Como al principio.

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Nunca había visto a un chico así con migo, bueno, ni así ni de ninguna forma. El caso es que ahí estábamos, cara a cara, esperando a que alguno de los dos dijera algo pero no me atrevía a gesticula palabra y tampoco sabia que decir.

Auron: ¿Que coño quieres Nekane?

Me quedé petrificada y no me podía hacer nada, no me respondía el cuerpo, ni siquiera podía parpadear pero yo seguía cogida a su brazo para que no se marchara. Al fin alcé el brazo con las llaves del coche en la mano y abrí el coche que estaba justo a mi lado.

Neka: Sube al coche.

Auron sin decir nada subió al coche.

Auron: ¿Dónde me llevas?

Neka: A mi casa, no quiero discutir delante de todo el mundo, a nadie le importa nuestros problemas.

Auron: No estamos discutiendo, no hay nada mas que decir.

Llegamos y subimos a mi casa, se sentó en el sofá y puso los codos sobre las rodillas, soplando su cabeza sobre sus manos. Me senté a su lado.

Neka: Lo que no entiendo es por qué te pones así.

Auron: -Interrumpiendome- Porque simplemente me importas, y ya esta Nekane.

Le alcé la cabeza, le miré a los ojos, y junte mis labios con los suyos, otro beso suyo y sentía cosas cada vez más fuertes. En el fondo estoy preocupada ¿me estaré enamorando? Tengo mucho miedo, no quiero enamorarme y después decirle un adiós a ni primer amor, no quiero pasarlo mal pero... Son sus ojos, su sonrisa, su forma de ser... Su todo.
Despegue mis labios de los suyos y me miró fijamente con cara de sorprendido.

Auron: Lo siento Nekane, un beso no lo arregla todo.

Se levantó del sofá y salió por la puerta, me quedé sobrada, en blanco, con la mirada perdida y perdí la noción del tiempo pudieron pasar hasta horas pero no me acuerdo, una lágrima salió de mi lagrimal y se deslizó juguetona por mi mejilla hasta caer sobre mi huesuda y pequeña rodilla, no podía mas... Demasiada tensión... Tenia que liberarme, subí por las estaleras y abrí la puerta del baño, me arrodille delante de la taza del baño abrí mi boca y me metí los dedos, hacía años que no sentía esa liberación... Cada arcada, cada vez que salía ese sabor amargo era una liberación. Termine y tiré de la cadena, y me metí en la cama, me sentía bien a pesar de lo que acababa de hacer.
Av entró por la puerta.

Av: ¿No te quitas el maquillaje ni nada?

Neka: No, no tengo ganas de nada.

Av: Ya me he enterado. ¿Estás bien?

Neka: -Llorando, la cogí por la cintura.- No estoy bien, estoy echa un lío y no se como solucionar esto.

Av: Fácil, ¿Quién te atrae más? ¿Rub o Auron?

Neka: Es que no estoy segura, no lo se.

Av: -Mientras me secaba las lágrimas.- Anda, quítate todo esto y ponte el pijama que yo me voy a casa a descansar.

Me quité el maquillaje y me puse el pijama.

Rub: -Tocó a la puerta.- Neka...

Neka: Entra, tranquilo.

Rub: Siento lo de antes, no se que me ha pasado, de verdad.

Neka: -Me metí en la cama.- No pasa nada estoy cansada, buenas noche.

Rubius salió de la habitación y se fue a la suya. Pensaba en que todo iba a cambiar, e iba a estar todo como al principio con nuestras risas y nuestras cosas, me puse mi iPod a escuchar música, mi abuelo siempre decía "La vida sin música es una rutina." y que razón tenía entre lágrimas, sonrisas y recuerdos me quedé dormida.

solo unas vacacionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora