Una historia sobre Rachel Parker (Harry Osborn)

10

Todo fue a como lo conté hasta que de la nada viendo mi techo sentí un golpe, pero no uno físico, sino uno en mi interior.

—No puedo seguir así, a Ben no le gustaría—Me susurré.

Entonces agarré mi teléfono y empecé a ver todos los mensajes que había ignorado por casi un mes, todavía me dolía demasiado la muerte de Ben, pero Ben nunca me quiso ver mal.

Harry me había hablado algunas de veces, la última vez había sido hace tres días, que cuando estuviera mejor le hablara.

Le hablé a Heather, la necesitaba. Ella me habló de una fiesta, dice que eso es bueno para despejarse, y nunca había ido a una fiesta realmente, así que que estaba feliz por tener a Heather en mi vida y por dar un paso a la superación.

Le marqué a Harry, me contestó casi al instante.

—¿Reach?

—Sí, la misma—Respondí algo apenada—Perdón por no haberte hablado en... Casi todo un mes.

—En serio no te preocupes, te entiendo, yo estuve igual o casi peor cuando... Fue lo de mi madre, pero ahora estoy mejor, porque la vida acaba para unos y sigue para otros, y solo hay que disfrutar antes de que se acabe.

—Tienes razón... En serio muchas gracias, en la escuela me hablaste muy bien cuando me diste tus condolencias y solo te ignoré como a todos... Deberíamos vernos, claro, si te parece bien...—No estaba demasiado segura de lo que me respondería.

—Es justo lo que trataba de decirte—Por como lo dijo, sé que sonrió—¿Puede ser hoy?

Iba a decir que sí, hasta que recordé la fiesta que me dijo Heather.

—Es que...—No sabía exactamente que decir—Hoy no puedo, pero mañana temprano me parece más que bien.

—No hay problema linda, ¿mañana en el parque?

—Mañana en el parque—Logré sonreír después de mucho tiempo después.

—Y en la misma banca, en la mañana—Entonces oí a su padre de fondo—Tengo que colgar Reach, pero ahí te espero, cuídate.

Estaba en parte contenta, pero ese hueco en mí no se iba, quizás era algo con lo que tendría que aprender a vivir.