Harco vs el Destino.
"Si el Destino dice que no, ¡que se vaya a la mierda!
No importa dónde estés, te prometo que aún en mi otra vida te buscaré.
y si al encontramos no logras reconocerme..."
Mini historias (au)
"Que no esté contigo no significa que no seas el amor de mi vida" (Frases Pinterest)
-¡Ya no puedo más!- Grito el rubio entre lágrimas.
-Draco, por favor.- Se quejo el pelinegro con notable cansancio.
-Lo siento Harry, pero ya no puedo seguir con esto.- sollozaba el ojigris.- Estoy cansado de fingir que estoy bien... Que tú y yo estamos bien.- Continúo.- Nada está bien.-
-¿Qué quieres decir?- Preguntó acercándose al rubio.
-¿Sabes lo asqueroso que es tener que oler su perfume en tu ropa? Tener que fingir que no sé que vienes a mí después de revolcarte con ella.- Sus palabras estaban cargadas de resentimiento.- Sé quién soy y maldigo el día que acepte está relación.-
Harry evitó la mirada del rubio.
-Es gracioso, ¿No crees? Tener que soportar los reclamos de tu amante.-
Las palabras de Draco se adentraban una a una en el corazón del azabache. Y no era falta de amor, se amaban con locura, pero la cobardía de uno afectaba al otro.
-Dame tiempo.- Habló al fin, acercó su mano para limpiar las lágrimas que seguían saliendo de aquellos ojos plata, cansados y sin vida.- Me divorciaré de ella, te lo prometo... Solo dame más tiempo.- Suplico sintiendo como un nudo le apretaba la garganta.
Después de un largo silencio el rubio sonrió con tristeza una tristeza que hacía doler el corazón del pelinegro.
-He esperado por 10 años.- Susurró.
-Sabes que no es tan fácil.- Harry comenzaba a frustrarse.
-Lo sé, en estos 10 años te dedicaste a hacerle un hijo a Ginevra cada 3 años.- Hablo con malicia.- ¿Lo sabías? Cada que hablabas sobre divorcio, ella lloraba y te llevaba a la cama apostando a tu lado protector, sabía que si te daba un hijo te mantendría a su lado, pero uno no fue suficiente... Los Weasly no son buenos guardando secretos. - Finalizó con ironía.
No podía culpar a Weasly por tratar de salvar su matrimonio (uno que estaba roto ya hace bastante tiempo) y mucho menos a sus hijos porque sabía perfectamente lo mucho que Harry los amaba, incluso si ese amor ya no era para Ginevra.
-Dijiste que me amabas.- Las palabras de Harry sonaban lastimeras.
-Te amo.- Dijo sin dudar.- Y creí que con eso bastaba para soportar cualquier cosa.- El rubio limpio sus lágrimas una vez más, antes de ponerse de pie.- Pero me costó darme cuenta que tú jamás dejaras a tu esposa y yo.- Se acercó a la entrada y abrió la puerta.- Y-yo ya no quiero compartirte con nadie más.- Suspiró.- Ahora, por favor vete y no regreses.-
Harry se supo de pie, no fue capaz de controlar sus lágrimas. Camino hasta quedar frente al rubio y tocando delicadamente su mejilla preguntó.- ¿Estás seguro de esto?-
El rubio no respondió de inmediato, claro que no estaba seguro pero era lo mejor para él, para su familia y para el mismo Harry.
El pelinegro interpretó el silencio, con cuidado acercó sus labios a los del rubio para besarlos por última vez. Draco correspondió y con las pocas fuerzas que le quedaban se separó colocando sus mando sobre el pecho del moreno y empujándolo hacia atrás.
-Adios Potter.-
-Adios Malfoy.-
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