Harry se levantó cuándo su alarma sonó, trono su espalda y sus dedos y se dirigió al baño, era temprano, eran las cinco de la mañana, entraba a su trabajo a las seis, se ducho rápidamente, se vistió y se dirigió a su cachorrito que aún seguía durmiendo en la cama, sus manitas a cada lado de su cabeza y sus piernas abiertas. Harry sonrió. Lo tomó en sus brazos, despertandole lentamente, Rhian hizo un puchero, Harry simplemente tomó toallitas húmedas y lo limpió, hacia demasiado frío para bañarlo.
Se acercó al cajón de la ropa y sacó un conjunto, era un pantalón y una camisa de manga larga con dibujos de nubes. Harry lo vistió, una vez los dos listos, con los dientes cepillados también, llegaron a la cocina para desayunar algo.
Luego de eso, bajó a su cachorrito de sus brazos y guardó algunas cosas en su mochila, tomó la mano de Rhian y salieron del departamento.
Harry cerró bien y se dirigió al ascensor, bajaron hasta el primer piso y salieron de ahí, Harry se encaminó hacia su trabajo.
──Hmm, Dada... ──llamó Rhian viendo con ojitos de cachorrito a Harry, el Alfa arqueo una ceja. ──Duelen mis piecitos.
Harry rodo los ojos y lo tomó en brazos, le pellizco la nariz y el niño rió.
──No, Dada. ──rió, Harry sólo sonrió. Llegaron a una calle transitada, Harry suspiró por lo que venía a continuación. ──Hola.
──Hola.
──Hola. ──saludo nuevamente a otra persona. Ésta a diferencia de la otra no respondió, su hijo hizo un pucherito pero saludo a la siguiente. ──Hola.
──Oh, hola, cachorrito. Hola, Harry. ──El Alfa se sonrojó inmediatamente. Era Louis, era el bonito Omega que le gustaba mucho.
──Hola, Louis. ──saludo Harry.
──¿Cómo estás hoy?
──Estoy bien, ¿y tú?
──Estoy bien, gracias. ──sonrió. Rhian lo miraba fijamente. ──¿Me recuerdas cachorrito?
──Sí, amigo de Dada.
Louis rió.
──Eres una ternurita. ──habló enternecido con el bebé. ──¿Vas al trabajo ya?
Harry asintió.
──Yo voy por mi desayuno diario. ──sonrió, Harry frunció el ceño.
──¿Tu desayuno diario es pastel de vainilla y café? ──preguntó incrédulo. ──Eso no es sano.
──¿Te aprendiste mi orden? ──preguntó. Harry se avergonzo. ──Dios, supongo que soy muy monótono.
──No, yo no dije eso. ──aclaró rápidamente Harry.
──Lo sé, lo sé, pero yo me estoy dando cuenta que siempre hago exactamente lo mismo. ──pensó en voz alta. ──Hoy pediré algo diferente.
──Tal vez un desayuno real.
Louis rió.
──¿Tú que me recomendarías? ──preguntó. Harry suspiró.
──Tal vez menos dulce y algo más saludable, eres un Omega lindo y debes alimentarte bien, no digo que vayas a dejar de ser lindo, es solo que- lo siento.
Louis rió.
──Eres agradable, Harry.
Harry se sonrojó, sostuvo la puerta de la tienda con una mano y Louis entró, agradeciendo la caballerosidad del Alfa, le sonrió al cachorrito cuándo este agitó su mano en forma de despedida.
──Dada...
Harry volteó a ver a su cachorrito, Rhian frotaba su ojito derecho con su puñito, el Alfa lo detuvo y lo bajó de sus brazos. Rhian se sentó en unos de los sillones que había ahí
──Por favor, Rhian, está vez, quedate aquí, quietecito. ──pidió, Nani no había hizo ese día ya que tenía una cita médica, Gustavo sí estaba ahí, trabajando ya, Harry se apresuró a cambiarse de ropa.
Se encaminó a la caja registradora, Gustavo se encargó de limpiar las mesas e ir a la cocina por más postres para acomodar en los estantes, Louis se acercó sonrió, y pidió exactamente lo mismo de siempre.
──Es inevitable. ──habló con una sonrisa, Harry rió.
──La vainilla es muy inevitable, sí.
Cobro la factura y le sonrió nuevamente al Omega. Rhian bajó de su asiento y llegó hasta Louis, le tocó la pierna y el omega rápidamente bajó la mirada.
──Hola, cachorrito.
──Rhian.──llamó Harry sonando duro.
──¿Puedes abrirme mi galleta, por favor? ──Louis asintió, tomando el paquete y abriéndolo para dárselo al niño. ──Gracias.
──Lo siendo mucho. ──se disculpó Harry
──Oh, vamos. No hay porque disculparse, es un cachorro muy bueno──Harry agradeció eso.
──Sí, gracias. Es que hay personas que les incomoda a veces los cachorritos. ──explicó.
──Dios, sí. Lo entiendo pero a mi no, me gustan mucho, muchas gracias por la orden, Harry.
──No es nada, Louis.
Dios, el lobito de Harry brinco de alegría ante la última sonrisa del Omega hacia él.
All the love 💗
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Umea 》Omegaverse
Romans𝖀𝖒𝖊𝖆 || Harry Styles es un padre soltero de un cachorrito de cuatro años, quién logra volverse a enamorar de ese Omega bonito que aparece todos los días por la cafeteria en la que trabaja. "El destino te puso en mi camino cómo una brillante taza...