𝖀𝖒𝖊𝖆 || Harry Styles es un padre soltero de un cachorrito de cuatro años, quién logra volverse a enamorar de ese Omega bonito que aparece todos los días por la cafeteria en la que trabaja.
"El destino te puso en mi camino cómo una brillante taza...
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Louis terminó de acomodar las cosas en el último estante, se acercó a Rhian que estaba comiendo un plato de cereal de figuritas de dinosaurios, Louis le sonrió, removiendole el cabello.
──¿Me compartes de tu cereal? ──preguntó. Harry estaba dándose una ducha porque accidental Rhian había botado la leche en su camisa.
──Sí, pero de este. ──apuntó un dinosaurio azul. ──¿Cuál es este?
──¿El color? ──Rhian asintió. ──Azul cómo tus ojitos y los míos.
Rhian volteó a ver a Louis, se acercó a la cara del Omega, colocando sus manitas en las mejillas de Louis y viendo finalmente los ojos del Omega, Louis no se movió, en cambio, frotó su nariz de botón con la naricita de Rhian. El niño rió.
──¿Mis ojos son azules? ──Louis asintió. ──¿Y los de Dada?
──Verdes.
──Azules... verdes... ¿éste? ──apuntó otro dinosaurio.
──Naranja.
──Naranaja...
──No, bebé, naranja.
──¿Naranja? ──Louis asintió.
──Exacto.
Harry apareció de nuevo en la cocina, traía el cabello húmedo, vestía una camisa blanca algo transparente, unos short de estrellas y calzaba unas sandalias. Le sonrio a Louis.
──Hola, nuevamente. ──Louis sonrió. ──Rhian, ¿ya vas a terminar?
──Casi, Dada.
Harry asintió, tomando una botella de agua y sirviendo en un vaso.
──¿Te quieres quedar a ver una película con nosotros? ──preguntó a Louis, el omega rápidamente asintió.
──Tengo turno hasta en la tarde así que no hay problema. ──avisó, Harry asintió.
Rhian terminó de comer su cereal y Harry tomó el plato para lavarlo de una vez, Louis le ayudó al cachorro a bajar del asiento e ir a la sala.
──Haz, ¿pido una pizza? ──preguntó Louis, Harry se acercó a él, sentándose en el sillón y Rhian subiéndose a su regazo, Louis se sentó a un lado de ellos.
──Sólo si quieres, Rhian ya no va a comer más, seríamos tú y yo. ──Louis asintió. Tomó su celular y marcó el número de la pizzeria.
Ordenó una mediana, Harry tomó el control viendo las películas que estaba pasando, puso una de acción que supuso le gustaría a Louis, Rhian estaba acostado en su pecho, Harry sabía que se dormiría en cualquier momento, Louis volvió con la orden ya lista y solo tendría que esperar.
Se sentó al lado de Harry, empezando a ver la película, cómo veinte minutos después Harry suspiró levantándose con Rhian dormido en sus brazos. Vio la hora, ya eran las siete de la noche, caminó a la habitación con cuidado y recostó a Rhian, le colocó almohadas con su olor y observó al cachorro abrazarla y aferrarse a ella, dejó la puerta entreabierta y volvió con Louis.
Se dejó caer en el sofá, el Omega ya tenía la pizza en sus manos, Harry tomó un trozo y Louis le sonrió.
──¿Tienes algo para beber? ──preguntó Louis.
──Tengo cerveza. ──dijo, levantándose para ir por ella. Le dio una a Louis y se volvió a sentar.
La hora pasó y la película dejó de ser interesante para ellos, Louis tomó un pedacito de pizza y se la dio a Harry a la boca, el Alfa rió. El Omega también lo hizo.
──¿La pasaste bien hoy? ──preguntó Harry, estaban más cerca, la mano de Louis descansaba en el pecho de Harry, el Alfa acomodó un mechón de cabello de Louis detrás de la oreja de éste.
──Sí, fue divertido y relajante ayudarte con la despensa hoy, Haz. ──Harry acarició la mejilla de Louis.
──Eres lindo, Louis, muy bonito ──susurró, acercándose más a él.
──¿Sí?, ¿lo crees? ──preguntó en otro susurró y sonando coqueto, Harry sonrió embobado.
──Lo creo. Desde que te vi entrar en esa cafetería. ──habló. ──Supe que eras el omega más hermoso del planeta.
──Haz...
──Llámame Alfa, dijiste que al final de la cita me llamarías Alfa de nuevo, hazlo. ──pidió, sus ojitos verdes brillando con esperanza.
──La cita aún no termina. ──Harry bufó. ──... Alfa.
──Mmm, de nuevo.
──Alfa...
──Dilo siempre, por favor, una y otra vez sólo para mí.
──Alfa. ──susurró acercándose a los labios de Harry y cerrando sus ojos. Harry imitó la acción de cerrar sus ojos también. ──Alfa, bésame.
Harry lo hizo, terminó con esa insignificante distancia y presionó sus labios contra los del Omega, se sentían suaves y cálidos, y cuándo empezó a moverlos, podía sentir el sabor de la cerveza, Louis llevó sus manos a las mejillas de Harry y acarició.
Cuándo se separaron, ese brillo en sus ojos estaban, se sonrieron dándose un beso corto.
──Por favor, llámame Alfa y te llamaré Omega.
Louis asintió totalmente de acuerdo.
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