𝐄𝐥 𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝐆𝐮𝐥𝐟 |𝐌𝐞𝐰𝐆𝐮𝐥𝐟|

09

— ¡GULF! ¡DETENTE!  — grito el alfa corriendo

Gulfw se detuvo al escuchar su nombre, se dio la media vuelta, al hacerlo se sorprendió al ver un chico bastante atractivo correr hacia el mientras le hacía algunas señas con las manos.

— Disculpa ¿Te conozco? — preguntó mirándolo con una sonrisa , el chico no solo era extremadamente guapo y sexy sino también tenía un olor muy agradable, pino con cedro pero también a eucalipto, por un segundo su mente divagó, unos de esos aromas le erizo la piel.

— Lo...yo...ahg  — Mew intentaba recuperar la respiración mientras se sostenía sobre sus rodillas pero lo suficientemente alejado del omega.

Al fin conocía a su vecino, aún que fuera de lejos, admiró lo bello y sensual que esté era, debía admitir que Win tenía razón cuando decía que lucia muy tierno con su barriga de cuatro meses.

Gulf era alto pero delgado, tenía facciones finas, una nariz pequeña pero alta, una cejas perfectamente definida, unos ojos preciosos color miel, cabello  negro azabache, labios carnosos y esponjosos, y piel morena, era jodidamente perfecto, pero definitivamente lo que más llamo a su atención fueron esos pómulos altos y esa brillante sonrisa. Para Mew era como ver un ángel caído del cielo.

Ambos se miraron a los ojos unos minutos sin dejar de sonreírse, Mew respiro el dulce aroma a algodón de azúcar que desprendía el omega, solo por un par de segundos cerró los ojos para disfrutar del olor, podía sentir a su lobo brincar y aullar de felicidad.

— Oh — soltó Gulf avergonzado desviando la mirada — ¿Qué necesita? — preguntó mirando hacia la carretera

— Aaahhh... eso — Mew se enderezó — ¡Cierto! — sonrió avergonzado rascándose la cabeza, se había distraído mirándolo al omega. — ¡No  pienses que un pervertido o algo así por el estilo!, solo que te ves muy lindo...¡No!, es decir,  no es que no te veas lindo, por qué si te ves lindo pero nunca había visto un omega, o sea si los he visto lo que quiero decir...Jajaja — se sonrojó, pequeñas gotas de sudor con comenzaron a bajar por su frente. Era normal que se pusiera nervioso cuando conocía un omega, pero no era normal decir muchas incoherencias al mismo tiempo.— Soy Bright Suppasit, hermano de Mew ¡NO! Jajaja, perdón quiero decir, soy Mew Suppasit Jongcheveevat, hermano de Win

— Jajaja — Gulf soltó una pequeña y suave risa. Win tenía razón al decir que su hermano era divertido. — Mucho gusto, soy Gulf Kanawut Traipipattanapong y él — acaricio su vientre — Es mi pollito

— Mucho gusto, y ah...olvida lo que dije hacer rato — hizo una gran reverencia en forma de disculpa

— ¡Oh! Tranquilo no pasa nada, bueno Mew, ¿Necesitas algo?, tengo que ir a buscar un ta...

— ¿Por qué tardan tanto en subir? — preguntó molesto Win llegando hasta ellos. — ¿Por qué no suben? ¿Te hizo algo este tonto? — miro mal a su hermano mientras caminaba a abrazar a su amigo.

— No, nada de eso, Mew solo se estaba presentando — le sonrió

— Ya veo — sonrió — ¿Por qué te fuiste?, pensé que nos iríamos juntos, por eso llame a este tonto para que viniera por nosotros para ir a casa juntos

— Gracias pero no es necesario, puedo tomar el bus, no quiero causarle problemas a Mew, como la última vez fue a esconderse al baño porque no quería verme, pensé que sería mejor y así no molesto — confeso en voz baja y algo tímido jugando con sus dedos

Aquel comentario hizo sentir a Mew muy avergonzado, era un completo estúpido por su comportamiento tan infantil de ese día, se esforzaría en buscar el perdón del omega, pues no sería la última vez que lo vería.

— Gulf — lo llamó dando un par de pasos para quedar frente a su lindo vecino. — Yo quiero pedirte sinceramente un discúlpame, no quise hacerte sentir mal ese día, en verdad lo siento — lo miro muy arrepentido, Gulf solo negó con la cabeza pero con una tierna sonrisa — Enserio estoy muy arrepentido por mi mal comportamiento, ¿Qué puedo hacer para remediarlo?

Win miro a su hermano con la boca abierta, esto si que no se lo esperaba.

.

.

.

— Muchas gracias por traerme y acompañarme hasta mi casa — Gulf hizo una reverencia para después mirar a los hermanos Jongcheveevat

— No tienes por que agradecer, es un placer apoyarte a ti y mi pollito — dijo Win revolviendole el cabello a su vecino

— Gracias Win — miro al alfa — Gracias Mew — le sonrió

Mew miro embolsando a Gulf, esa sonrisa le hacía una favor al mundo, a su mundo.

— No es nada, si necesitas algo más llámame, será un placer ayudarte, para compensarte mi comportamiento del otro día — dijo entregándole una tarjeta de presentación sin dejar de mirarlo.

— ¡Oh! — exclamó algo aturdido tomando la tarjeta —¡Espera Mew! ¡No te vayas! — le pidió entrando rápidamente a su casa e ir rápido a la cocina, de alguna manera le tenía que agradecer a Mew su amabilidad. — Espero que te gusten, Win me dijo que te había gustado mi pastel, son unas galletas de durazno

Mew sonrió al ver canasta que Gulf le estaba ofreciendo, era unas hermosas galletas en forma de duraznos, se veían realmente deliciosas.

— ¿Enserio son para mí? — preguntó incrédulo tomando la canasta en sus manos, ya quería llegar a casa y devorarlas.

— Si, disfrútalas — le sonrió guiñándole el ojo. — Los dejó, iré a descansar, adiós chicos — se despidió con una reverencia antes de entrar a su casa.

El alfa dio pequeños brincos apenas el omega cerró la puerta.

— Te dije que mi Gulf era un amor,  hasta te fue bien, te regalo una galletas — le sonrió Win caminando el ascensor, se sentía muy casado y lo único que quería era dormir.

— Si, es un chico lindo

— ¿Perdón?

— Dijo, es un gran chico

Win le sonrió divertido. Ambos entraron al ascensor, marcaron al piso de su apartamento, una vez que llegaron a su piso, salieron del ascensor para ir a su apartamento.

Con todo eso de su vecino, Mew se le había olvidado la maldad que le había hecho a Bright.

— ¡Oye! ¡Bright te tiene una sorpresa! — saco la llaves de su pantalón y abrir la puerta. — Él en verdad....

Pero sus palabras quedaron en el aire, se suponía que Bright tenía que haber hecho el aseo de todo el apartamento pero era todo lo contrario, el apartamento seguía igual de sucio y desordenado igual y cuándo se fué, el alfa se encontraba profundamente dormir en el sofá.

— ¡BRIGHT VACHIRAWIT!