanantes gafas de diseñador fueron colocadas en las pálidas manos del omega.

—F-fue lo primero que me compre al iniciar a modelar. — acarició nervioso su cabello. —Se que no eres de gafas y que puede ser algo frívolo pero ese día me sentía muy feliz aunque, no tanto cómo ahora por ello, espero lo aceptes.

—Me quedan fantásticas Kise-kun. — el peliceleste exclamó con su presente ya luciendo en su rostro y escondiendo de paso las lágrimas de alegría que amenazaban en salir. —Gracias alfa.

Tomó las manos del más alto y lo hizo inclinarse para dejarle un casto beso en sus labios.

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—Muy hermoso Kuroko. — la alfa le felicito. —¡Ahora quitatelas y vete a entrenar!

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OMG, mi primer KiKuro xd ❤️ espero que les gustara.

"Omegacember: KNB version."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora