Yo te amaré

Capítulo 6

Christian

Me dirijo a la oficina cuando cuando veo que la Señora Steele sé encuentra en el vestíbulo.
Al verme prácticamente corre hacia mi.

—Señor Grey.

—Carla— Asiento en modo de saludo.

—He venido porque necesito hablar con usted y se que mi testaruda hija no lo hará.

—Por favor, sigame.

—Señor Grey, se que quizá este sorprendido de verme, pero realmente quería hablar con usted.

—Bueno, aquí me tienes Carla.

—Verá, mi hija Ana ha pasado un sufrimiento desde que lo conoció.

—¿Un sufrimiento? ¿Hice algo malo esa noche?

—Oh! Por el contrario, Ana no deja de hablar de usted en todo momento. Ya sabe, me gusta ver a mi pequeña feliz y se que ella no se atrevería a hablarle es un tanto tímida.

—¡Vaya! No se que responder a eso.

—No es necesario Señor Grey, pero espero que nos acompañe a cenar en nuestra casa hoy en la noche. Sé que Ana se pondrá muy feliz de volverle a ver.

—Claro, estaría encantado de ir.

—Perfecto, nos vemos hoy en la noche— Se levanta dando saltitos de muchacha entusiasmada.

Anastasia piensa en mi. Es una buena señal, he soñado muchísimo con ella y ese delicioso cuerpo ·Si verla con ropa me pone caliente. Verla desnuda será la gloria· No podría conformarme con tenerla para mi una noche ·No seas tonto Grey, aún puede rechazarte·
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Estoy en la puerta de los Steele. He pasado al Escala a asearme y darme un cambio de ropa más informal. Un traje obscuro y camisa blanca de lino sin corbata con los primeros dos botones abiertos. Cuando toco el Señor Steele me recibe.

—Señor Grey, es un placer que nos acompañe esta noche— Toma mi mano y la sacude.

—Señor Steele, el placer es completamente mío.

Me conduce a la sala, es un lugar amplio y acogedor.

—Nos vemos de nuevo— Chilla con entusiasmo la señora Steele.

—Supongo que si— Respondo dándole una sonrisa falsa. ·Esta mujer es un poco hostigante, pero me interesa muchísimo su hija·

—Ana bajará en un rato.

—Ya estoy aquí mamá— Escucho esa hermosa voz que proviene de la entrada de la sala.

—Hija, únete a nosotros,

—Buenas noches, Christian— ·¡Joder!· Se ve tan hermosa, lleva un vestido que deja ver sus hermosas y largas piernas.

—Buenas noches, Ana.

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En toda la cena, creo que sus padres están más interesados en mi que Ana, estaba tan distraída y distante. Pensé que tenía ganas de verme. Me siento estúpido al venir aquí para este tipo de comportamiento.

Anastasia se ofrece en darme un recorrido por su casa, no puedo negarme, tengo que saber que le sucede.

—¿Te encuentras bien?

—Claro, Christian, sólo quería un momento a solas— ¡Por fin! Yo igual nena, no sabes cuanto·

—Ana yo...

—No, señor Grey, quiero decirle algo primero.

—Tu me dirás— Lo digo de forma seductora.

Se ruboriza y empieza a morderse el labio ¡joder! Lo hace de una manera sensual, dirijo mi mano a su barbilla acariciando tiernamente y suelta su labio, paso mi pulgar en su labio inferior. No puedo evitarlo me acerco un poco más y bajo mis labios a los suyos y la beso lentamente y de forma sensual. ·Es el mejor beso que he dado o tal vez sea ella!· Acuno su rostro y ella levanta sus brazos alrededor de mi cuello, sus manos jugando con mi cabello. Bajo mis manos a su cintura ·es tan diminuta· y la atraigo hacia mi, gime de manera involuntaria y creo que será mi perdición porque siento que mi sangre se concentra en una zona al sur. Y mis manos se posan en sus caderas manteniéndola firmemente contra mi. Ana es la primera en apartarse y esta completamente roja ·se ve preciosa·

—Perdóname no quiero que te molestes por este arrebato.

—Bueno, creo que fue más fácil, porque realmente lo quería también—Joder ¡si!

Me acerco de nuevo a ella y para mi sorpresa empieza a besarme pero esta vez de forma urgente, es rápida y dura con sus besos. Nunca me habría imaginado a la dulce y tímida Ana dando besos así y eso me excita mucho. La empujo a la pared más cercana y la tomo de su barbilla para tener el control. De nuevo me sorprende cuando sus manos se posan en la parte baja de mi espalda y me empuja hacia ella, me frota en ella, gime y empiezo a ponerme duro. Bajo mis manos a su cadera  y ahora yo empiezo con el vaivén que ella inició, mientras ella sujeta mi rostro. Es tan excitante tenerla así.

—¡Oh! Ana, me encantas— Le digo con voz entrecortada y siento sus lágrimas. ·¿Qué diablos?·

—Ana, ¿que esta mal?

—Perdóname Christian— Continúa llorando.

—¿Perdonarte? ¿Por el beso?—Pregunto de forma dulce y seco una lágrima que corre por su mejilla con mi pulgar.

—Si, fue un error, normalmente no hago ese tipo de cosas.

— Nena, ningún error, el beso me ha encantado. Me alegra saber que soy el primero con el que haces este tipo de cosas— Le doy una sonrisa pícara.

Me da una pequeña sonrisa y toma mi mano, entrelazando sus dedos con los míos. Se sienta tan natural hacer esto. Nunca lo había hecho con ninguna de mis ex novias y con Ana es increíble. ·Ella es increíble·

Nos encontramos con sus padres. Ambos dirigen la mirada a nuestras manos entrelazadas.

—¡Son novios!— Grita Carla con euforia.

—Sí, mamá—Le responde Ana y yo la volteó a ver un poco impresionado por su respuesta.

—¿Lo somos?— Susurro.

—Si tú quieres, yo estoy más que feliz— Le doy un tierno y casto beso en los labios como respuesta.

—Me alegra saber que mi dulce niña esta en buenas manos, Señor Grey— Ray se acerca a mi y tiende su mano dándome un apretón.

—Dígame Christian, por favor. Espero no decepcionarlo,

—Claro que no muchacho, Ana no pudo haber escogido mejor persona que tu.