Una historia sobre Rachel Parker (Harry Osborn)

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Cuando llegamos a casa de mis tíos ya era un poco tarde, pudimos a ver a una pequeña distancia que la puerta estaba rota, eso me llenó de preocupación y Harry lo notó.

—Tranquila—Me tomó del brazo—Debió ser un accidente, vamos a ver a tus tíos o a Peter.

Pero yo me solté de inmediato y corrí a mi casa para ver a mi tía May, la cual estaba llorando. Yo no entendía nada.

—¿May?, ¿qué sucede?—Le pregunté pero no respondía—!¿MAY?!, MAY TE ESTOY HABLANDO.

—Es tu tío Rachel—Y cayó en llanto, me abrazó tan fuerte como nunca lo había hecho.

No lo podía procesar.

¿Mi tío?

¿Ben?

—May, necesito que me expliques—La miré a los ojos—¿Qué pasó con mi tío Ben?

—Le dispararon, hija—Peter lo vio, me llamó para decírmelo—Esto ultimo lo dijo algo cortado, mi tía no paraba de llorar, ya no quería hacerle más preguntas y provocarle algo.

Apenas mi tía me dejó de abrazar, se fue a sentar, viendo a la nada. Yo salí y Harry estaba en el mismo lugar, lo vi y no pude decir ni una palabra, lloré y lloré, él me abrazó y me prometió que todo estaría bien, no pude decirle ni que había sucedido pero él me juraba que ninguna otra cosa mala podía pasar.

—Quédate en mis brazos el tiempo que quieras—No paró de abrazarme—Llora lo que quieras, desahógate, yo estoy y estaré aquí.

No pude decir ni una palabra, por lo menos en 10 minutos. Le dije que muchas gracias y entonces me fui a mi habitación, quizás debí ayudar a May a reparar la puerta, quizás debí ayudar a May a reparar esa grieta de su corazón, quizás debía averiguar dónde estaba Peter, pero no podía, apenas me recosté en mi cama y procesé lo que dijo May, mi cuerpo se apagó, mis ojos se apagaron, solo podía ver a Ben abrazándome, enseñándome a montar en bicicleta, apoyándome cuando siempre fui un bicho raro para todos, y siendo un padre para mí, el mejor sin dudarlo.

Me quedé dormida y cuando desperté no sabía que hora era, ni quien estaba en la casa. No podía ni quería hacer nada, tenía una herida y no la de una bala en el corazón, era algo mucho peor.

La bala en el corazón me dolió y me hirió, pero la muerte de Ben me mató.