Charla de hermanas

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El brazo que rodeaba los hombros de Dahana se soltó cuando Clauden detuvo su andar justo rente a una enorme mesa llena de aperitivos y bebidas dispuestas para aliviar el hambre de los líderes antes de que comenzara el banquete oficial.

-¿Ese el el búho de Tania?- Clauden regresó a un lado de su amiga con dos bollos de pan recién hechos. 

Dahana aceptó el postre y asintió, la primera vez que Clauden conoció a Tania esta le había contado casi todo sobre sus dones, casi... Aún no había mencionado que sus multi dones se almacenaban en aquella híbrida que ahora poseía su forma animal. Eso era un secreto que contadas personas sabían, Tania había querido decirlo pero era mejor ir con cuidado a la hora de revelar cosas tan delicadas como aquella. "Más adelante." Fue lo único que dijo cuando Clauden preguntó más acerca del tema, y con esa respuesta no insistió más, le daría a Tania el tiempo suficiente para que confiara en ella así como Tania había tenido el tiempo de apreciarla.

-Lo es.- Respondió Dahana antes de darle un mordisco a su bollo. 

-Mmm... ¿Ella no vino?- 

-Se quedó con Lotty en la base central.-

-Lástima, aunque a decir verdad pensé que no dejaría que vinieras sin ella.-

-No iba a dejarme pero pues... Charlotte la convenció.- Dahana suspiró, llevaba todo el día suspirando, pero... ¿Qué hacer si la extrañaba demasiado? Incluso más de lo que se había imaginado. -En fin.- Dahana volvió su atención al bollo para no deprimirse más. -¿Qué hay con Jon?-

Las mejillas de Clauden se colorearon involuntariamente pero su tono al hablar no fue para nada avergonzado. 

-Ya sabes que es mi prometido.- Clauden hizo pucheros al ver la sonrisa divertida de Dahana. -¡Oh vamos! Te lo conté todo por mensaje.-

-Me quedé hasta que se comprometieron, no lo conocía en persona.- 

-Pues ya lo conoces... ¡Storm ven aquí!- Clauden habló casi gritando aún cuando su pareja estaba tan solo unos pasos detrás de ella junto a R.

El aura sombría envolvió el ambiente cuando el joven acudiendo al llamado de su prometida se acercó a donde esta se encontraba.

-Didy el es Jon... Jon, Didy.- Clauden los presentó sin mucha formalidad antes de agregar con rapidez. -Espero se lleven bien, odiaría que mi hermana y mi futuro esposo se odien.-

-¿Hermana?- Jon alzó una ceja. -Creí que...-

-Ma vie, ma vie... ¿Qué vamos a hacer contigo? Hermana es como decir amiga íntima.-

-Muy íntima.- Dahana sonrió y le estiró una mano al prometido se su amiga. -Un gusto finalmente conocerte.-

Jon la miró con los ojos entrecerrados antes de hacer lo mismo y estrecharle la mano. 

Aunque parecía algo brusco por fuera su tacto fue suave y gentil, y cuando habló su voz se había transformado una vez más, como si alguien la hubiese endulzado con un toque de miel, apenas una gota, una que bastó para que Dahana no se sintiera tan agobiada por el aura amenazante que manaba del muchacho.

-Lo mismo digo, me siento muy honrado de conocer a la hermana más querida de mi prometida.- Jon se arrodilló para luego besar la mano de Dahana, la joven se quedó pasmada ante aquel acto que no vio venir.

-Y la única.- Clauden se colocó a un lado de Jon y le dio un par de toquecitos en su hombro para que se levantara. 

-Las dejaré seguir conversando.- Jon se acomodó su traje. -Si me disculpan.-

ND Secretos de medianocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora