CAPÍTULO 2

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Sentado débilmente en el suelo, Levi abrazó su cuerpo tembloroso, dejando que la sangre se desvaneciera en su camisa.

El mayordomo quería ayudarlo, pero el pelinegro dio un paso atrás.

-No te acerques ... yo ...yo solo necesito calmarme.

Yasu retrajo la mano y miró a la persona sentada en el suelo con preocupación.

- Señor, su mano necesita ser vendada.

Levi levantó la cabeza, se veía demasiado cansado.-Está bien, volveré a mi habitación, puedes pedirle a Aiko que prepare la cena, yo iré a acostarme.

El pelinegro se dirigió rápidamente a la habitación encendiendo todas las luces, su tembloroso cuerpo se relajó gradualmente ya que, debido a su trauma inicial, tenía miedo a la oscuridad. Habia estado trabajando duro para superar su miedo, pero después de la discusión con Eren supo que había retrocedido varios pasos.

En los últimos años, ha mantenido cuidadosamente este matrimonio, muchas veces sentía que llegaba a su límite, pero su corazón siempre estuvo renuente a renunciar, de hecho, debería haberse rendido hace mucho tiempo, Levi siempre ha sabido que frente a Eren su comportamiento es demasiado paciente y sumiso, como cuando le vertió una copa de vino en la cabeza frente a todos en la boda, y tuvo que disimular una sonrisa para no quedar en vergüenza, trato de excusarlo culpando al alcohol.

El vino tinto fluyó por el traje blanco manchándolo. Levi podía sentir los ojos burlones de las personas que lo rodeaban. Los invitados creían que la familia de Levi era ordinaria y no estaba al mismo nivel que ellos, que su actual estatus se debía a que contrajo nupcias con el presidente de la empresa Jaeger.

Después de ver la actitud de Eren hacia él, las personas a su alrededor estaban aún más seguras de que los rumores eran ciertos.

Por supuesto, Levi sabía que Eren lo hizo de forma deliberada para hacerlo quedar en ridículo frente a todos y no pudo levantar la cabeza porque el castaño siempre le dejo en claro que el lugar que ocupaba actualmente pertenecía a Armin Arlert, su verdadero y único amor.

Cuando Levi despertó, ya era de noche, bajó a la planta baja y vio a Eren sentado en el comedor. Sus movimientos eran elegantes y encantadores, como la primera vez que lo vio en aquella fiesta de cumpleaños.

Aiko lo vio descender y dio un paso adelante y pregunto.

-Señor, ¿desea que le sirva la cena?

-Si, por favor. -Levi jalo la silla y se sentó a cenar junto a Eren, los dos comieron de forma silenciosa sin comunicarse.

El aire tenía un ligero olor a desinfectante, Eren frunció el ceño cuando lo olió, y miró a la persona que estaba concentrada en su comida. Había una evidente marca de palma en su rostro. Movió los ojos hacia abajo, llamando su atención el vendaje que el más pequeño llevaba en la mano.

-Esa herida ... fue cuando estaba recogiendo las fotos.-hablo Levi con la voz apagada.

Eren sabía que el pelinegro prestaba mucha atención a su apariencia y tenía miedo de las cicatrices por más pequeñas que sean. El olor a desinfectante y medicamento aun permanecía en el aire, haciendo el ambiente cada vez más tenso.

-Es realmente repulsivo ver tu rostro tan hinchado, ¿Podrías ponerte algo? - añadió Eren con disgusto.

Levi apretó la cuchara que tenía en la mano, la soltó después de sentir dolor y respondió. -He estado tomando el medicamento, supongo que pronto lograrán su efecto.

¿Realmente le importo?murmuro el pelinegro, su corazón sintió un ligero toque cálido al sentir que su esposo se preocupaba por el.

-Iremos a mi antigua casa en unos días para ver a mi madre. No dejes ni una sola cicatriz no quiero escuchar los gritos de mi madre si te llega a ver así.

Loto Negro- Ereri (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora