𝐄𝐥 𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝐆𝐮𝐥𝐟 |𝐌𝐞𝐰𝐆𝐮𝐥𝐟|

08

Gulf se sentía decepcionado, triste pero también algo molesto por el comportamiento de sus vecinos, tal vez Win les había contado de su situación, así que entendía la postura de los alfa, pero no eran la forma. Sabía que sus feromonas por el embarazo lo podían meter en muchos problemas.

— Al menos tío Win te quiere — sonrió limpiando sus llorosos ojos con el dorso de su mano mientras miraba su vientre de tres meses.

Aunque ya había pasado dos días desde aquel accidente, no podía dejar de recordarlo, se sentía estúpido por pensar que podría tener amigos.

— ¿Tienes hambre?, estoy haciendo un delicioso pad krapau, estoy seguro de que te gustará — le habló a su bebé tomando un plato para comenzar a servir.  — No me queda como el de la abuela, pero me defiendo, mamá era muy buena cocinando, papá era un caso en la cocina jajaja — sonrió recordando a sus papás, los extrañaba.— Me hubiera gustado que los conoc...

— ¡¡GULF, VEN POR FAVOR!! — gritó su amigo Mild desde una de las habitaciones del apartamento. — ¡POR FAVOR! — insistió

— ¿Y ahora que querrá?

— ¡GULF! ¡GULF!

— ¡Ya voy! — contestó retirándose el mandil para dejarlo sobre el encimera de la cocina e ir hasta la habitación con su amigo. — ¿Qué pasó? — preguntó abriendo la puerta de la habitación que sería para "pollito"

— ¡SORPRESA! — gritó Mild brincando con los brazos entendidos

— Mild...

Gulf hizo un gesto de ternura al ver lo que hizo su amigo en la habitación. Desde de la discusión en la heladería, Mild se esforzaba para enmendar su error al gritarle todas esas cosas feas a su amigo, incluso se ofreció para decorar la habitación del bebé.

Había pintado toda la habitación de blanco, colocó cortinas de color gris, arriba de las ventanas colocó pequeños banderines de colores azul, blanco y gris, la cuna era muy grande (para un bebe recién nacido), y de color blanca, de las paredes colgaban estrellas alrededor de una luna en 3D y en el único estante estaban los peluches que los padres del omega me habían regalado.

— ¿Cómo hiciste todo esto?, Mild, yo... — no tenía palabras para agradecerle todo lo que ha hecho por él. — Gracias

— No agradezcas, aún faltan muebles, pero los iré comprando con el tiempo, ¿Escuchaste pollito?, tío Mild te comprará muchas cosas, serás un consentido — dijo acariciando el vientre a su amigo

— En verdad gracias, todo estás muy bonito

— ¿Y ahora por qué lloras? — preguntó confundido el omega mirando al otro omega

— Yo...yo...no lo sé — confesó abrazando a su amigo y llorar con más sentimiento

Gulf odiaba que sus hormonas lo controlarán, todo el tiempo estaba muy sensible, por todo de lloraba o se molestaba. El timbre sonó.

— Ahora vengo — contesto Mild separándose de Gulf para ir abrir — Deja de llorar, te ves feo

Gulf incremento su llanto al escuchar que era feo, Mild rodó con los ojos con irritación saliendo de la habitación, a veces extrañaba a su amigo "normal". Segundos después regresó junto con Win, quién al ver llorar a su amigo, dejo las bolsas de regalo que tenía en las manos dejandolas en el piso para abrazar a Gulf.

— ¿Qué pasó? ¿Por qué lloras? — lo miró preocupado — ¿Qué le hiciste? — gritó mirando de muy mala manera a Mild

— ¡¿Yo?! ¡Ni le hice nada, solo le mostré el cuarto del bebé! — se defendió — Ya sabes cómo se pone por sus hormonas todas locas, todo lo hace llorar — le dio unas pequeñas palmadas en la espalda a su hormonal amigo — En unos meses volverás a ser normal, solo aguanta