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Capítulo 38 - SEGUNDA PARTE

CAPÍTULO 38

[Dolor]

LILITH

—Hace años, muchos años existía un hombre enamorado, aun cuando le dijeron que el amor no le traería nada bueno él se esforzó por llevarlo dentro. Una mañana tranquila mientras caminaba por las calles de Alemania llenas de personas terminó chocando con el cuerpo de una chica. Cuando ella lo vió a los ojos supo en ese instante que ella sería alguien importante en su vida.

»Así lo fue. No cabía duda que conforme pasaban los años él se iba enamorando cada vez más de aquella chica con la que se había chocado por error. Pero comprendió que fue el error más hermoso en su vida. Aquella chica rubia pasaba tiempo con él y sus sentimientos incrementaban. Desde el día que sus ojos chocaron pudieron descifrar que estaban destinados a estar juntos.

»Años más tarde se unieron uno al otro de forma legal casándose, ellos decían que el matrimonio era lo mejor que habían hecho en su vida. Cuando estuvieron casados finalmente se mudaron a Londres para comenzar una nueva vida juntos. En el proceso se encontraron con amigos que vivían en esa misma ciudad.

»En ese tiempo parecía buena idea mantener su amistad. Jacob e Eisa se volvieron mejores amigos de el hombre enamorado y la chica rubia. Ellos también se unieron legalmente. Siempre mantenían citas dobles o la pasaban genial juntos. Llegó el punto en dónde engendraron hijos. Eran familias perfectas. Jacob e Eisa y su bellos hijos. Mellizos. Y el hombre enamorado y su chica rubia con sus tres perfectos hijos.

»Se criaron juntos, la pasaban todo el tiempo juntos, hasta que la familia de Jacob se tuvo que mudar por problemas en su negocio. El hombre estaba bien con el suyo y fue la razón para que se quedará el Londres con la hermosa familia que había formado. Estaba bien consigo mismo, estaba disfrutando los tiempos con su hermosa esposa y sus adorables hijos. Los vió crecer. Los amo en su tiempo. Descuido cualquier cosa por poner de prioridad a su familia.

»Pero claro, no todas las historias son como cuentos de hadas, y está no terminará bien. El hombre no se esperaba la traición más grande de su vida, no era traiciones en su negocio, ni traiciones con su equipo de trabajo, era una traición amorosa. Encontró a su rubia esposa en la cama de su mejor amigo. Jacob. Fue en ese momento que dejó de creer en ese maldito sentimiento que te volvía débil y te come vivo. Fue en ese momento que el hombre no midió los actos solo para véngarse de la traición de ellos.

»Pero después de todo no podía dejar de amar a su esposa por ende le dió una segunda oportunidad ya que ella le prometió cambiar y así lo hizo. Pero, él no se iba a quedar de brazos cruzados. Claro que se vengó del que era su mejor amigo, de la forma que él le doliera más. Obviamente utilizando a su adorada hija. A su pelinegra favorita. A su pequeña asesina. La secuestro, si, y le hizo vivir un pequeño infierno, ella pago las consecuencias de los actos de su padre. Eso le dolió y al hombre le causó satisfacción, tiempo después le regresó a la niña porque su plan ya estaba terminado.

»Pero aquí no acaba todo. Jacob era una persona bastante orgullosa, vengativa y no se dejaba pisotear por nadie. Habían lastimado a su sangre y solo él podría hacerlo, nadie más. Una navidad, cuando el hombre y su familia celebraban esa hermosa fecha paso algo inesperado. Fue una emboscada que no vió venir. Sus hijos gritaban. Su esposa se asustaba. Y él no pudo hacer nada más cuando le dispararon. Cuando se llevaron a su esposa. Cuando su hijo mayor protegió con su cuerpo a sus dos hermanos para que a ellos no les pasará lo mismo.