Capítulo 16

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—N-no debieron hacer eso. ¡Esto está mal! ¡Deberían...!

—Tranquilo, hyung, no pasa nada. Despertará y al vernos no actuará mal. Después de todo somos sus destinados, ¿no?

—Es verdad. Además la salvamos de ser atacada por Sehun. Nos agradecerá, entonces la desataremos y viviremos felices para siempre.

—N-no creo que funcione así. ¡¿Y-y si nos odia?! ¡¿Y si quiere hacernos daño?! ¡¿Y si...?!

—Jimin, cálmate, no puede hacernos daño, está atada a la silla.

Sunny escuchaba voces que parecían perderse en la distancia y luego volvían hacia ella con mucha intensidad. Intentó abrir los ojos, pero los sentía pesados. Cuando finalmente lo hizo, quiso creer que estaba soñando.

Se encontraba en una especie de sótano atada de pies y manos en una silla que parecía a punto de romperse. Y ella no estaba segura de querer que se rompa para salir de allí, podría terminar rompiéndose algo o cortándose gravemente. La silla no se veía en buen estado y ella no quería agarrar una infección que le costara la vida. Después de todo, no sabía dónde estaba, y podría estar lo suficientemente lejos de la civilización como para volver a desmayarse y terminar muriendo en el camino.

Al subir la vista al frente de nuevo, pudo distinguir a tres chicos, parecían estar discutiendo. Y al verlos detenidamente, reconoció uno de ellos como aquel lobo que se transformó en humano frente a ella antes de desmayarse. No pudo evitar que un gemido de miedo se escapara de su garganta, logrando que la atención de los chicos fuera hacia ella.

—¡Espera, no grites...! — pero Sunhee no hizo caso, gritó con todas sus fuerzas, logrando ver cómo el sonido les afectaba a los extraños frente a ella. Por lo que no dejó de gritar.

Ellos parecían tener problemas al escucharla hacerlo. Sunny, mientras tanto, trataba de desatarse como podía. Sin dejar de gritar en ningún momento, hasta que sintió un golpe en su cabeza que la dejó inconsciente, de nuevo.

—¡Taehyun, no debiste golpearla!

—La loca no dejaba de gritar, no podía soportarlo.

—E-esto es muy malo, si Hoseok hyung se entera n-nos matará.

—¿Enterarme de qué? —el líder de la Manada aparece bajando las escaleras y se detiene al distinguir el olor particular de sus destinada. —Por favor, díganme que esos gritos no han sido de ella.

Cierra los ojos y suspira pesadamente, terminando por entrar por completo al lugar.

—¿Qué...? —observa incrédulo a su mate, completamente inmóvil en aquella silla. —¿Qué demonios? —empieza a respirar fuertemente y sus feromonas de enojo se esparcen por toda la habitación. —¡¿Qué estaban pensando?! ¡¿Cómo se les ocurrió secuestrarla?! ¡¿Están locos?!

—Hyung, tranquilo, no le hemos hecho daño. Nosotros...

—¡¿Que no le han hecho daño?! ¡Está inconsciente! —el lobo mayor se acerca a Sunhee para buscar heridas en su cuerpo, observando un pequeño hilo de sangre bajar por su sien. —¡Está sangrando! ¡¿Qué jodidos le hicieron?!

—¡Nosotros no hicimos nada, hyung, ni siquiera la tocamos! ¡Ese debe haber sido Taehyun, él la golpeó!

—¡Pero si Taehyun ni siquiera está aquí! —Los tres menores miran alrededor del sótano, descubriendo que efectivamente, el otro lobo se había ido, dejándolos solos con aquel pequeño problema.

Hoseok quiere entenderlos, realmente quiere hacerlo. Pero que tengan a su mate, inconsciente, en el sótano y atada a una pobre silla, no le da buena espina.

A Girl In The Forest [BTS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora