CAPÍTULO 15

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Toda la casa se encontraba excepcionalmente silenciosa.

Sabiendo que Levi le teme a la oscuridad, Yasu pidió que se instalaran luces en lugares específicos de la mansión. Por la noche se encendían y permanecían encendidas automáticamente. La puerta de su habitación también estaba equipada, como también la sala de estar y el pasillo.

Levi sintió alivio al ver todas las luces encendidas, ya más tranquilo bajó suavemente las escaleras, viendo que las luces aún estaban encendidas en el estudio de Eren.

Ya en la cocina se sirvió un vaso de agua, luego abrió la alacena y sacó las galletas hechas por Aiko, estás eran realmente deliciosas, desde pequeño siempre le habían gustado comer dulces, cada vez que pasaba por una pastelería y veía las brillantes sonrisas de esos niños comiendo, se preguntaba si podría ser feliz toda su vida solo comiendo dulces.

Cuando su madre falleció, el se había mostrado reacio frente a los demás, prefería ocultar su dolor encerrado en su habitación, y si hablamos de la relación de padre a hijo, ésta se torno fría y rígida, los días pasaban y el semblante de su padre decaía, la delgadez en su cuerpo y la palidez extrema lograron que el pequeño Levi se preocupara, en su inocencia pidió a la cocinera que le hicieran un pastel y se lo llevó a su padre, tanto padre como hijo habían comido un pastel dulce y la amargura en sus corazones parecía diluirse por la dulzura.

-¿Qué estás haciendo? la voz del castaño resonó, Levi rápidamente dejó las galletas a un lado.

Eren se acercó con rostro cansado y se sirvió un vaso de agua para mirarlo.

-Yo... no puedo dormir, tenía sed por eso baje a tomar un poco de agua. -Después de hablar, dio un paso atrás y se paró en la esquina, tratando de reducir su sentido de existencia.

-¿Dónde está Yasu? Dile que me haga una taza de café y me lo traiga.

-Está dormido, yo te lo prepararé..... ¿de acuerdo?

Eren levantó la mirada y lo observó, sin decir nada fue a sentarse mientras cerraba los ojos.

Al ver que no había sido rechazado, Levi se emocionó mucho, cuando el café estuvo listo, lo tomó con cuidado y lo puso sobre la mesa.

Al ver los ojos rojos de Eren se angustió, así que preguntó con cautela-Ya es muy tarde. Dormir poco no es bueno para tu salud. Mañana puedes terminar con los pendientes de la empresa.

-Deja tu preocupación pretenciosa, no la necesito. -Eren sonaba bastante irritado.

- ¿Volverás a la habitación a descansar?

- ¿Volver a la habitación? ¿La habitación de quién? ¿Qué trucos quieres jugar, no lo olvides, estamos a punto de divorciarnos? - Después de eso, Eren dejó la taza de café mostrándose indiferente, subió las escaleras para finalmente escucharse el ensordecedor golpe de la puerta siendo cerrada.

En el estudio, el castaño permanecía frente a su ordenador, aun tenia muchos documentos de la empresa los cuales revisar, masajeo sus sienes con cansancio, lo único que podría relajarlo eran las melodías de C.L, aquel misterioso compositor a quien admiraba desde hace varios años, abrió un nueva pestaña, para así ingresar al sitio web y reproducir, al escucharla una extraña sensación se formo en su corazón, el sonido era era tan maravilloso y deleitable que cada fibra de su ser vibro. La fuerte emoción detrás de cada melodía siempre lo relajaba.

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A la mañana siguiente, Levi despertó temprano, bajó las escaleras y se sentó en la mesa como ya era costumbre cada mañana, dirigió su mirada sigilosa hacia las escaleras, esperando la llegada de su amado.

Aiko desde la cocina lo observaba con verdadera preocupación, ¿Cómo una persona podría soportar tanta humillación?

Eren no tardó mucho en bajar, observó a Levi con desdén y se sentó en la mesa, el mutismo era habitual entre ellos.

El tono de llamada rompió el silencio y el rostro de Eren se volvió instantáneamente relajado y gentil después de ver el identificador de llamadas.

-Bueno, volveré más tarde, ¿quieres que traiga tu tiramisú favorito?

Levi supo quién era la persona al otro lado del teléfono después de escuchar el repentino cambio de voz. Su corazón se hundió, pero fingió ser indiferente y siguió comiendo, aunque sus ojos estaban fijos en su desayuno, su mente ya no estaba ahi.

Después de que Eren colgó el teléfono, miró al pelinegro, quien comía con indiferencia, "gracias" fue lo único que dijo para desaparecer nuevamente por las escaleras, tomar sus documentos e irse.

Al escuchar el sonido del auto saliendo, Levi dejo sus cubiertos y miró fijamente la puerta. Aiko se sintió angustiada cuando lo vio desesperado, habían visto el afecto que tenía Eren sobre Levi en los últimos años.

-Señor, por favor no esté triste, él no lo entiende, pero nosotros podemos ver el gran amor que usted siente por su esposo.

-Es inútil ... No importa cómo lo haga, es inútil. Fue imposible hacerlo antes, e incluso es imposible hacerlo ahora.

Levi se levantó y caminó hacia la sala aturdido, se acurrucó en el sofá y hundió la cabeza entre sus brazos, parecía un niño abandonado, un niño el cual solo pedía un poco de compañía y amor. -Nunca puedo evitar que se vaya. ¿Cómo es que no puede ver todo el amor que siento por él? Como es que una llamada y un mensaje de esa persona pueda influir tanto en su corazón, y yo.....lo único que obtengo son espectáculos frente al abuelo, incluso si hubiera malos comentarios sobre Armin los ignoraría ya que para el siempre será perfecto y digno de llevar el apellido Jaeger. - Su voz tembló un poco.

Al ver que Levi estaba emocionalmente inestable, Aiko sirvió un vaso de agua, lo acercó y lo colocó suavemente sobre la mesa.

-Señor ... ¿está bien? Lo ayudaré a subir y descansar. - Después de decir eso, se acercó para ayudarlo, pero fue detenido por el rugido aterrador de Levi.

-¡No me toques! La mujer se asustó y lo miró sin comprender, no podía creer que Levi, quien siempre había sido modesto y razonable con ella, le gritara así.

-Señor, ¿Qué le pasa?

Levi levantó la cabeza y miró a Aiko, quien estaba llena de preocupación, su expresión se estabilizó gradualmente, se levantó y subió las escaleras presa del pánico. Cerró la puerta de un golpe y jadeó con la espalda contra la puerta.

Ya un poco más calmado no pudo evitar sentir arrepentimiento. Cada vez alejaba y lastimaba a las personas que amaba, Levi no quería continuar así.

Sacó su teléfono celular y miró el número del Dr.Reiss, pero no lo presionó. Levi levantó la mano para sostenerse la frente y vaciló, no quería seguir con el tratamiento, pero los ojos preocupados de su padre destellaron en su mente y lo pensó una y otra vez.

"¿Hola? Levi."

No hubo respuesta en el otro extremo del teléfono.....

"¿Levi? ¿Estás escuchando?", Preguntó el doctor Reiss con algo de preocupación.

"Doctor, quiero continuar el tratamiento, por las personas que me aman y las personas que se preocupan por mí".-hablo con firmeza.

"Es genial que pienses eso. Estoy muy feliz por ti. ¿Para cuándo agendo la cita?", La voz alegre del Dr. Reiss llegó desde el otro extremo del teléfono.

"Esta semana me pondré en contacto con usted. Gracias, Dr. Reiss".

Después de colgar el teléfono, Levi exhaló un suspiro de alivio. Caminó hasta la ventana y observó el patio lleno de los pocos árboles cuyas hojas habían caído, al ver una hoja solitaria colgando de la rama, le recordó a la relación que tenía con Eren.

Nunca sé sabrá cuando se romperá silenciosamente el último hilo que conecta el matrimonio.....

Loto Negro- Ereri (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora