[ Mala Fama ] (GoldFred)

[🖤 28 🤍]

    El maldito teléfono llevaba sonando desde la mañana, no quería contestarle a Fred, después de lo que se enteró no podía si quiera pensar en el, se le venían pensamientos sucios de lo que pudo hacer, pero no estaba cómodo con pensar en eso, tenía en una parte de su cabeza grabada sus jadeos o su irregular respiración.

— ¿Diga? —finalmente optó por contestar. 

— // Te marque desde la mañana. ¿Que tanto haces? // —Fred se escuchaba molesto.

— Estoy enojado, no respetaste el acuerdo —

— // ¿Acuerdo? // —una risita se dejó oir— // Te refieres a preguntar //

— Si —

— // Bien, preguntaré. ¿Quieres que nos veamos en el parque? // —

    Otra vez actuaba como si nada, es que era complicado para él, porque no le ayudaba a entenderlo. Le terminó por decir que si lo vería donde el dijera, quedaron a las 4, hora que espero ancioso. Mientras bajo a comer con su familia, lógicamente su padre le pregunto si ya estaba mejor, como Golden no estuvo ese día por qué había salido, no se enteró de nada así que tuvieron que explicarle de la pequeña discusión que tuvieron. Felizmente las cosas estaban tranquilas ahora.

— Papá, voy a salir con Fred —aviso el albino.

— De acuerdo —miro a su hijo menor— Si llegas tarde llama y lleva dinero por cualquier cosa —

    Que bonito era no tener que preguntar si podía salir y solo avisar, es como de esos gloriosos beneficios que dan algunos padres. Después de comer se alistó con unos pantalones de mezclilla, una playera negra, algunas pulseras y joyas complementarias, miro los pircings en la mesa del tocador, recordó que a Fred le gustaba verlo con eso, así que se los puso, se miro al espejo, tenía un aspecto muy atractivo, Fred había dejado de ser tan celoso así que no había porque pensar que estaría peleando con cualquier persona. Da igual.

   Salió directo al parque, el único que estaba en medio de ambas casas considerando la distancia, tuvo que esperar un poco a su llegada, estaba orgulloso de sus avances, al inicio pensaría que lo dejó plantado pero ahora solo podía intuir que se perdió en el camino o se olvidó el camión, tal vez un robo pero dudaría de ello si por dónde cada uno vivía eran zonas tranquilas. No demoró tanto cómo esperaba, llegó el azabache con una bolsa en manos  y se sentó a su lado, noto que mordió su labio al verlo.

— Estás tan guapo hoy, amor —entono enfocando su atención a sus complementos— Me hubieras dicho que venías con eso y me traía algo más sexy —rio juguetonamente.

— De eso quería hablarte, ayer te llamé y descubrió lo que hacías. Ni siquiera preguntaste —

— Oh —volvio a reir— Te refieres a ayer en la noche que me marcaste... Mmm... ¿Y se puede saber que estaba haciendo? —junto sus manos en una pose de inocencia.

— Tu sabes —lo estaba obligando a decir eso y se acordó lo que el también intento hacer, lo cual provocó que se avergonzara bastante— Estabas —su rostro se coloro un poco— Estabas... —

— Ahora que recuerdo —saco algo de la bolsa que junto en su mano y posteriormente lo puso en la cara de Gold— No tienes bloqueador idiota, ¿Quieres morir a caso? —

— ¿Que es eso? —

— Bloqueador solar idiota —termino de ponerlo y lo que sobre lo dejo en sus manos.

— ¿Por mi piel? —el chico asintió— Gracias —

   Por las prisas olvidó que tenía que usarlo, le encantó la consideración que tuvo con el por recordar eso, sin embargo, estaba distrayendo el tema, quería terminar con esa tortura y el no podía decirlo bien siendo que antes lo decía con naturalidad pero es que era extraño cuando lo hizo con el en mente. Inhaló profundo, tenía que hacerlo o nunca podría seguir avanzando en su mejora personal.