Dicen que el tiempo lo cura, sea cual sea la situación, pero no en todos los casos funcionaba. La pareja trataba de sanar aquel inmenso dolor que sentían dentro de sí, alguna solución la hallaron compartiendo con sus seres más allegados, pero aun así seguían vacíos.
Mia caminaba por la estación del metro, buscando la salida para llegar a su trabajo. Caminaba apresuradamente, tenía que hablar con Stephen acerca de la nueva mesera.
- Mia, hola ¿Cómo estás?
- Lauren, no esperaba verte.
- La sorpresa es obvia -río.
- Lamento haberlo dicho de esa manera, sonó feo.
- Descuida. Oye ya que te veo, se dará una velada en dos días, es un evento muy importante, considéralo benéfico.
- Oh ya veo.
- Quiero que vayas.
- ¿Qué? ¿Acaso estás loca? No iré, no puedo.
- ¿Por qué?
- No creo que sea apropiado, además es súper elegante y no tengo ese tipo de vestuario en mi clóset.
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- Hemos llegado, bellas damas -Douglas les sonrió señalando el edificio.
- Genial -la morena observó a su amiga, estaba muy emocionada, sabía que algo bueno sucedería.
- Lauren, me arrepentí, no entraré allí.
- ¿Qué cosas dices?
- Él está ahí, adentro, no creo que...
- Sí el destino los quiere juntos, los unirá. Tú solo encárgate de entrar y disfrutar la noche.
- Bien.
Los tres entraron por la gran alfombra y subieron unas cuantas escaleras hasta el salón principal. El lugar estaba lleno de grandes estrellas, grandes artistas; todos sonriendo a sus amigos, tomando algunas fotos y bebiendo de sus copas. Lauren sonrió al encontrase frente a frente con el grupo de actores.
- ¡Pero miren nada más lo que trajo el viento! -Kumail sonrió al verlos.
Rápidamente los tres saludaron al resto, excepto al irlandés, no se encontraba aún en el evento.
- ¿Cómo estás? Últimamente no te hemos visto. -Salma la tomó de la mano de la castaña.
- He tenido mejores días.
- Espero todo se aclare y sean días maravillosos los que vengan.
- Gracias, enserio.
- Mia sin duda alguna, es una chica tan hermosa -Kumail pasó su brazo por sus hombros y le sonrió.
- Estás en lo cierto, mi amigo -chisto el chico.
- Hola, pequeño duende. ¿Dónde te escabullías? ¿Al final del arcoíris?
- ¡Que gracioso! -todos rieron.
- Barry.
- Mía.
La pareja se observó fijamente a los ojos y se dieron cuenta del dolor que llevaban dentro, cuanto adoraban encontrarse y la llama del amor.
- ¿Cómo has estado? -él la observó con cierta cautela, alejándola un poco del grupo para hablar con calma.
- Creo que no es necesario decirlo...
- Pensé que era el único. -la observó a los ojos- Estás hermosa.
- Tú también estás muy guapo.
- Mía...
- ¿Qué quieres?
- Solo quiero estar contigo, eso es lo único que quiero.
- Yo igual.
- Sé que toda la culpa es mía y no te imaginas cuánto lamento eso, siempre tuve una venda en mis ojos y lo peor de todo es que desconfíe de ti. Ese es mi peor error.
- Barry -la chica se acercó y lo abrazó con mucha fuerza y necesidad.
- Mi Polo Norte.
- Te extrañe tanto, tu tacto, tus palabras, tu sonrisa, incluso tu comida.
- Yo extrañaba a mi alma gemela.
- Eso somos, nuestra alma gemela.
- ¿Quieres bailar?
- Nada me gustaría más.
Caminaron hasta la pista y se abrazaron, como aquella vez que conoció al set de Eternals. El tiempo se detuvo, el ruido desapareció, solo estaban ellos dos y aquella armonía tan pura y significante. No importaba lo que había sucedido, estar en los brazos del otro les transmitía lo que ellos querían y eso solo pudo demostrar el gran amor que sentían.
- ¿Por qué nunca llamaste? -le pregunto la chica.
- Me pediste que te dejará sola, quise cumplir tu petición.
- No debiste hacerme caso...
- Quién no te hace caso a ti, Mia Wilson.
- Quiero que solo tú me desobedezcas.
- Será todo un placer.
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La reunión terminó satisfactoriamente, los chicos rieron, bebieron y bailaron toda la noche, sin duda alguna habían disfrutado a más no poder.
- Supongo que hemos llegado al final -susurró el chico.
- Vuelva pronto, espero haya disfrutado el servicio -sonrió.
- ¿Te volveré a ver?
- Puede que sí, es probable.
- Te llamaré.
- Bien.
- Yo quería decirte que, sí tú quieres, podríamos intentarlo de nuevo. Pero no aún.
- Es mejor dejar algo de tiempo.
- De acuerdo.
- ¿Barry?
- ¿Sí?
- Te quiero.
- Yo más, mi Polo Norte.
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Mistakes- Barry Keoghan
Fanfiction- ¿Qué piensas del amor? - Dolor y sufrimiento. - No puede ser. - se burló- Para mí es la sensación más hermosa que existe. Te hace sentir cosas maravillosas e inexplicables. - Eres todo un princeso. - Mía, no te burles de mí. - No lo hago, solo cre...