"𝒅𝒖𝒍𝒄𝒆 𝒗𝒊𝒅𝒂" [ʙᴏɴᴛᴇɴ] ➤ 𝗘𝗻 𝗲𝗱𝗶𝗰𝗶𝗼́𝗻

⤷ Capitulo 13 - 𝐀𝐟𝐟𝐢𝐧𝐢𝐭𝐲

21 de octubre

Escuché unas voces en mi habitación, al principio eran borrosas tampoco podía contarlas, tenia mucho sueño pero mi cerebro despertó y distinguí dos voces.

— Mikey vamonos, déjala en paz— decía una.

—No— dijo seguramente Mikey.

— Déjenme dormir— dije entre quejidos de malestar ocultando mi cabeza dentro de las colchas.

— Hekimaaaaa— dijo juguetón Mikey, espera ¿Qué?

— Mikey!— me destapé de golpe, ví que el otro era takemichi.

— Despertasteeee, esta listo el desayuno, desayunemos juntos<3— asentí rápidamente, Takemichi hizo un gesto de desaprobación pero no sabia por qué.

—Me lavó la cara y voy— les dije yendo al baño, ellos bajaron la escalera por mientras.

Bajé al primer piso rumbo al comedor, tenían desayuno listo, me senté a comer junto a Mikey y Takemichi.

— ¿Dónde esta Sanzu?— dije tomando un sorbo de café.

— Durmiendo como bebe arriba con Estela y Mia— dijo la rubia alta de ayer, sentándose en el comedor junto a nosotros, sentí en mi cuerpo escalofríos, los gemidos de ella pasaban por mi cabeza haciendo mas torpe de lo normal.

— ¿Esta bien?— Pregunté seguido.

— Obvio que lo esta, lo dejamos como nuevo— deje de mirarla para mirar mikey pero el estaba concentrado en la comida que le daba Takemichi, cada dia que pasaba con ellos su relación no me hacia lógica.

— Me alegro— respondí mientras mi piel se puse de gallina, ya no me sentía avergonzada, sentía la necesidad de echarla de la casa, pero andaba en ropa interior y no podría dejar que se fuera sin comida o algo de ropa.

— Takemichi lamento el ruido de ayer, hace rato no lo hacia en mi espac....— la vos de Sanzu venia de la escalera camino al comedor, cuando me vio corto su habla.

—¿Cuándo llegaron?— pregunto apuntando a Mikey y a mi.

—En la madrugada...— respondí a secas mientras el se acercaba a la chica rubia.

—Elisa ve a ponerte algo de mi vestidor, yo les pago el taxi— dijo echándola disimuladamente del comedor.

— ¿ella es tu hija?— pregunto la rubia a Sanzu mirándome a mí.

—Claro que no, solo en sus sueños— respondió Sanzu.

—Quien putas querría ser tu hija— le dije tomando café, en el fondo estaba molesta con el.

— Todas me dicen papi— rebatió lo que dije y me ahogue con el café, la rubia ya había salido del salón.

— M..e- m.ue..ro— dije tosiendo.

— Te lo mereces— dijo Sanzu sentándose a desayunar, el iba con una camisa abierta y un pantalón de pijama, me recupere de mi estado, Mikey y Takemichi seguían en las suyas, en una burbuja.

—¿ Mínimo te bañaste? Vienes pasado a sexo— le dije con la mirada sería posada en él, golpeo un débilmente la mesa con su puño.

—Es mi casa y hago lo que quiero— dijo desafiante.

—No, es mi casa— dijo Mikey dejando a Sanzu en el suelo por su argumento.

— Mikey — dijo Sanzu parándose yendo abrazarlo.

—Aléjate de Mikey ser maligno— dijo Takemichi. Sanzu retrocedió volviendo a su puesto, pero no por lo que dijo Takemichi, si no por la mirada fulminante de Mikey. Todos comimos en silencio, teníamos hambre y sueño.