The demon's lament

Capítulo 21: "Burning heart"

Nunca imaginé que llegaría un momento como este.

Siempre fui un chico el cuál era halagado por todos, pues mis padres me dieron una buena educación siendo una persona moral y con una excelente integridad. Desde que tengo memoria, fui el mejor alumno de las mejores academias, teniendo las mejores notas en música, danza, matemáticas, ciencias, historia, lenguas... Era perfecto y a pesar de eso yo... Me sentía solo. Mis padres siempre me estuvieron apoyando a pesar de su arduo trabajo, tanto así para tener la mejor vida posible y cuando fuera el momento de tener mi propia vida sin tener que batallar con los duros caminos de la vida. Siempre pensé en tener una familia, casarme y tener hijos para amarlos, cuidarlos y respetarlos. Ser como mamá y papá.

Pero por más que intentaba encajar con alguna chica me sentía solo y no entendía el motivo, siempre sentía la necesidad de que me amaran como yo lo hacía, pero al parecer todas buscaban lo mismo, mi apellido. Al parecer el amor era un término que por más que buscaba en los libros de historia sobre sus inicios, no lograba entender, ¿Quién inventó el amor? ¿Quién fue el primero en amar? ¿Es necesario que el amor sea en dos personas? ¿Es necesario el amor en un hombre y una mujer? En mis 23 años ya no entendía el término "amor".

Sin embargo... Cuando lo vi por primera vez sentí un extraño sentir en mi corazón, ¿Qué era este extraño golpeteo en mi pecho? No podía estar enamorado de una persona que solo había visto de casualidad, ¿Por qué tener que sentir atracción a un chico que ni siquiera se su nombre? Cuando estuvo cerca de mi en la caja mientras pagaba unos artículos de joyería, pensé, "¡Qué afortunado es este chico! Seguramente se casará con su novia y será feliz" pero no quise engañarme y cambie ese pensamiento por... "¡Qué afortunada es esa chica! Seguramente de casará con este chico y será muy feliz."

Además, ¿Qué podía hacer? No me conoce ni yo a él, solo fue un rápido encuentro en una joyería del centro comercial. Jamás nos volveríamos a ver... Oh eso pensé hasta que volví a encontrarlo.

Mi onceava cita de este año había fracasado, estaba deshecho, aunque pensando mejor no esperaba un buen resultado si soy sincero. Muchas veces mi hermano menor me preguntaba, ¿Cuál era la necesidad de tener alguien a quien amar? Tal vez él aún no lo pueda entender o le parezca algo no tan importante, pues a su edad tiene otras ilusiones, otros sueños, pero... Al haber nacido con todo en mano, llegaba un momento en el que me sentía solo al no compartir mis logros con nadie. No sentía que luchaba realmente por mis sueños.

¿Qué necesidad hay de tener varios trofeos y reconocimientos si no tenía alguien a quien compartirle todo de mi? Estaban mis padres y mi hermano pero llegó un punto en dónde entendí que ellos tienen su propia vida y yo... Estaba solo. Entonces recordé la vez que me encontré con ese chico, se veía feliz con su novia y yo solo fingía serlo.

— Kyojuro, ¿Después de clases irás al bar? — la voz de mi mejor amiga me despertó de aquellos tontos pensamientos y observando sus lindos ojos lilas sonreí.

— ¡Si! Está vez iré a uno nuevo que queda un poco lejos de mi casa pero cerca de la casa de mis padres, ¿Quieres acompañarme?

— Me gustaría, pero tengo que ir a la casa de Tomioka con su hermana... Kyojuro... ¿Estás seguro de querer continuar con esto?

— ¿Mh? ¿Con que?

— Con está farsa... Deja de fingir que estás bien estando en bares cuando es todo lo contrario, se que te sientes solo pero... No arriesgues tu vida en alcohol... Ya llegará alguien, lo prometo...

— Estoy bien Shinobu... No hay de que preocuparse~

— Ah... Se que quieres tener alguien con quien amar sin tener que pensar en "solo quiere mi apellido" pero es mejor de buscar y esperar a que la vida te de una señal...— se acercó a mi y tomando mi hombro me sonrió.— Te quiero Kyojuro y como tú amiga también quiero lo mejor para ti...~