The demon's lament

Capítulo 4: "Profesor Rengoku Kyojuro"

El sol comenzaba a salir dando los primeros rayos de luz en aquella bodega dónde se encontraba el rosado. Habían pasado toda la noche resolviendo conflictos y dando sugerencias a su señor y compañeros respecto a sus negocios, estaba agotado y quería irse con el rubio. Aquel hombre de cabellera negra y piel blanca analizaba las fotografías de la cámara y mirando de reojo al rosado quien se notaba cansado mientras tomaba un poco de café, se levantó de su asiento llamando la atención de los presentes.

— Recuerden mantener siempre un perfil bajo, no hagamos movimientos que levanten sospechas, aunque tengamos a la policía de nuestro lado, siempre habrá un grupo de justicieros que quiera traicionarnos. Kyogai, ¿Tienes información de la droga que están vendiendo en las calles? — preguntó el peli negro mientras el mencionado se levantaba de su asiento y sacaba su celular.

— Si, ayer por la noche le envíe un mensaje a mi compañero de trabajo y me envío los siguientes audios.—  los presentes prestaron atención mientras el líder de aquellos criminales tomaba asiento cruzando sus piernas, tomó un vaso con whisky mientras lo movía con lentitud mirando a sus ayudantes con superioridad.

— "Hey Kyogai, gracias por las felicitaciones. Y claro que puedo ayudarte, estuve realizando unas investigaciones respecto al narcomenudeo de Japón y déjame decirte que aquellas fotografías que me mandaste son de productos que no se puden dar aquí en el país..." —  aquel dulce sonido lo dejó estupefacto, esa armoniosa voz era de su amado amante, ¿Acaso... Trabajaba en la misma academia que Kyogai? — "No hablaré mucho de la historia de aquellos lugares dónde la droga se hace como pan caliente, pero lo que puedo decirte es que ahí por el 2010 hubo un grupo de Yakuzas que fueron a México a operar un cartel de drogas en la capital de ese país. Aquel yakuza lo capturaron en el país de México pero logró escapar, umm... ¿Eh? Oh si madre, enseguida voy... Espera Kyogai, iré atender algo." — todos se miraban entre sí juzgando las palabras del hombre y como si fuese una novela de suspenso, esperaron que reprodujeran el siguiente audio. El rosado sentía una presión en su pecho, con los nervios corriendo por sus venas, el joven miraba sus manos quienes temblaban con frecuencia, por más que quería alejar al rubio de este mundo, él parecía acompañarlo. Eso no le gustaba — "Disculpa la tardanza, como decía, logró escapar de las autoridades mexicanas y niponas pero algo muy curioso de esto es que aquel hombre se llama Phanor Kuratomi, ¿Y por qué digo que es curioso? Bueno, después de 12 años lograron capturarlo cerca de un burdel que por azares del destino o mera coincidencia hubo un fuerte ataque, aunque lo culparon por haber acosado a distintas chicas y poseer pornografía infantil no lo culparon por los hechos pasados, aunque creo entender el porque, habían pasado 12 años, la policía no sería capaz de abrir nuevamente la carpeta, además de la falta de pruebas." — el hombre pelinegro dejó su vaso e indicando a su lacayo que detuviera el audio, hizo una seña a la pequeña Nakime para que tomara nota de todo lo que estaba escuchando. La chica sacó su computadora portátil dejando a un lado su taza de chocolate y asintió lista para escribir.— "Kyogai, me siento un detective por esto hahaha~, pero al parecer él también se encargaba de traficar la droga aquí en el país, supongo que aún tiene contactos en México, ya que su ruta para entregar la droga era de México - Panamá y México - Japón. Además, ¿No te parece curioso? ¡Atacaron un burdel donde el principal entretenimiento eran mujeres, y él usaba a las chicas para transportar la droga sobre su cuerpo! Él afirmó que reclutaba mujeres en la ciudad, mismas que enviaba hacia Japón para hacer entregas de droga. Una vez que arriban al aeropuerto internacional de Narita, una persona de nombre Tohishi las recogía para llevarlas hacia algún punto de la ciudad donde entregaban la droga. Según en una entrevista que le hicieron, comentó que desde la cárcel dónde se encontraba le proporcionaban los datos de mujeres latinas y estadounidenses que vivían en el país para trasladar la droga hasta Japón. Estás mercancías también llegan hasta Estados Unidos entonces, lo más probable es qué también lleguen de ese país. También leí respecto a la droga latina es más efectiva por sus climas y por otros componentes que hacen muy violentos a quienes la consuman con exceso, tal vez deberíamos preguntarle también a Iguro-san y a la señorita Kanae, ellos tal vez sepan sobre las composiciones que tienen y el efecto que tiene contra el cuerpo. ¡Me sigue pareciendo curioso que un profesor de música me haya preguntado eso pero me alegra bastante haberte ayudado!"