CAPÍTULO 25.

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Nuestro primer mes juntos.

Narra Lei

Querido Huaze Lei:
No sé cómo empezar una carta, es decir lo sabía hace años cuando en la primaria tuve que escribirle una a mi tío Peter, que por cierto nunca le fue entregada, y me alegro de que no, porque sería un poco vergonzoso que leyera algo que escribió una niña que sólo quería una barra de chocolate para ser feliz... Bueno creo que ya me desvíe del tema, estoy nerviosa ¿Ok? Sólo no lo menciones cuando esté frente a ti o ese lindo cabello tuyo sufrirá un pequeño corte... Sólo quiero decirte: feliz primer mes.
Te diría que eres la relación más larga y estable que eh tenido en mi vida, pero sería mentira porque Kira tiene ese lugar; sin embargo eres el gran afortunado de tener el título de ser el primer novio de la pequeña e insegura Sujey. Ha sido muy extraño, tengo que admitirlo, es decir no sabía que tenía que escribir estás cursilerías, ¿Quien escribe cartas en está época? Sólo yo así que más te vale apreciarlo; sí me hubieran hace un par de años que iba a tener una estúpida sonrisa en la cara sólo por recibir un mensaje o que se me iba a detener el corazón cuando alguien me dijera "mi amor" me hubiera reido en alto; ¿Sabes que sanaste mí corazón? Pusiste cada pieza en lugar, me hiciste creer en algo tan efímero cómo el amor.
Aún estoy trabajando en aspectos cómo mi autoestima o mis inseguridades, te agradezco que me tengas tanta paciencia, que sepas aceptar mi ritmo.
Gracias por cada momento vivido, por el hermoso picnic en tú enorme jardín, no había reído tanto cómo lo hice aquel día, creo que deberíamos salir más al campo, es divertido ver cómo una ardilla corre trás de ti; te lo dije a las ardillas hay que tratarlas con respeto, ahh pero el señor quiso insultarla. En fin, gracias también por todos los detalles, las rosas, los chocolates, el libro, ¿Sabes cuánto me encanta serendipia? Amo totalmente él libro, porque me recuerda a nosotros. Sabes, deberíamos ir a esa famosa biblioteca cerca de la ciudad, yo sería inmensamente feliz ahí.
Yo realmente espero que nuestra relación dure muchísimo más tiempo, que sigas a mi lado, con nuestras manos juntas y caminando en el mismo lado.
Finalmente te quiero preguntar, o más bien informar, que tengo entradas para el cine está tarde, veremos "bajo la misma estrella" porque dah ¿Quien no ha visto "bajo la misma estrella"? Ah cierto, tú, porque no te gustan las películas, pero lamento decirte que tienes una novia que adora las películas clichés y cursis, muy cursis, así que para empezar un nuevo mes juntos, tú y yo iniciaremos una aventura llamada "viendo las películas más cursis del mundo" te veré en el cine StarCone a las 5. Hasta aquí mi reporte Joaquín.

Te quiere: Sujey

– ¿Por qué estás sonrojado Lei? Oh Dios, miren esa sonrisa de tonto que tiene, lo hemos perdido. —Dice Daoming Si burlón, a lo que simplemente suelte un gruñido.
¿Por qué Sujey tiene que ser tan tierna?
–Me voy. —Digo, levantándome antes de sufrir más humillaciones.
–¿El sobre rosa y cursi tienen algo que ver? —Dice Ximen en tono burlo, sí serán tontos.
–Agh, que envidiosos. —Digo finalmente, para después salir del aula. Hace una hora que terminó la clase.
Una chica extraña, me dio el sobre al inicio de la clase, pero lo pude leer hasta hace apenas un momento. Un mes con Sujey, a veces siento que esto es un sueño, uno precioso en dónde soy inmensamente feliz, cada día me enamoro más de ella, y sé que estoy jodido porque adoro cada una de sus imperfecciones, adoro que sea imperfectamente perfecta, adoro lo torpe y sensible que es, adoro su sentido del humor, adoro que sea extremadamente sarcástica, adoro cada facción de ella, aún tengo miedo, miedo de que se vaya y me deje sólo, porque sé que ella es demasiado, que ella merece el mundo entero y trabajaré por dárselo.

Llegó a mi casa para tomar un baño y cambiar mí ropa por algo más casual, un pantalón negro y una sudadera azul con estampado de gatito (sí, me la dio Sujey) y unos tennis negros, tomó mis llaves y mi cartera y salgo rumbo al cine.

Ahí está ella, curiosamente lleva una sudadera igual a la mía, vaya, nos comunicamos telepáticamente, esa conexión... Se ve preciosa, lleva un delineado del mismo color, apreció ese detalle porque sé que odia los delineadores, es demasiado impaciente.
–Hola chikiguapi. —Me dice acercándose para después abrazarme y levantarse de puntitas para darme un beso en la mejilla, tan linda.
—¿Chiki... Qué? —Le digo regresando a la realidad, tomándola de la mano.
–Guapi. —Me dice riendo y arrastrandome a la barra de dulces, muy predecible.
–¿Contexto? —Le digo confundido, mientras veo cómo toma un dulce de cada especie que encuentra y con los ojos brillantes.
–Mi amiga le dice así a su novio en mi México, eh hablado mucho con ella últimamente y se me ha pegado, te prometo que no es nada malo, es cómo juntar chiquito y guapo. —Me dice para después pedir un bote grande de palomitas y soda.
–Okey, aceptó lo de guapo, pero lo de chiquito... ¿Si sabes que mido casi el doble qué tú, no? —Le digo pagando todo lo que ella a tomado, ella ha pagado las entradas así que me ha tocado pagar los dulces.
–No empieces Huaze Lei, porque estaré chiquita, pero sabes que sí me enojó nada terminará bien. —Me dice amenazándome con una especie de brocheta con bombones con chocolate, ¿De dónde ha sacado eso?
–Está bien, perdona a tú rey mi reina. —Le digo sonriendo y plantandole un beso en la mejilla.
–Okey. —Me dice sonriendo para después meter todos los dulces a su bolso y arrastrarme a la sala.

–Está película es muy buena, vas a llorar, yo aún lo hago después de verla cómo 50 veces, me sé los diálogos de memoria. —Me dice mientras nos sentamos.
–¿No se supone que apenas se estrenó? ¿Cómo es que la haz visto tantas veces? —Le digo curioso.
–Aquí se estrenó hoy, en México se estrenó hace algunos años, teníamos DVD en casa así que podía verla todas las veces que quisiese; es una de mis favoritas. —Me dice sonriendo a lo que yo asiento y le sonrió de vuelta.

Cáncer, ese es el tema delicado de la película; es interesante, o bueno no sé si llamar interesante a algo que te hace llorar tanto, joder no puedo parar de llorar, ¿Por qué Augustus Waters? Hazel te amaba, yo te amaba.
–Lei, ¿Estás bien? —Me dice Sujey preocupada, qué vergüenza.
–Sí, es sólo, se me metió una palomita al ojo, no pasa nada. —Le digo intentando sonreír.
–No te preocupes, puedes llorar, yo aún lo hago después de saber el final, la primera vez llore toda una semana porque recordaba la escena y me daba sentimiento. —Me dice acariciando mi mejilla.
–Yo... ¿Podemos ir a Amsterdam? —Le digo de repente, sorprendiendola y sorprendiendome.
–Qué cursi eres. —Me dice sonriendo y luego asintiendo energéticamente.
–Qué puedo decirte, lo aprendí hoy. —Le digo para después besarla.
Besarla siempre es cómo la primera vez, las mismas sensaciones, la misma adrenalina, las mismas ansias de tenerla sólo para mí.
–Te quiero. —Le digo de repente, y ella se sonroja.
–Yo... ¿Puedes repetirlo? —Me dice después de unos minutos de silencio que sentí eternos.
–Te quiero. —Le digo firme. –Te quiero tanto y soy tan egoísta, porque quiero que siempre me elijas a mí, que me ames a mí, qué me mire a mí, que estés para mí siempre.
–Yo también te quiero. —Me dice firme y después vuelve a besarme; podría besarla la vida entera sin quejarme.
























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