CAPÍTULO 6

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Después de que la herida de Levi sanara, quiso levantarse de la cama y caminar. Finalmente salió por la puerta de la sala mientras Yasu estaba distraído.
Aún sentía algo de dolor en su cuerpo, se apoyó contra la pared para descansar un rato, de pronto sintió un fuerte mareo y su cuerpo se desvaneció. Levi espero el fuerte golpe contra el piso, pero este nunca llegó.

-Ten cuidado, ¿estás bien? - Preguntó una dulce voz.

Levi abrió los ojos para ver a la persona que lo sostenía frente a él, dos preciosos hoyuelos embriagadores conformaban aquella sonrisa particularmente brillante.

Después de recuperarse, rápidamente apartó la mano que lo sostenía, pero volvió a caer debido a la debilidad de su cuerpo.

-Ten cuidado. ¿Acaso quieres que te siga abrazando, pequeño?

Levi retiro nuevamente la mano que sostenía su cintura y lentamente le dijo al hombre.

-Suéltame.

Farlan Church estaba visitando a un amigo que estaba en el hospital, y tan pronto como estaba a punto de irse, se encontró con Levi, quien se tambaleaba así que decidió acercarse y ayudarlo.

- ¿Te mantendrás firme después de que te suelte? ¿Eh? - Farlan miró como el hombre se sonrojaba por la vergüenza.

-¡Dije que me soltaras, déjame ir! -Levi comenzó a temblar de nuevo, empujando sus manos con fuerza.

Al darse cuenta de que había algo mal con la persona en sus brazos, Farlan soltó su mano, solo para ver como Levi caía lentamente al suelo y su cuerpo empezaba a temblar constantemente. Farlan se quedó atónito por un momento cuando miró la cara familiar y luego dijo con alegría.

- ¿Levi Ackerman? Eres realmente tú. No te he visto en tantos años. No esperaba encontrarte aquí. ¿Te acuerdas de mí?

Levi lo miró tratando de analizar las palabras dichas por el hombre. Poco a poco el piso dejo de girar, así que se levantó lentamente apoyándose contra la pared, ya de pie observo a la persona que lo miraba con emoción, jamás olvidaría aquellos orbes claros, aquellos que siempre lo observaban con ternura y admiración. Finalmente recordó, era el hijo más joven de la familia Church, aquel que se le confesó frente a todos los profesores y estudiantes de la escuela secundaria, pero tuvo que rechazarlo directamente ya que desde ese entonces siempre había tenido sentimientos por Eren, pero Farlan Church nunca dejó de perseguirlo, pero después de la graduación ya no mantuvieron contacto.
-Joven Church, ¿Cómo podría olvidarlo? - Dijo el pelinegro con una sonrisa.

Farlan soltó una fuerte carcajada.-no me llames así, solo llámame Farlan. -el más alto se rascó la cabeza y sonrió avergonzado. -Por cierto, ¿ cómo es que te lastimaste la cabeza?

-Nada, me caí accidentalmente y me golpeé contra la mesa del comedor. -La sonrisa de Levi se desvaneció.

Farlan sintió que las cosas no eran tan simples como las narraba Levi. Trato de analizar el momento y levantó la cabeza, su mirada se centro en el anillo que llevaba Levi en la mano derecha -¿Estás herido y hospitalizado y nadie te cuida? ¿Dónde está Jaeger? ¿No vino? -el pelinegro se quedó inmóvil, sin saber qué hacer o cómo responder.

-Él ... se acaba de ir, yo lo envié a casa a descansar.

Farlan lo miró desconcertado- ¿todavía te sientes mareado? ¿te ayudo a regresar a la habitación?, ¿no te has lastimado? ¿Cómo puedes salir con tu lesión?

-No, iré solo, no necesito tu ayuda.– Levi evito tener contacto con la mano extendida de Farlan, se dirigió hacia su habitación mientras se sostenía de la pared.

-Realmente no te gusta que otros te toquen, sigues igual a como eras en la escuela. En ese momento, no entendía porque las personas hablaban mal de ti. Pensé que eras una persona inhumanamente arrogante.

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Levi se dirigía a duras penas hacia su habitación, seguido de Farlan, quien a pesar de la negativa dada por el pelinegro igualmente lo acompañó, caminó junto al más bajito, y le contó con entusiasmo sobre las anécdotas que había pasado en la escuela secundaria. Levi, que había estado reprimiendo sus emociones estos días, también se sintió mucho mejor y empezó a sonreír.

Yasu esperaba ansiosamente en la puerta y finalmente dejó escapar un suspiro de alivio cuando Levi regresó.

-Señor, finalmente regresó -el hombre rápidamente le sirvió un vaso de agua y se lo acercó. El mayordomo notó a la persona que estaba al lado del pelinegro y preguntó-¿y usted es...?

Levi tomó el vaso y dijo lentamente-Su nombre es Farlan Church, fue mi compañero de clase junto a Eren.

-Ya que te traje sano y salvo, es hora de que me retire. No me conviene quedarme aquí. Este es mi número de teléfono. Me mantendré en contacto contigo más tarde. Farlan sacó una tarjeta de presentación y se la entregó a Levi, mostrando una hermosa sonrisa.

-Bueno, gracias - respondió el pelinegro, mirando esos ojos que siempre lucían encantadores.

-Levi recuerda contactarme. No te he visto en tantos años. Realmente te extrañé. Cuando estés recuperado, te invitare a salir. –Farlan se alejo e hizo un gesto con la mano antes de entrar en el ascensor. Ya adentro el de ojos azules sonrió-Realmente valió la pena venir al hospital hoy -Se quedó mirando el teléfono y sonrió de nuevo.

Yasu miró hacia la dirección en la que Farlan se había ido- Señor, ¿es ese el hijo menor de la familia Church?

-Sí.-Levi respondió y se recostó en la cama mirando la tarjeta que le había en entregado Farlan.

-Dreams Music Studio. -Levi leyó en voz baja, realmente Farlan había sido capaz de lograr sus sueños.

Yasu miró la tarjeta de presentación en la mano de Levy con expresión preocupada. -Señor, su esposo no estará muy contento con esto, es mejor que tiremos la tarjeta.

-Si, tienes razón.

En un abrir y cerrar de ojos el pelinegro fue dado de alta del hospital, y Eren nunca lo visitó ni una sola vez.

Finalmente lo habían dado de alta, tantos días hospitalizado lo habían abrumado, guardo con suma paciencia algunas de sus pertenencias en un pequeño bolso, antes de dirigirse a la puerta acomodo su flequillo, quería tapar aquellas horribles cicatrices que marcaban su frente.

Al salir del hospital sintió una ligera ráfaga de viento golpear su rostro, acomodo nuevamente su flequillo y observó como las hojas caían lentamente de los árboles, el otoño se acercaba, así que no tuvo mejor idea que dirigirse a un centro comercial y comprar algunas prendas abrigadoras.

Al llegar, pagó al taxista y se bajó del vehículo, dijo un ligero gracias e ingreso al establecimiento, recorrió diferentes puestos tratando de buscar algo acordé a sus gustos, sin embargo su pequeño momento de paz fue arruinado por unas voces bastante familiares, dió la vuelta lentamente, sabía que debía irse y no lastimarse aún más, pero su accionar fue más rápido que sus pensamientos, frente a el se encontraba Eren junto a Armin, el pequeño rubio sostenía un abrigo color beige.

-Eren ¿crees que este color me queda bien? -Armin se miraba al espejo mientras fruncía el ceño.

-Bueno, me gusta mucho que uses este color, te queda muy bien.– Eren caminó hacia el espejo y lo miró con ternura rodeando a Armin con sus brazos.

Levi simplemente se quedó paralizado en su lugar, mirando la complicidad con la que ambos hombres se trataban, aquella escena pulverizó su corazón . El había sido internado en el hospital por culpa de su esposo, sin embargo, nunca vino a verlo ni una vez. Pensó que el trabajo en la empresa lo mantenía ocupado y por ende no podía escapar de sus obligaciones, pero la realidad era otra, él estaba con Armin.

Eren siempre lo había tratado con indiferencia durante mucho tiempo. Levi pensaba que era parte de la personalidad del castaño, pero no era así, ahora que veía la manera tan gentil y considerada de Eren hacia Armin.

Tanto el castaño como Armin se encontraban divirtiendo, cuando el rubio quiso decir algo, sus ojos se cruzaron con los de Levi, aquellos orbes azules reflejaban burla y odio.

Loto Negro- Ereri (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora