Primera semana de clases, era día lunes a las 6:45 a.m. y Yuta iría a recoger a su novio.
Yuta: Cariño, salgo en 10 minutos, ¿estás listo? - Un mensaje enviado, que pasados los 10 minutos, no hubo respuesta.
Bajando las escaleras rápidamente y bastante perfumado por lo demás, llegó a la cocina y cogió un pan de la panera, le puso un jamón adentro; luego se sirvió un vaso con jugo recién exprimido por Haruka, su padre.
- Mamá, ya me tengo que ir, no volveré a casa en una semana yo creo, ya hice mis maletas y las metí en la camioneta anoche, más tarde compraré algunas cosas y me iré a la habitación.
- Yuta querido, no olvides que hoy tienes que traer a Winwin a cenar, lo prometiste el viernes pasado. - Dice sentándose a la mesa para desayunar y poniendo unos huevos revueltos en el centro.
- Está bien madre, sólo esperaré a que me conteste, anoche se quedó dormido tarde supongo y culpa mía no fue. - Dijo algo molesto pero tolerante, rodando los ojos hacia un lado y tomando un sorbo del jugo.
Los padres de Yuta conocían a su novio y lo aceptaban, llevaban dos años juntos y es el primero que les presenta, además su hermana Uta lo quería muchísimo.
- Nos vemos más tarde entonces, trataré de venir, sino los vendremos a visitar el fin de semana. Los amo familia. - Se escuchaba su voz a lo lejos mientras salía de casa con su bolso.
- También te amamos hijo. - Gritaron desde la cocina, aún tomando desayuno. - Salúdame a tu chico.
🚙
De camino a la casa de Winwin, lo llamaba por teléfono con el altavoz encendido, pero no daba señales de vida. Desconcertado Yuta conducía aun más rápido.
- Niño idiota, cómo te atreves a no contestarme... - Pensaba y aceleraba.
Distraído marcándole a su novio, frena de golpe al ver a un chico cruzar la calle muy rápido. Casi con el carro encima, el joven cae al piso.
- Que no sabes manejar, dónde obtuviste tu licencia, imbécil. - Gritó.
- Lo lamento, en serio disculpa. - Dijo Yuta bajándose del auto casi con el corazón en la mano, muy asustado por la situación. - ¿Estás bien?
El chico con una expresión molesta, no parecía ser de Corea, de tez blanca con un tono moreno, ojos y cabellos negros; nariz pequeña y puntiaguda; delgado y bastante guapo. Yuta analizándolo, sin saber qué hacer, sólo le tendió la mano para levantarlo, pero fue rechazado en seco con un golpe.
Apenado le ayudó a levantar las cosas que había dejado caer, encontrando una tarjeta de identificación.
Mark Lee, Korea Advanced Institute of Science and Technology (KAIST), estudiante 458, Ingeniería. - Leyó rápidamente. - Mark... toma.
- Quién eres para llamarme por mi nombre. - Le quitó prácticamente la tarjeta de las manos y sacudiéndose se fue indignado. - Espero que no nos volvamos a ver. - Volteó.
Dando un suspiro, viendo al muchacho desaparecer por la calle, estaba bien y eso le alivianó la carga, se subió al auto y se dispuso a llamar una vez más a su novio hasta que finalmente contestó, con voz de recién despertado.
Winwin: Aló? - Dijo con voz ronca.
Yuta: Hasta que al fin respondes.
Winwin: Oh, Yuta cariño, perdón, qué hora es?
Yuta: Acaso no pones alarmas? Son las 7:30 a.m.
Winwin: Mierda... Hablamos luego.
Yuta: Te pas... - *Winwin cuelga el teléfono* ...so a buscar.
- Que rayos, me colgó y ni siquiera me dijo con quién se iba. - Enfurecido, deja caer su teléfono en el asiento, se dirige a la universidad sin importarle nada.
Ya llegando al lugar, se estaciona cerca de su facultad y entra al salón de clases, se sienta al ultimo atrás y se dispone a leer un libro hasta que llegaron todos sus compañeros. Taeyong se sienta junto a él.
- Qué pasa amigo, esa cara de día lunes con cero descanso, deberías venir más animado, es el primer día y de seguro Winwin te ha de haber dado un besote antes de llegar. - Dice Taeyong en tono de broma.
- Me nombras a ese idiota una vez más y serás comida de perros. - Bufó molesto.
- Qué genio Yuta, no me digas que peleaste con él otra vez.
- Me dejó esperando media hora para luego cuando lo llamo, se está recién despertando y me cuelga el teléfono sin siquiera despedirse ni decirme si lo traía o no, crees que es tierno y sensato de su parte... - Explica rápido y tratando de no alterarse. - Es más, el sábado debía acompañarme a comprar el escritorio y la cama para la habitacion en la que viviré de ahora en adelante y me dejó plantado. Te das cuenta su nivel de amor?
Yuta enojándose era demasiado nuevo para todos, nunca se enojaba ni decía malas palabras, sólo ponía cara seria y suspiraba, pero hoy definitivamente no era su día y mejor que nadie lo molestara porque no respondía.
🙄😒😩
2 p.m. y Winwin buscaba a Yuta por todos lados, pero no lograba contactarlo.
- Haechan-ah!!... - Gritó, acercándose al grupito de amigos. - Has visto a mi novio, no lo encuentro por ningún lugar y creo que está enojado.
Haechan sonriendo. - Hola lindo, porqué, qué pasó?
- Hoy me quedé dormido y no le contesté, y para más remate este fin de semana debía hacer unas cosas con él y nos quedamos dormidos en tu casa jugando Xbox. - Poniendo cara de culpable y rascándose la cabeza, miraba a su alrededor como suricato.
- Ya valiste compa, mejor ni lo molestes. - Dijo Haechan tomado de la mano de Mark.
- Yo lo vi con su amigo, hace unos minutos atrás en la cafetería, estaba riendo. - Renjun dice, rascándose la cabeza tratando para hacer algo de memoria.
- Y este quién es? - Le susurró Mark en la oreja a Haechan.
- Sólo un amigo amor, no te preocupes.
- Gracias chicos. - Interrumpió Winwin. - Nos vemos después Haechan-ah.
- Oh... Adiós.
- Nos vemos después Haechan-ah - Dice Mark arremedando a Winwin.
- No seas celoso, bebé. Sabes que yo jamás podría engañarte. - Le pellizca un cachete para luego darle un tierno beso en los labios.
Chenle y Renjun haciendo cara de Iugh 🤢 - Puagh, son malditamente tiernos, unos chapes asquerosos y amorosos.
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Terminando la conversación y sin más que esperar, Winwin se despidió de todos y se fue a buscar a Yuta. Pero para su mala suerte, no estaba donde le dijeron.
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MY SWEET BOY - YUMARK (COMPLETA)
RomanceCuando un chico japonés introvertido, amoroso y muy correcto, conoce a un canadiense extrovertido, juguetón y coqueto, su mundo dará un giro en 180 grados, dos chicos de 26 y 22 años, se enfrentarán a las adversidades del mundo.