𝐄𝐥 𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝐆𝐮𝐥𝐟 |𝐌𝐞𝐰𝐆𝐮𝐥𝐟|

04

~Mew~

¿Cuántos años de cárcel me darían por asesinato imprudencial?, supongo que no muchos, los suficientes como para que saliendo de la cárcel pueda encontrar a mi pareja, casarme, formar una familia y ver a mis hijos crecer. No quisiera mancharme las manos de sangre, pero Bright se lo esta buscando a pulso.

— Oh, enserio lo lamento mucho, no pensé que mis feromonas afectaría a tu amigo, Mew, ¿estará bien?— preguntó Min mirándome preocupado a Bright, quién se encontraba inconsciente en el suelo.

— No es para tanto, solo está exagerando — miré a mi amigo, si no fuera por que está mi hermano, ya hubiera agarrado a golpes a mi amigo.

No es que sea un hermano celoso, porque no lo soy, solo que no me gustaría que Win se sienta atraído por Bright, sinceramente no creo que una relación entre ellos funcione, no odió a mi amigo, pero se muy bien como es, no toma las relaciones enserio, y no quiero ver a mi hermano sufrir,  ya ha tenido experiencias baste desagradables con tipos así y no deseo volver a verlo mal.

— Cuando se despierte seguro que se molestará  — sus ojos se cristalizaron — Tu amigo me odiaría, lo siento

— Ajá, si como no, estará todo menos molestó — susurré molesto, seguro que Bright estará como mosca encima de Win. — Ahora lo despierto — sonreí divertido, una idea se vino a mi mente, me cobraría una de tantas.

Tome el florero que estaba en la mesa de la entrada, le retiré las flores y le vacíe el agua al rostro de mi amigo.

— chuh — escupió agua — ¡Qué domoni...— me miró, supe que me golpearía, segundos después miro a mí Nong y me sonrió, y por primera vez, aquella mirada en Bright no supe interpretarla.— Hola, soy Bright Vachirawit y ¿Y tú?— preguntó levantándose del piso sin dejar de ver a mi hermano

— Soy Win Jongcheveevat, en verdad lo siento, lo siento, yo...yo...yo no quería provocar que te desmayaras, perdón — hizo una gran reverencia — Si mi presencia te molesta, me ir...

— ¡¡NO!! — gritó mi amigo tomando de las manos a mi hermano.

— Vachirawit...— susurré irritado

Tal vez estoy exagerado un poco, y no pase nada entre ellos, pero no bajaría la guardia. Solo espero que solo sean unos días los que se quede Win en casa.

— Perdón — lo soltó avergonzado — No tienes por qué irte, esta es más casa de Mew, puedes quedarte y ah...yo...

Abrí los ojos con sorpresa e indignación, Bright se sonrojó, acción que me molesto mucho, él nunca se sonroja, nunca. Debo controlarme, solo estoy siendo paranoico, ¿verdad?

— Y por mi desmayo no te preocupes, te juro que no nunca me ha pasado cuando conozco a omegas, pero debo admitir que tu olor es exquisito, me gusta 

— Gra... gracias  — Win bajo la mirada avergonzado

— ¡Me voy! — grité

Mi humor termino por explotar, Bright comenzó a jugar y lo detendrían haría sufrir a Win. Sin más salí del apartamento, sus reacciones al conocerse no me grado mucho. Hablaría con mi amigo y hermano cuando esté más calmado, si no lo hago, terminaré por perder a los dos. Sin embargo mi alfa lo podía sentir, esos dos habían tenido una conexión.

— ¡Aaahhh! — grité saliendo lo más rápido de edificio, iría al parque a pensar, cuando iba a dar la vuelta en una de las esquinas, choque con alguien. — Perdón — dije son mirarlo y seguir mi camino.

— ¡TE MÁS CUIDADO IDIOTA!

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~Gulf ~

Vaya que me sentía mejor, hablar con Mild hizo que me quitará un peso de encima, me hace feliz que mi Phi no se molesto conmigo por haberle ocultado lo de mi embarazó apenas lo supe, pero tampoco estaba feliz de la decisión de que tuviera al bebé, me apoyaría en todo y eso se lo agradecía mucho. No sería fácil, lo sé, pero haría todo lo posible para darle una vida digna a mi hijo.

— Vamos por un helado, yo invito — sugirió mi Phi

No pude negarme, Mild me tomó de la mano y me saco de la casa de mis padres. Un helado no me caería mal después del mal rato que pasamos.

— Entonces... ¿Has pensado que harás con el trabajo? ¿Renunciarás? — preguntó realmente curioso abriendo la puerta de la heladería

— ¿Renunciar? ¡Ni loco! — exclamé frunciendo el celo, amo mi trabajo, no lo dejaría, ¿Cómo sobreviviría?. — Seguiré trabajando unos meses y después regresaré cuando nazca mi bebé

— ¡ESTÁS LOCO! — gritó mirándome horrorizado —¡¿Si sabes, que cuándo están embarazado sueltas muchas más feromonas y atraes más a los alfas?! ¡Tus hormonas se desequilibran! ¡Excitaras a todo el bar! ¡No volverás a trabajar ahí! ¡te lo prohíbo! — sentenció

— ¡No lo haré!, ese lugar es mi vida, no me iré — lo mire indignado y molestó, será muy mi amigo, pero no tiene ningún derecho a tomar esa decisión por mi, y mucho menos prohibirme algo.— ¡No puedes prohibirme nada, es mi vida! ¡No renunciaré! — le grité

— ¡No te prohibiría nada y seguirías trabajando sino TE HUBIERAS EMBARAZO DEL PRIMERO QUE HABLÓ BONITO PARA QUE SE METIERA ENTRE TUS PIERNAS! ¡ERES UN IRRESPONSABLE!

Aquello me dejó sorprendido y muy incómodo, por estar peleando, se me había olvidado que estábamos adentro de la tienda y las pocas personas que estaban en el lugar, nos miraron. Las palabras de Mild me dolieron y mucho.

— Tienes razón, no debí meterme con el primero que se cruzará en mi camino, lo siento — dije soltando una lágrima y sin más salí del lugar.

Me sentí muy humillado, no era ningún omega cualquiera que se mete con el primer alfa que me hable bonito, todo había sido por mi culpa, por mi celo y mi estúpida naturaleza omega.

— ¡GULF! ¡GULF! — escuché a mi amigo gritar detrás de mi pero no me detuve. — ¡Gulf! — tomo mi muñeca pero seguí sin mirarlo.

Debo verme patético.

— No quise decir eso...solo... perdóname, es solo que estoy molesto conmigo, debí acompañarte esa noche, no debí dejarte solo, perdóname, además no se me hace justo que tú seas el que tenga que cargar toda la responsabilidad — me abrazó por detrás  — Como me gustaría tener a ese tipo enfrente para darle una lección

— Jaja — sonreí, no podía enojarme con Mild, lo entiendo, si él estuviera pasando lo que yo, estaría igual de molestó y preocupado. — No pasa nada, y gracias por preocuparte — me deshice de su abrazo y miré. — Aunque me gustaría verte golpear a ese alfa, no puedes ni siquiera sabemos quién es  — lo tome del brazo y comenzamos a caminar, tenías ganas de ir a caminar para tomar un poco de aire y sentarme un rato pensando en lo haría a partir de ahora. — Con decirte que puede pasar frente a mí y no lo reconocería — bromeé

Dimos unos pasamos más antes de que una persona chocara contra mi.

— Perdón

Fue lo que dijo, no pude mirarlo, todo fue muy rápido, voltee para verlo, pero solo alcancé a mirar su espalda, sonreí al sentir un leve pero agradable olor a pino con cedro en el ambiente, mi omega también pareció gustarle, podía sentir su alegría.

— ¡TE MÁS CUIDADO IDIOTA! — le gritó mi amigo al hombre

— Descuida, no pasó na...

Estaba por callar a mi amigo, cuándo miré el letrero que estaba colgado en el edificio, del mismo dónde había salido el chico con él que choque. Sonreí.

— ¿Qué pasó? ¿Estás bien? — preguntó

— Si, Mild — lo mire sin dejar de sonreír — Viviré aquí

— ¡¿Qué?!

Perdón por los errores en los capítulos, prometo editarlos.